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Sé que muchos pensarán que
miento, y me expongo al más acerbo ridículo ante el
concepto adocenado de aquellos que, siguiendo la
corriente del pensamiento común de las gentes "serias",
no se atreven a hablar en público de asuntos que,
todavía, no han sido comprobados científicamente por ese
conjunto muy respetable de sabios de la Tierra que
- igual a sus colegas de antaño - sólo aceptan los
fenómenos producidos por ellos mismos en sus propios
laboratorios y dentro de sus propios métodos o sistemas
de investigación.
Pero al escribir estas líneas, por extrañas que resulten
a todos ellos, me limito a cumplir la promesa empeñada a
un hombre al que me unió la más estrecha y fraterna
amistad; un hombre cuya sinceridad y corrección de
conducta pude apreciar desde los días lejanos del
colegio, quien me narró los hechos a que voy a
referirme, dándome pruebas irrefutables de su veracidad,
antes de abandonar este planeta para ir a vivir en otro
lejano astro de nuestro sistema solar.
Ya no me importa la risa burlona de muchos, ni la
piadosa idea de quienes piensen que he perdido la razón.
Cumplo la palabra dada al hombre que fue para mí un
hermano, y declaro, con todo valor ante el escarnio, que
los hechos extraordinarios motivo de esta narración no
han sido fruto de una mente alucinada, ni producto de
una fantasía de escritor, sino la realidad cruda y
tangible, asombrosa es cierto, pero vivida
conscientemente por un hombre de esta Tierra que hoy se
encuentra, muy lejos, en el Cosmos...
YOSIP IBRAHIM
UN INVESTIGADOR
ROSARINO
TRAS LAS HUELLAS DE LOS OVNIS
Del Sitio Web
NuevosTiempos
Tuve oportunidad de estar en la casa del Dr. José
Rosciano Holder, más conocido por su seudónimo de
Yosip Ibrahim, el autor de “Yo visité Ganímedes” y
“Mi preparación para Ganímedes”.
Él nos reveló que
era maestro de una escuela esotérica, y que sus
conocimientos los daba al vulgo a través del
fenómeno OVNI.
En este caso vemos
como el fenómeno OVNI se lo utiliza para otra cosa,
ya que el “gancho” era el OVNI pero lo que a él
realmente le interesaba era difundir sus
conocimientos espirituales.
Dr. Luis Reinoso
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