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			por John Vibes25 Agosto 2015
 
			del Sitio Web
			
			TheAntiMedia 
			traducción de El Microlector 
			04 Septiembre 2015 
			del Sitio Web
			
			ElMicrolector 
			
			Versión 
			original en ingles 
			
			Versión 
			en italiano 
			  
			
 Un equipo de investigadores genealógicos de los sitios Web de 
			genealogía 
			MyHeritage.com
			y 
			Geni.com, han desarrollado 
			recientemente un árbol genealógico que demuestra que 
			
			Hillary Clinton y Donald 
			Trump son primos lejanos y que ambos comparten
			
			sangre 'real' en sus líneas 
			familiares.
 
 
			
  
			  
			Según el estudio, su 19º bisabuelo era el rey
			
			Eduardo III de Inglaterra.
 
 El árbol genealógico de ambos personajes se compone de una larga 
			línea de aristócratas en ambos lados.
 
 
			
  
 
			Este estudio confirma que muchas de las familias que dominan la 
			política y la economía actual, tienen vínculos de sangre que se 
			remontan a los señores feudales de la Edad Media.
 
 Por ejemplo, de acuerdo con investigadores de genealogía británicos 
			de
			
			Burkes Peerage, la mayoría de los 
			presidentes de la historia de EE.UU. estaban conectados a un selecto 
			grupo de linajes reales.
 
 Sin ir más lejos, en las elecciones de 2004, 
			
			George Bush
			y John Kerry, candidatos a la presidencia 
			opositores entre sí, resultaban ser ambos primos lejanos de la Reina 
			de Inglaterra.
 
 Incluso pertenecían a la misma sociedad secreta en la Universidad de 
			Yale:
			
			Skull and Bones.
 
 
			
  
 
			Otros estudios recientes, también concluyó que, con excepción de 
			Martin Van Buren, todos los Comandantes en Jefe de Estados 
			Unidos, incluyendo al actual presidente 
			
			Barack Obama, eran descendientes de un rey Inglés 
			medieval.
 
 
			
  
 
			  
			  
			  
			*** 
			  
			  
			NOTA
 
			  
			Esto demostraría varias cosas. 
				
					
					
					La primera es que nadie que 
					llegue a gobernar un país tan grande como EE.UU., llega por 
					casualidad o por méritos propios.
					
					La segunda es que el dominio de 
					la aristocracia y la nobleza propios del antiguo régimen, 
					siguen estando ahí, de forma encubierta y oculta a los ojos 
					de la gente. En el fondo, EE.UU. sigue estando dominada de 
					alguna manera por la corona británica.
					
					Y la tercera es que los 
					políticos progresistas y los conservadores, en el fondo son 
					la misma cosa y sirven a los mismos intereses. 
			Y todo ello sin entrar en teorías 
			conspirativas mucho más avanzadas y que viendo lo visto, tienen 
			mucha base real… 
			  
			  
			
			
			 
			
 
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