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por John Lash Diciembre 2004 Andalucía del Sitio Web MetaHistory
traducción de
Adela Kaufmann
Mientras más extraño se vuelve, más sentido tiene. Y mientras más sentido tiene, más imaginación se necesita para permanecer a bordo con la experiencia gnóstica.
Ese es el gran reto de la trayectoria de la aplicada ciencia visionaria, las noéticas de la hipercepción.
(Tengan paciencia conmigo, amigos: hipercepción es mi término propuesto para las elevadas facultades de conciencia como se demuestra en los siddhis de los yoguis y lamas de Asia, y la destreza visionaria de los chamanes de todo el mundo. Por no hablar de las facultades naturales empáticas de los niños y los animales. La comunión con Gaia incita espontáneamente la hipercepción, percepción dirigida en "estados alterados".)
Parece escaparse la observación de que la herejía se deriva del griego hairesis, "elección." Ser un hereje significa tener opciones, optar por otra forma de creer, otro tipo de conocimiento, otro canal de percepción, otro curso de experiencia. La herejía es sobre tener opciones, y algunas veces esas opciones son bastante escandalosas.
Con el episodio de la conversión de los Sabaoth, se nos presenta un acuerdo para romper, tal vez la idea más extravagante en la tradición oculta y gnóstica: La pre-existencia de la especie humana en el orden cósmico
En el Mito de Gaia , la forma preexistente, pre-terrestre de la humanidad es llamada Atu Kadmon. Este es un juego de Adam Kadmon, "criatura de la tierra, compuesta de letras o códigos", un término que se encuentra en la Kabala.
Atu denota el producto de emanación divina, intención eónica. (En sánscrito, Ati significa "supremo", como en Atiyoga o Dzogchen, el noveno camino y el más alto del budismo.)
La palabra inventada Kadmon significa "unidad codificada," comparable a nuestra concepción moderna del genoma. Atu Kadmon es la mónada codificada para la especie humana.
El mito gnóstico de la creación de la humanidad (antropogénesis) describe cómo esta mónada fue emanada del Pleroma en un rito realizado por los Eones, los Dioses.
(Técnicamente, esto no es un "mito de la creación" comparable al del Génesis en la Biblia, sino una descripción imaginativa de emanación cósmica.)
A través de un complejo proceso de colaboración, una singularidad emerge del Creador, la Fuente Increada, y luego es meticulosamente canalizado en una onda estacionaria que se proyecta a través de una matriz circular para producir un depósito fractal en las extremidades exteriores de la galaxia. (El Mito de Gaia, Episodios 4 al 7.)
El Niño de la Luz
Ya vimos en el episodio de la conversión de Sabaoth como el Eón Sophia avergüenza a Yaldabaoth y le advierte de su fin.
Haciendo esto, Ella invoca una visión, Ella llama a los testigos cósmicos para que vean lo que ella ve.
Este es uno de los momentos sublimes, cautivantes de la cosmología gnóstica. El Eón Sophia ha sido sorprendida por su inmersión en las regiones exteriores de la galaxia, pero poco a poco Ella vuelve. En un momento decisivo, Ella es capaz de reunir Sus poderes y recuperar la visión de lo que ella, en unión con su consorte, el Eón Cristos, había proyectado originalmente del núcleo Plerómico.
Como se describe en el episodio 9 del Mito de Gaia, "Antes de la Niebla de Orión - Before Orion's Mist":
Lo que Sophia ve le da fuerzas para desafiar a Yaldabaoth, el Señor Arconte, invocando la visión de la humanidad por venir.
Este momento clave del escenario de la Diosa Caída se repite una docena de veces en varios códices, pero más vívidamente en El Apócrifo de Juan.
Sin entrar en un comentario elaborado, un par de puntos clave en esta narración, implicando difíciles cuestiones de traducción, es necesario aclarar.
Estudiosos revisionistas como Marvin Meyer insisten en la traducción de la palabra copta rhome como "humano" en lugar de "hombre".
Por lo tanto, el pronunciamiento de Sophia,
Karen King, en su traducción del Evangelio de María (que se encuentra en el Códice de Berlín, junto con un proyecto del Apócrifo de Juan) opta por el lenguaje genérico limpio y sin prejuicios de género.
Por supuesto, King no extrapola el material gnóstico en términos astronómicos, como yo. Ningún erudito en su sano juicio podría proponer, o incluso implicar, que "la imagen de la esfera divina" es un campo biológico en el cosmos externo, así como un componente subjetivo de la psique humana.)
Por lo tanto, hay un número de opciones para su traducción humana, Humano Primordial, Verdadero Humano, Humanidad Divina, Niño, Niño Divino, Niño de la Luz.
Hace años propuse la Devanthropos , "La humanidad radiante" para la plantilla pre-existente.
El copto es extremadamente pobre en expresión metafísica y poética, y se presta muy torpemente a las ideas e imágenes que requieren una sintaxis elaborada. Por otra parte, una de cada cinco palabras coptas en los códices es un préstamo del griego.
La traducción de los textos coptos es como usar una gama de matices poéticos que rellenan el crudo apuntalamiento de los originales griegos.
Los problemas se producen debido a que los "originales" griegos, no
mejores que las confusas e incoherentes notas, en primer lugar, han
sido traducidas por escribanos que no entendían muy bien, en todo
caso.
Dios,
el Creador Masculino
Desafortunadamente, el copista copto del Apócrifo de Juan acarrea la palabra griega Andreos, "macho", dando un sesgo masculino de la matriz cósmica de la humanidad. En otras partes del Apócrifo de Juan y los otros tratados cosmológicos, anthropos se utiliza para indicar la humanidad genérica y sin sesgo sexual.
El equivalente copto es rhome, "humano". (Pronunciado RO-mei.)
En El Origen del Mundo, la plantilla Anthropos es llamado "Adam de la Luz" y "Santo Adamas." (108: 20-25) Esta concepción fue absorbida en la Kabala, donde llega a ser visto en Adam Kadmon, el "Hombre Primordial" (en la foto).
Penetra en la Kabalah y otros sistemas ocultos que conservan (o pretenden preservar) las enseñanzas de misterio, incluyendo la noción herética de la pre-existencia de la humanidad. La ilustración de arriba muestra una versión típica de la Humanidad Primordial representada como una figura masculina embellecido con la iconografía cósmica y símbolos ocultos.
En El Héroe, señalé que,
Hay una tradición de larga data en juego aquí, por supuesto - por no hablar de profundas tendencias formativas "arquetípicas" en la psique humana. Sin embargo, el momento para un gran cambio psíquico puede estar a la mano...
Un par de otros puntos de aclaración sobre el pasaje anterior. En
la jerga de las Escuelas de Misterios, el Eón
Sophia se
dice que está en la
novena, un término código de la esfera terrestre. La
Octava indica la zona estrellada visible que rodea la Tierra, y el
séptimo lugar, el Heptad,
es el reino planetario exclusivo de la Tierra, como ya se ha
explicado.
El monoteísmo es la fijación de Yaldabaoth en su ego ilusorio, y esta ilusión infecta a todos los que lo adoptan como el ser supremo. La teología de Un Solo Dios lleva y hace cumplir una pesada agenda patriarcal. La imagen gnóstica del Metropator, los Padres Cósmicos, tiene éxito en evitar un sesgo, ya sea masculino o femenino de la Divinidad.
Este lenguaje recuerda vívidamente el Yab-Yum del
budismo tibetano, y el acoplamiento Shiva-Shakti del Tantra hindú.
Más de una versión de la humanidad procede del código monádico.
Así que una representación apta sería,
La cepa de la humanidad a la que pertenecemos es una consecuencia de la plantilla "maestra" - Vamos a ver el lenguaje, muchachos! - Depositado en la Nebulosa de Orión.
El Devanthropos es un lugar masivo de singularidad que engendra cepas humanas en entornos similares a la Tierra a lo largo de la galaxia, de cuyo núcleo central emergió la singularidad.
Esta emanación de banda ancha de la vida orgánica es exclusiva de "nuestra" galaxia, pero nuestra versión de la misma no es única dentro de esta galaxia.
Enlace Narrativo
El Mito de Gaia es insuperable, ya que contiene la única descripción de la vida extraterrestre inherente a la condición humana, y cosmológicamente situada.
Como dijo M.C. Hammer, dijo, hablando desde el fondo de sus pantalones,
El catecismo gnóstico dice claramente:
Cuando nos damos cuenta de quienes son los Arcontes, por fin podemos entender quiénes somos.
El secreto del potencial humano, nuestra dotación Sofiánica se vuelve evidente cuando nos damos cuenta de lo que la amenaza, y cómo. Esto es realmente extraño, y sin embargo, tiene mucho sentido. Descubrimos nuestra humanidad en el momento mismo en que estamos más en riesgo de perderla, y ese momento ha llegado.
Siempre y cuando no lleguemos a esta toma de conciencia, la revelación de nuestra propia identidad como una especie de pre-existente, nunca vamos a ver a través de la ilusión de nuestro aislamiento en este planeta solitario, la Tierra.
Este es el gran salto imaginativo de la humanidad hoy.
¿Por qué, entonces, sufrimos la ilusión de la cuarentena cósmica?
Llamada anomia, "aberración", en El Apócrifo de Juan y en otros lugares, la demencia de los Arcontes es evidente en nuestras propias mentes, especialmente en las ideas religiosas, tales como la creencia de que nosotros, la especie humana, somos la única especie suprema y única, creada a “la imagen de Dios”.
Más
bien, la humanidad es la evolución de composición abierta de una
mónada codificada con infinito potencial para desarrollarse en
formas novedosas. Para
ello, la especie requiere un entorno especial que refleja su
potencial más profundo, así como su dependencia en el intercambio
con otras especies.
Somos la excepcional promesa de este hermoso y simbiótico mundo, no porque seamos los descendientes más privilegiados del creador Dios masculino, sino porque tenemos la capacidad única de perturbar las armonías operativas de la Tierra por nuestra ignorancia. Detectemos y corrijamos esa ignorancia y vamos por buen camino con los propósitos de Gaia.
No podemos continuar en el camino de Gaia, a menos que entremos en
Su historia y vivamos en la descripción que proporciona. Nuestra
salvación en términos gnósticos es un enlace narrativo para el
planeta viviente, no la intervención sobrenatural de fuera de él -
que es el
estratagema arcóntico
Plástico por perla. Inteligencia artificial por genuino conocimiento vivo. El ciberespacio por jardín-espacio. Estacionamientos por glaciares. En una insidiosa táctica secundaria, de la que dependen en gran medida, hacen de la simulación una doble función como un ciego, así como un sustituto.
Ejemplo:
Naturalmente, nos volvemos muy recelosos de los modelos totalitarios, "narrativas maestras", etc.
Este recelo, aunque
perfectamente genuino y un signo de cordura, sirve para hacernos
olvidar la naturaleza de la "señora narrativa" que podemos
desarrollar con Gaia-Sophia.
Bueno, sí y no. El Mito no es totalitario, pero se necesita un grado excepcional de visión para ver cómo no es así. En realidad, el Mito es genérico para nuestra especie, por lo tanto uniforme en términos de narrativa.
El precioso reto con esta historia específica de la especie no es sólo para ponerlo en su propio camino, sino para salirse de su propio camino y realizar algo que le trascienda a usted. Esta es la razón por la cual el Mito Gaia debe ser transmitido y formado narrativamente, de forma mito-poética, mediante el recuerdo chamánico que requiere la muerte del ego.
Su historia a nuestra manera, pero no la desarrollamos de nuestra propia manera.
La desarrollamos yendo más allá de nosotros mismos. Al participar en Su Camino. Así, el Mitos tiene un aspecto cuasi totalitario, porque es uniforme en cuanto a la revelación de sus fuentes.
No es una carta blanca para la expresión personal, es un llamado a la expresión transpersonal.
Angustia del Anthropos
Las enseñanzas gnósticas son únicas proporcionando un extensivo fondo sobre el nacimiento del Sol, la formación de la Tierra, y su captura en el sistema planetario.
Este relato pone a los Arcontes en un entorno cósmico, junto con la humanidad - el molde pre-existente, pre-terrestre de la humanidad, que es. Atu Kadmon es nuestro origen cósmico como especie. Al igual que los Arcontes, nosotros somos extraterrestres - pero a nuestra propia manera.
En
lugar de estar hechos para reflejar una imagen preexistente de dios
(masculino, siete veces, arcóntico), la especie humana podría haber
sido concebida como un proyecto de Dios en la fabricación, un
experimento divino. La identificación
con Dios es un estratagema arcóntico.
Los Gnósticos genuinos no pretenden ser dioses en la tierra, deidades en forma humana. Aspiran a conocer tanto como los dioses, y lo que los dioses saben, pero no literalmente o incluso simbólicamente para convertirse en dioses. El Éxtasis Cognitivo trae momentos de identidad mística con la divinidad, por supuesto, pero también asegura y mejora la suprema discriminación entre lo humano y lo divino.
Los buenos psiconautas permanecen detrás de la medicina.
No se limita a afirmar que no estamos solos: Explica por qué no estamos solos. Explica por qué no podemos darnos el lujo de creer que estamos solos, o que somos, en cualquier forma, supremos y únicos.
Los gnósticos constantemente advirtieron que los Arcontes nos envidian nuestra humanidad. Para hacer frente a la insoportable angustia de su envidia, nuestros primos alienígenas intentan contagiarnos con su mentalidad para que podamos ser más como ellos y se reduzca su angustia.
Insinuando en nuestras mentes la creencia de que estamos hechos a la imagen de Dios, nos atraen a un juego mental que no podemos ganar, porque sus reglas son falsas, arbitrarias, ajenas a la experiencia humana.
El texto preciso recibido en lenguaje mitológico dice así:
La cosmología gnóstica es increíble, por la sutileza imaginativa de pasajes como éste.
Esto es noética aplicada, profunda enseñanza psicológica enmarcada en términos mitológicos. Los Arcontes creen que pueden crear a la humanidad a su imagen, y desean que la humanidad crea lo mismo!!
Careciendo de ennoia, los Arcontes no pueden crear, sólo pueden imitar.
Contemplando la plantilla Anthropos, ellos equivocadamente se imaginan que pueden crear a la humanidad a parecerse a sí mismos, y esto sigue siendo su más preciado deseo: que lleguemos a ser como ellos.
La única manera en que pueden lograr este objetivo es engañarnos a
que traicionemos nuestra humanidad básica. Los
gnósticos enseñaban que, debido a nuestro excepcionalmente gran
margen de error, somos una especie que puede desviarse de su curso
apropiado de evolución, y así traicionar su verdadero potencial. Si
esta tendencia de desviación no se controla y no se corrige, sí que
podríamos cumplir el deseo de los Arcontes.
"Arcontes somos nosotros", puede ser el mensaje más liberador en el
planeta.
Pero ¿cómo podemos gobernar sobre todo si no podemos incluso elegir las creencias que impulsan nuestro comportamiento, los pensamientos que rigen nuestras mentes?
En los tres primeros siglos de la era común, los maestros gnósticos que surgieron de las Escuelas de Misterios enseñaban que la herramienta fundamental de la intrusión alienígena es el programa salvacionista de la religión, centrado en la imagen de la divinidad humana.
Este es el mensaje central de la protesta contra las doctrinas gnósticas judeocristianas. Aquellos que fueron advertidos de este peligro se dirigieron a los gnósticos y los erradicaron. Si la protesta Gnóstica habría sido tenida en cuenta, el cristianismo tal como lo conocemos no podría haber llegado a ser.
Las enseñanzas gnósticas tenían que ser eliminadas a fin de que el
programa salvacionista pudiera
extenderse.
Divinidad Humana
Este truco sustituye de la fe en la especie, nuestra confianza en nuestro potencial de sabiduría interior, la creencia de que debemos ser hechos humanos a través de una reflexión sobrehumana, la Palabra hecha carne.
El arco-conte es divinidad humana. Si esta idea no había infectado a la imaginación de nuestra especie, el mundo no se vería nada como es hoy. La divinidad humana es el truco de confianza que nos permite perpetrar una multitud de pecados, que no son nada más que errores no corregidos, patrones de comportamiento ajeno a nuestras capacidades innatas.
A partir de la creencia en la divinidad humana proceden todos los grandes males heredados por la humanidad. Al igual que Cristo, todos empiezan con c: conversión, conquista, colonización, consumo.
Y más recientemente, el ciberespacio, donde los Arcontes han emigrado.
Finalmente, tienen un nicho seguro en el planeta. Mientras escribo estas palabras, me presento ante su altar, como pudiera estar haciendo usted cuando los lee. Pero yo no adoro allí.
Históricamente, el arco-con se ha convertido en tres etapas:
Ahora estamos cerrando una cuarta fase que se inició cuando la ciencia se hizo cargo del trabajo de la religión, en torno a 1650.
La quinta fase será corta, pero tal vez, no dulce. Nos enfrentamos a condiciones terminales, incluyendo el colapso climático y desencarnación cibernético de la especie.
Los gnósticos en la palabra clásica no sobrevivieron para enfrentarse al Islam, excepto tal vez en algunos movimientos subterráneos. (Sufi = Suphia?)
La Gnosis Radical Pagana era anti-judía y anti-cristiana en oposición a las ideologías salvacionistas comunes a los dos sistemas de creencias. Si los gnósticos hubieran sobrevivido hasta hoy en día, que se opondrían a Islam, otra mutación viral de la misma ideología, por los mismos motivos.
Los gnósticos no estaban en contra del amor, la tolerancia, el perdón, la autorregulación, la bondad, la compasión, o cualquier otra virtud genuina atribuida a la moral judaica y cristiana, y últimamente al Islam (¡qué farsa más repugnante!).
Ellos estaban en contra del marco ideológico de la salvación con sus tres componentes fundamentales: el dominio de la humanidad sobre la Tierra, la encarnación de la divinidad en forma humana, y la retribución final por el Padre Dios. (Más información sobre este punto crucial en el ensayo compañero, Cómo Estamos Desviados.)
Pero la voluntad de crear un mundo así tiene que ser forjada en la
realización de lo que nos enfrentamos
Modelado de la Humanidad
Entender la intrusión arcóntica requiere una compleja y amplia experiencia, una formación cosmológica hasta el nivel de posgrado.
Sin embargo, este antecedente,
...comprende esa parte de nuestra propia historia que vitalmente necesitamos aprender antes de que podamos entender el papel de los Arcontes en toda la historia.
Es un gran pedido, lo admito, pero puede ser la intuición decisiva que necesitamos hoy en día, la dosis fundamental de la "medicina del planeta" que puede restaurar la imaginación humana a su potencial divino.
En cualquier caso, no podemos posiblemente descifrar los fenómenos ET/OVNI sin saber lo que somos, hablando cósmicamente, y luego vernos a nosotros mismos en relación con nuestros primos cósmicos, los Arcontes, producidos por Sophia antes que emergiera la humanidad en la Tierra, pero no antes de que el Anthropos fuera sembrado en Orión.
En cuanto a los sistemas ocultistas y esotéricos que pretenden enseñarla "Humanidad Divina" - francamente, no estoy seguro de que se pueda confiar en ellos para entregar el niño.
Usted puede aprender mucho de estos modelos y sistemas, pero no se aprende casi nada acerca de Gaia. He dedicado mi vida desde la edad de cuatro años a la búsqueda de lo esotérico... Hablemos acerca de perderse en una historia de un perro hirsuto. ¿O es una historia de un dios hirsuto?
Yo no tengo la respuesta aquí, pero al menos el lenguaje de la cuestión es lo suficientemente preciso, por ahora. ¿Por qué el relato gnóstico de la preexistencia es tan crucial para el cambio por delante?
Debido a que la historia muestra cómo
Sophia Misma invoca a los Devantropos a poner al Señor Arconte en su
lugar . Y nosotros
tenemos que hacer lo mismo.
Son una especie depredadora específica con diseños especiales sobre la humanidad, que no debe confundirse con otras entidades no humanas, como la "Gente Estelar" y aliados de otras dimensiones, guardianes sobrenaturales, muertos, y otras cepas humanas de Anthropos que viven en entornos planetarios como el nuestro - todos los cuales son benevolentes o neutrales.
Esta foto es realmente enorme, pero la visión gnóstica es precisa en
la forma en que se especifica la
naturaleza depredadora de los Arcontes.
Primero tenemos que definir nuestro papel en la corrección del Eón Sophia: se trata nada menos que definir el propósito de la humanidad en la evolución de Gaia. Si estamos inmersos en un proyecto, y alguien nos está ayudando o impidiéndonos, no podemos saber cómo lo están haciendo, a menos que primero entendamos lo que nosotros estamos haciendo.
Esto es sólo sentido común.
Enseñando los Mitos
(Por supuesto, hay un enorme recurso de ciencia-ficción en el escenario gnóstico Arcóntico. Podría suceder que la historia se extienda como una simple historia, y que iba a estar bien.)
De cómo la cosmología gnóstica recuperada podría difundirse, y a quién, es una preocupación constante para mí, por lo que podría ser apropiado cerrar con algunas reflexiones personales sobre este tema.
Está destinado a las generaciones por venir, pero tiene que ser transmitido por la generación de hoy en día, por una porción elegida, parte auto-seleccionada.
En la mitología hindú relacionada con las Edades Mundiales, aquellos que preparan el futuro en el presente se les llama Shishta, el "grupo de la semilla."
Esta palabra se deriva de la palabra sánscrita común shisha, "discípulo, estudiante." Shishta significa algo así como "el cuerpo estudiantil." O "el aprendizaje de fiesta", para usar un término muy adecuado.
La marca principal de la Shishta es igualdad en conocimiento. Todo el mundo tiene su parte y todos los que aprenden, también enseñan.
Yo diría que este es el requisito principal para la transmisión del Mito de Gaia y el escenario Arcóntico: aquellos que lo aprenden, enseñan. Al menos eso es lo que yo propondría como marca principal del Shishta. La aspiración principal, si se quiere.
Para aquellos que se han consagrado a Gaia, el Mito no es cualquier historia, no es sólo una indignante trama de ciencia-ficción adornada con filigrana teológica. Es Su historia.
Para mantener las cosas claras, la historia no es fácil, y puede muy bien exigir una vida de disciplina imaginativa. Si usted se lo puede permitir. La muerte del Ego en más de una dosis única. Si usted puede atreverse.
Las técnicas de éxtasis cognitivo, incluyendo la adivinación, la danza y el trance, son las mejores herramientas para la difusión de los Mitos en su forma narrativa en constante expansión. Al mismo tiempo, hay un equilibrio moral al observar.
Todo lo que aprendemos acerca de Anthropos y
los Arcontes debe equilibrarse entre nuestro auto-conocimiento
compartido como especie y nuestros solitarios momentos individuales
de comunión con Gaia.
Así es que cuando el salmón nada fuera de curso, cuando las
ballenas quedan varadas, cuando los gansos que emigran al sur
terminan en Swansea, nos tambaleamos, estamos profundamente
afectados de ver nuestros parientes animales tan desorientados, tan
desprendidos de cumplir su hermoso destino.
La promesa que llevamos es excepcional, no por nuestra presunta
condición privilegiada, y no porque nosotros somos la divinidad en
forma humana - ningún humano alguna vez lo fue, ni necesita serlo -
sino debido a nuestras tendencias degradantes. Esta
es la lección que debemos aprender de nuestra inconsciente
complicidad con nuestros primos alienígenas.
Allí está nuestra promesa, cumplido perpetuamente.
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