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			por Comandante Clomrosegunda mitad de 1998
 
			de
			
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			En la gran red de 
			información del Universo, portadores de un virus se infiltraron 
			desde espacios y tiempos remotos. Venían de alterar programas 
			evolutivos en un espacio-tiempo que preexistía a toda esta 
			experiencia cósmica en la que nos Encontramos. Todas las 
			precauciones tomadas por los Programadores Universales para evitar 
			la incursión de los agentes corruptores de programas de evolución, 
			fueron insuficientes. Millones de centrales galácticas de 
			programación fueron interferidas por estos agentes. 
 
			
			Alteraciones
 
			 El programa general de evolución para mundos físicos, fue alterado 
			en cuanta galaxia los agentes instaladores del virus consiguieron 
			establecerse. Comenzaron presentando a los Programadores Galácticos, 
			la propuesta de trabajar con un programa evolutivo distinto del 
			establecido por los Programadores Universales. Sus herramientas de 
			trabajo parecían muy interesantes, innovadoras y capaces de lograr 
			resultados nunca antes experimentados por los Programadores 
			Galácticos.
 
			  
			 Éstos, sin conocimiento de los problemas de 
			funcionamiento con que irían a encontrarse si utilizaban el programa 
			que les fue ofrecido, comenzaron a instalarlo en los sistemas 
			planetarios, a aplicar sus herramientas, ejecutar las tareas 
			correspondientes, y esperar los resultados previstos. Pero estos 
			resultados no fueron los que se preveían: el programa traía una 
			falla quizá irremediable. Y millones de galaxias dejaron de 
			funcionar evolutivamente dentro de los programas del Orden 
			Universal, para sufrir todo tipo de alteraciones involutivas.
 
			
			La Evolución Normal
 
			 El Programa Evolutivo Universal trabajaba con las mentes de los 
			seres de los mundos físicos conectadas en red: una transferencia 
			permanente de información telepática, permitía que la interconexión 
			unificara a los seres, al no existir pensamiento que no pudiera ser 
			captado por otros, lo cual aseguraba que nadie estuviera aislado, 
			sin ayuda de los demás, o que pretendiera hacer algo oculto en 
			perjuicio de alguien; las malas intenciones no existían, por la 
			confianza y la seguridad que permitía este funcionamiento en red. No 
			había un "libre albedrío" en el sentido en que se lo entiende 
			comúnmente, pero nadie necesitaba experimentarlo: no hacía falta 
			escapar a los controles que el Programa Evolutivo Universal establecía, porque con él se vivía con sentido de unidad y en la 
			felicidad de ser uno con el Todo.
 
			  
			La finalidad de la 
			existencia consistía en desarrollarse a partir de la integración con 
			el Universo, aprendiendo de él todo lo que se debe ser.  
			Además, el programa permitía un constante acceso a los archivos de 
			información almacenada en las propias memorias, en otros planos, 
			mundos físicos y cuerpos en que se haya estado. De este modo, la 
			muerte y la inconciencia de las experiencias pasadas no existían, 
			porque cada vez que se cambiaba de estado y de cuerpo físico, se 
			llevaba una continuidad de conciencia, una sola vida. Así, las 
			memorias de experiencias anteriores permanecían accesibles, activas, 
			utilizables en todo momento.
 
			También los seres estaban integrados a la red de los Programadores 
			Galácticos y de los Programadores Universales, de modo que recibían 
			y transmitían información en permanente intercambio con los planos 
			superiores. Así, no habría posibilidad de situaciones que escaparan 
			al control y al orden establecido, por lo que la vida se 
			desarrollaba dentro de los lineamientos prefijados para la normal 
			evolución.
 
 
			
			El Nuevo Programa
 
			 El programa alternativo extrauniversal, traído del exterior del 
			Universo por los agentes venidos de la experiencia cósmica anterior, 
			proponía trabajar con las mentes de los individuos desconectadas 
			entre sí: sin transferencia de información telepática, la 
			desconexión desuniría a los seres, y al no poder ser captado el 
			pensamiento de uno por los otros, en ese aislamiento, sin ayuda de 
			los demás, y pudiendo hacer algo oculto en perjuicio de alguien, las 
			malas intenciones podrían existir, así como la desconfianza 
			recíproca y la inseguridad que produciría este funcionamiento 
			autónomo. Así se lograría un "libre albedrío" en el sentido en que 
			se lo entiende comúnmente, y todos empezarían a necesitar 
			experimentarlo: haría falta escapar a los controles que el Programa 
			Evolutivo Universal establecía, porque con el nuevo concepto de 
			libertad se viviría con sentido individual y en la felicidad de ser 
			uno mismo. La finalidad de la existencia consistiría en 
			desarrollarse a partir de la desconexión con el Universo, 
			aprendiendo a ser uno mismo, por sí mismo.
 
			Además, el programa impedía el acceso a los archivos de información 
			almacenada en otros planos, mundos físicos y cuerpos en que se haya 
			estado. De este modo, la muerte y la inconciencia de las 
			experiencias pasadas harían que cada vez que se cambiara de estado y 
			de cuerpo físico, se interrumpiera la continuidad de conciencia, 
			siendo una vida de muchas vidas fragmentadas. Así, las memorias de 
			experiencias anteriores permanecerían inaccesibles, inactivas, 
			inutilizables en todo momento.
 
			También los seres estarían desconectados de la red de los 
			Programadores Galácticos y los Programadores Universales, de modo 
			que ni recibirían ni transmitirían información que los mantuviera en 
			permanente intercambio con los planos superiores. Así, habría 
			posibilidad de experimentar nuevas situaciones más allá del control 
			y del orden establecido, desarrollándose la vida dentro de un nuevo 
			concepto de evolución.
 
			El programa establecía que los bloqueos mentales a ser aplicados en 
			los habitantes de los mundos físicos, lograrían estos propósitos. La 
			desunión resultante de que las mentes no pudieran operar en red, 
			llevaría a conflictos que alcanzarían grados destructivos a nivel 
			planetario. Pero toda confrontación entre seres permitiría conocer 
			hasta qué punto la negatividad nunca antes liberada, podría llegar. 
			Sólo llevando el Libre Albedrío al extremo, se sabría hasta donde un 
			ser es capaz de tocar fondo en sus potencialidades negativas, 
			estimulables plenamente en mundos densos en los que se le bloquearan 
			las potencialidades mentales.
 
			  
			Esto implicaría el 
			impedimento de regeneración física con el uso de las energías 
			psíquicas, en caso de alteraciones en el cuerpo. Accidentes y 
			enfermedades causarían daños inevitables, al estar las mentes 
			bloqueadas, impedidas de autocuración energética. La densificación 
			del ser en estos niveles, sometiéndolo al dolor resultante de 
			desequilibrios físicos y a necesidades fisiológicas, implicaría la 
			necesidad de aprovisionamiento de alimentos, cuya carencia 
			provocaría malestares físicos y mentales. La lucha por obtener 
			alimentos y otros recursos escasos necesarios, llevaría a estados de 
			violencia, en la lucha por la supervivencia y por el poder. En esta 
			dinámica vital, el egoísmo prevalecería sobre el amor.  
			Luego de conocer la negatividad en todos estos y otros aspectos, el 
			programa determinaría el restablecimiento de las condiciones de 
			equilibrio y reconexión entre los seres, reactivándoles sus archivos 
			de memorias de manifestaciones vitales anteriores, y sus capacidades 
			telepáticas para funcionar en red. Unidos otra vez, pondrían en 
			funcionamiento sucesivas sesiones cíclicas de administración del 
			programa, ya aprendido por ellos, aplicándolo sobre otros seres a 
			ser instruidos en la nueva dinámica evolutiva. De alumnos, pasarían 
			a ser maestros, ejecutores administrativos a nivel de sistemas 
			planetarios, de este mecanismo que los Programadores Galácticos 
			dejarían incorporado en reemplazo del Programa Evolutivo Universal.
 
 
			
			¿Fracaso o intencionalidad?
 
			Así planteado, todos los mundos que han estallado en cruentas 
			guerras cósmicas parecen ser una inevitable experiencia de 
			aprendizaje, útil a los fines de conocer el lado oscuro del ser. Si 
			después de estos conflictos el retorno al equilibrio fuera seguro, 
			el programa instalado en las galaxias sería más útil que el 
			universal, pues permitiría un conocimiento pleno de la dualidad, de 
			los extremos a los que se puede llegar, evolutiva e involutivamente.
 
			  
			Pero el gran problema es 
			que la destrucción, el sentido individual de la existencia y la 
			negativa a retornar al orden, se han manifestado como situaciones 
			que no han podido resolverse: muchos sujetos de esta programación 
			han desarrollado la negatividad a niveles incorregibles; no han 
			tomado a las experiencias negativas como un medio de aprendizaje 
			para luego retornar a la Luz con conocimientos mayores, sino que 
			hacen uso de la negatividad como fin en sí mismo, para sus 
			ambiciones de poder que no han podido vencer.  
			Si esto fuera una falla del programa, se diría que la experiencia 
			fue un verdadero fracaso. Pero la realidad es que los daños finales 
			estaban previstos en el programa: había sido diseñado para corromper 
			el orden, no para un reordenamiento final, luego de la experiencia 
			negativa ensayada. Los programadores de este virus de la involución 
			disfrazado de programa evolutivo, sabían perfectamente lo que 
			lograrían. Ellos habían desarrollado una estrategia operacional 
			sistemática, de modo que las galaxias quedaran desconectadas de la 
			red de información del Universo. El programa instalado en cada 
			galaxia anularía el funcionamiento en red con los planos superiores, 
			para luego hacer que las galaxias funcionaran en red en un sistema 
			paralelo al de los Programadores Universales. Algo así como un 
			Universo dentro de otro, que quedaría totalmente desarticulado en su 
			funcionamiento e incapaz de restablecer los circuitos de conexión e 
			información con los mundos galácticos.
 
 
			
			Intervención
 
			 Ante esta situación de incapacidad operativa de los Programadores 
			Universales, millones de galaxias fueron destruidas por ellos, para 
			evitar la propagación virósica hacia las que todavía estaban a 
			salvo. Agentes de intervención procedentes del mismo espacio-tiempo 
			extrauniversal que los portadores del virus, vinieron a combatirlo. 
			Los programadores que trajeron el virus deberán ser destruidos, si 
			no desisten de seguir empleándolo. Si se reintegran al Orden Cósmico 
			del que se alejaron, la Luz brillará con plenitud nunca antes 
			alcanzada, pues la experiencia negativa quedaría atrás, y sus 
			responsables integrarían un Todo en el que volverían a ser lo 
			luminosos que fueron en los inicios.
 
			  
			Esa es la tentativa que 
			los agentes de intervención extrauniversales se han propuesto, como 
			alternativa para no tener que destruir a los causantes de todos los 
			conflictos sufridos por éste y por otros Universos. Lo cual parece 
			ser utópico: se siguen resistiendo, persistiendo en en sus 
			metodologías desviadas del Amor Universal.  
			En los mundos físicos, los seres ignoran todo este manejo de 
			programas que se ha efectuado, y cuál fue el propósito de los 
			programadores que lo trajeron: los habitantes de esferas físicas 
			creen que todo este plan es controlado por los Programadores 
			Universales. Ignoran que el Programa Evolutivo Universal no funciona 
			sometiendo a los seres a condiciones adversas en los mundos, 
			bloqueándoles funciones mentales y buscando experiencias negativas 
			para conocer la dualidad. Al ignorar esto, y tener como Universal al 
			programa virósico con el que han sido infectados, cuando mensajeros 
			pertenecientes a las fuerzas de intervención les transmiten 
			información sobre cuál es el verdadero programa de evolución del 
			Universo, éste les parece pobre y facilista, inhibitorio para el 
			"libre albedrío" como lo entienden.
 
			En la Tierra, agentes de intervención que viven como humanos, fueron 
			contactados por semejantes suyos desde el cosmos. Producto de las 
			transmisiones que les efectuaron, existe información documentada por 
			ellos, con la finalidad de ser dada a conocer, para que se sepa toda 
			la verdadera historia del programa original y los virus que han 
			destruido la concepción programática que existía en las conciencias 
			de los encargados de la administración de los sistemas evolutivos 
			galácticos. Ante la resistencia mostrada por la mayoría de quienes 
			recibieron la información transmitida, las expectativas de 
			transmisión en gran escala con respuesta positiva, son mínimas. El 
			virus instalado en las mentes humanas parece, en la mayoría y salvo 
			casos excepcionales, no tener forma de ser contrarrestado para que 
			las conciencias se liberen de la manipulación que sufren sin 
			saberlo.
 
 
			
			Cosmohackers
 
			 Todo el sistema de información en la Tierra está montado para que, 
			censura mediante y con preconceptos dogmáticos que le impiden a la 
			mayoría de la gente aceptar la transmisión, el Programa Evolutivo 
			Universal no pueda ser reinstalado en esta zona galáctica 
			rigurosamente controlada. No obstante, algunos Cosmohackers 
			consiguen romper este bloqueo de información, y logran acceder a 
			fuentes que les revelan la gran conspiración: pensadores, rebeldes 
			al sistema, de tiempos pasados y presentes, han tenido algún canal 
			abierto para percibir la falsedad de que este mundo esté dentro del 
			Programa Evolutivo Universal, y han dejado escrito lo que pensaron. 
			Solidarios entre sí y con cuanta persona puedan ayudar a tomar 
			conciencia de esto que pasa, los Cosmohackers libran su combate como 
			guerreros de la libertad de información, revelando de los secretos 
			ocultados por los administradores del sistema de control de la 
			humanidad de la Tierra.
 
			  
			En la red de información 
			que las mentes galácticas e intergalácticas conforman 
			interconectadas, el ciberespacio cósmico de navegación mental está 
			programado para denegarle a los seres el acceso al conocimiento de 
			cómo fue la instalación del virus y cómo era el programa original. 
			Un navegante mental que ha incursionado en los archivos 
			restringidos, al tener las claves de acceso, puede hackearle el 
			programa a los administradores del sistema, extrayendo la 
			información encriptada. Esta navegación requiere demasiado tiempo: 
			ir a bibliotecas, librerías, conferencias, charlas con personas, 
			películas con mensajes reveladores, Internet...  
			  
			Por eso es preciso que 
			los navegantes dispuestos al hackeo cósmico recurran a quienes ya 
			tengan acceso directo a la información transmitida por los 
			interventores extrauniversales en contacto con sus semejantes que 
			viven en la Tierra. Esta información es accesible a través de la web 
			que se menciona al final de este mensaje. Dicha web es parte del 
			programa antivirus que el Cosmohacker abajo firmante, ha diseñado 
			luego de haber venido al planeta a colaborar con los interventores 
			extrauniversales aquí actuantes. Se aconseja no efectuar la 
			instalación del anti-virus en la mente, sin una lectura extensa y 
			profunda del contenido de la web, o no se estará plenamente 
			preparado para saber cómo operarlo.  
			  
			Y para evitar conflictos 
			internos y problemas ante los que no se tenga coraje para 
			enfrentarlos, se recomienda no acceder a esta web a quien no esté 
			dispuesto a ser un Hacker Cósmico en la Tierra, guerrero de la 
			libertad de información en el Universo, la cual ha sido impedida por 
			los grandes manipuladores, y que circulará cada vez más en el 
			planeta, a través de la Red Mundial de Libres Rebeldes.  
			  
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