Diciembre 10, 2007

del Sitio Web TrinityATierra

 

HAARP es un arma de destrucción masiva, capaz de desestabilizar los sistemas agrícolas y ecológicos globalmente.

 

“La Guerra del Clima” es una amenaza potencial al futuro de la humanidad, pero casualmente ha sido excluido de los informes por los que el IPCC recibió el Premio Novel de la Paz en el 2007 (siglas para el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático)

Aunque rara vez reconocido en el debate sobre el cambio climático, el clima mundial puede ser modificado como consecuencia de una nueva generación de armas electromagnéticas sofisticadas. Las dos potencias, USA y Rusia han desarrollado una tecnología capaz de manipular el clima para usos militares.

El organismo encargado de estudiar todo lo que tiene que ver con el Cambio Climático ignora todas evidencias existentes y una más, el propio informe de las Fuerzas Aéreas de USA donde se hace mención expresa a herramientas tecnológicas sofisticadas que permiten manipular el clima.

Las técnicas de modificación medioambiental han sido aplicadas por EE.UU. durante más de medio siglo. El matemático John Von Neumann, junto con el Departamento de Defensa, comenzó su investigación sobre modificación del clima a finales de 1940 a la altura de la Guerra Fría y ya previó “formas de guerra climática todavía no imaginadas”. Durante la Guerra de Vietnam, se emplearon técnicas de “sembrado de nubes” desde 1967 con el Proyecto Popeye, el objetivo del cual era prolongar la estación de monzón y bloquear las rutas de suministro a lo largo del corredor Ho Chi Minh.

Como se ha podido leer en muchos posts de este y otros blogs sobre este tema, los militares norteamericanos han desarrollado capacidades muy avanzadas para permitir selectivamente alterar los patrones de clima. La tecnología está siendo perfeccionada por el Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia (también llamado HAARP), apéndice de a la Iniciativa de Defensa Estratégica o “Guerra de Las Galaxias”.

Desde un punto de vista militar, HAARP es un arma de destrucción masiva, que opera desde fuera de la atmósfera y es capaz de desestabilizar los sistemas ecológicas y agrícolas en el planeta. Un estudio fue solicitado en Diciembre a la Universidad del Aire por parte de las Fuerzas Aéreas de USA para identificar conceptos, tecnologías y técnicas que permitieran a Estados Unidos mantener la hegemonía del aire en los primeros 25 años del siglo XXI.

A su vez la universidad del aire se dirigió a distintos organismos e instituciones de la Universidad de Aire y a varios colegios y universidades. Todas ellas dieron como resultante una suerte de think tank y el resultado del estudio presentado meses después se llamó Air Force 2025 o en breve 2025. El informe, imaginamos que en su versión “light” ha sido desclasificado, y es susceptible de ser leído por cualquier ciudadano del planeta.

El dibujo de abajo está extraído del informe de la Fuerza Aérea 2025.

Según el informe de la Fuerza Aérea de USA llamado AF Final Report 2025,

“ofrece al combatiente una amplia gama de posibles opciones para defenderse o atacar al adversario”, “capacidades”, dice el documento, “tales como la creación de inundaciones, huracanes, sequías y terremotos”.

 

“La modificación del clima será parte de la seguridad internacional doméstica e internacional y podría ser llevado a cabo de forma unilateral podría tener aplicaciones ofensivas y defensivas y de espionaje.” La capacidad de generar precipitaciones, tormentas, niebla sobre la tierra o modificar el clima del espacio… y la producción de crear clima artificial son todas ellas parte integrante de una gama de tecnologías (militares)”.

Las manipulaciones climáticas están prohibidas por una convención internacional ratificada por la Asamblea General de las Naciones Unidas y ratificada en Río en 1992. Pero el debate abierto se ha convertido en un tema taboo lo que ocasiona que, muy a menudo, los ciudadanos lean las noticias que ofrecen blogs como este y muchos otros, sobre este tema con notable escepticismo fruto de su falta de información (y de su empecinamiento en no informarse).

 

Los analistas militares hace mutis por el foro, los metereólogos no investigan y los medio-ambientalistas centran toda su atención en las emisiones de CO2 y el Protocolo de Kyoto.

Pero, a pesar de la falta de reconocimiento en foro abierto, las manipulaciones del clima son algo tácitamente reconocido en los debates auspiciados por la ONU y en otros foros profesionales. Un análisis de las declaraciones del informe de la US Air Force apunta a todo ello: manipulación encubierta de patrones climáticos, sistemas de comunicaciones y de energía como arma de guerra global, que permite a EE.UU. dominar regiones enteras de planeta.

La herramienta puede ser dirigida contra países enemigos, ecosistemas y agricultura. Puede también afectar los mercados de ‘commodities’ (materias primas) y financieros. La irrupción en la agricultura crea una dependencia mayor de los alimentos de la ayuda humanitaria y de las cosechas de grano de EE.UU. y otros países occidentales. HAARP ha sido desarrollado por una asociación angloamericana entre Raytheon Corporation, que tiene las patentes de HAARP y la US Air Force junto al British Aerospace Systems (BAES).

La “geo-ingeniería” es reconocida pero sus aplicaciones militares no son objeto del análisis ni tampoco lo son la investigación científica, a juzgar por las miles de páginas de los informes del IPCC basados en la opinión de expertos, investigadores, 2500 científicos, medio-ambientalistas y políticos donde se pasa por encima de estas cuestiones y ni siquiera se las menciona.

 

Esto es bastante llamativo ya que en el Informe (ver enlaces) de las Fuerzas Aéreas se mencionan técnicas de manipulación del clima que incluyen por supuesto los consabidos chemtrails, como se ha mencionado tantas veces.

Sin ningún género de dudas, la guerra climática amenaza el futuro de la humanidad, aunque casualmente ha sido excluido de los informes de la IPCC organismo que recibió en 2007 el Premio Novel de la Paz.

Pero como digo el IPCC,

  • ignorando de forma escandalosa los tratados en los que se ha ratificado la prohibición de la manipulación del clima

  • la evidencia de la tecnología HAARP y sus instalaciones

  • las patentes relacionadas con HAARP que pueden ser consultadas y mencionan específicamente la manipulación del clima como uno de los efectos del uso de dicha tecnología

  • la mención de la preocupación en la Duma Rusa por el uso del HAARP como herramienta de guerra contra otros países enemigos o no enemigos a Estados Unidos

  • evidencia estadística sobre los efectos causados por las herramientas del tipo HAARP en el clima

  • por último y especialmente, ignorando la evidencia del propio informe firmado por las Fuerzas Aéreas 2025,

...no ha considerado que este asunto mereciera un estudio y una reflexión sobre los efectos que produce y puede producir en el clima.

 

El esquema de abajo donde se señalan los espejos artificiales ionosféricos está extraído del informe de la propia Air Force 2025.

Lo cual nos dice una vez más el nivel escandaloso de corrupción o de ceguera de los organismos tales como el IPCC (siglas para Panel para el estudio del Cambio Climático), que reitero, ha recibido el Premio Novel de la Paz en 2007.

 

Ese año sin duda pasará a la historia como el año en que la mentira sobre el Cambio Climático se hizo oficial, entró en nuestras escuelas, se hizo un hueco en todas las agendas gubernamentales y Al Gore se forró a base de dar conferencias contando un cuento chino absolutamente carente de sentido.

Dicho sea de paso, tampoco la influencia (crucial a todas luces) de herramientas como HAARP (y el sembrado de nubes con chemtrails), es un asunto de especial interés para el Gobierno Español tan interesado ahora en marcar como prioridad el Cambio Climático.


Evidentemente, ellos prefieren seguir diciendo que todas esas marcas que aparecen en las fotografías de satélite Meteosat no son otra cosa que estelas de condensación, o sea simple vapor de agua, eso sí, tercas y testarudas estelas de condensación, que en lugar de disiparse, tal y como marcan los cánones de la naturaleza y las leyes de la termodinámica, prefieren quedarse durante horas y días en nuestros cielos.

 

Tercas y testarudas estelas de condensación, tan testarudas, al menos, como las mentes de todos aquellos que siguen negando la evidencia.

Aunque el volumen más importante de este informe disponible para su lectura y descarga, Análisis de Operaciones, donde se describen las distintas tecnologías y métodos usados para alcanzar la total hegemonía del aire por parte de las fuerzas aéreas americanas, es bastante grueso, y sólo las mentes curiosas y empecinadas en conocer la verdad, lo leerán en su totalidad.


El dibujo de abajo está extraído del informe de la Air Force 2025.

Quien aun albergue dudas sobre la contundencia de la realidad que nos rodea, que solicite a quien esté mejor informado que le muestren las fuentes, si no es lo suficientemente atrevido o audaz como para buscarlas por sí mismo.

 

Pero la negación, sin dejar lugar a la duda, la negación permanente de todo lo que se plantea por parte de quienes analizan la realidad de una forma mas crítica, es simplemente necedad y ceguera irresponsable de quienes ni siquiera se preocupan por educarse, ni de educar a sus hijos acerca del planeta en que vivimos y sobre la forma en que funciona el sistema en que nos ha tocado vivir.

Desgraciadamente por culpa de ellos, por culpa de quienes prefieren vivir permanentemente con una venda sobre los ojos, el resto de la humanidad vive estancada, atrapada y obligada a esperar permanentemente a que la conciencia de los otros, alterada, dormida, deshumanizada, huidiza, infantil y subdesarrollada, ofrezca la oportunidad a los seres humanos del planeta (y, consecuentemente al planeta en su globalidad) de sumar un número suficiente como para consolidar una alternativa a este mundo, de guerras silenciosas, criminales y genocidas.

 

Aunque todos sufriremos en esa realidad que unos pocos desde sus despachos y bibliotecas, convencidos de su patente superioridad de espíritu, de raza, de raciocinio, de inteligencia y de conocimiento, han dibujado para los demás, sin duda alguna aquellos de nosotros que no sepamos por donde sopla el aire, resistiremos el golpe con mayor dificultad.

 

Al menos, los demás, podremos protegernos un poco del duro golpe o, como mínimo, haremos todo lo posible por no poner a disponibilidad de quienes nos atacan, la otra mejilla.