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			26 Mayo 2015del Sitio Web
			
			RT
 
			  
			  
			  
			  
			
			
			 
 
			  
			Las recientes tendencias de la política internacional indican que 
			para contener al 
			grupo BRICS se aplicarían más 
			herramientas de influencia informativa externa que presión 
			militar, ha declarado el máximo responsable del Servicio Federal de 
			Seguridad de la Federación de Rusia, Nikolái Pátrushev.
 
 El bloque BRICS se encuentra en una zona de particular riesgo a 
			causa de la creciente influencia de la presión informativa externa, 
			que podría impactar en los países miembros del grupo más que 
			cualquier amenaza bélica, aseguró Nikolái Pátrushev en el marco de 
			la reunión del BRICS dedicada a asuntos de seguridad colectiva, 
			informa RIA Novosti.
 
				
				"Las tendencias recientes indican 
				que para frenar a nuestros países no se aplicarán herramientas 
				militares, sino que nos amenazan el impacto informativo y la 
				acentuación artificial de las contradicciones nacionales, 
				religiosas y culturales", apuntó Pátrushev.  
			El BRICS nació por iniciativa de Moscú 
			como un mecanismo de consultas permanentes entre Rusia, China y la 
			India, Brasil y Sudáfrica.  
			  
			Los cinco países miembros son economías 
			de vanguardia en sus regiones y cada uno de ellos participa en 
			diversas asociaciones económicas regionales. La principal tarea del 
			BRICS es transformar el mundo y privar a Occidente de las posiciones 
			dominantes. 
 
			  
			  
			 
			  
			  
			  
			  
			  
			  
			  
			  
			  
			  
			 
			El Grupo BRICS...
 
			
			
			Pisotea a EE.UU. en América del Sur25 Mayo 2015
 
			del Sitio Web
			
			RT 
			
			Versión 
			original completa en ingles 
			  
			  
			  
			  
			
			
			 
			  
			  
			  
			El experto Pepe Escobar destaca 
			en un análisis para RT titulado 'BRICS 
			Trample U.S. in South America' el papel clave de China, Rusia y Brasil en el 
			continente sudamericano, donde avanzan "poco a poco e 
			inexorablemente" en términos de restructuración del comercio e 
			infraestructura, provocando el "miedo" de Washington.  
				
				"Comenzó en abril con una serie de 
				acuerdos entre Argentina y Rusia durante la
				
				visita de la presidenta 
				Cristina Kirchner a Moscú.    
				Y continuó con la inversión de 
				53.000 millones de dólares del primer ministro de China, Li 
				Keqiang, durante su visita a Brasil en el marco de otra ofensiva 
				comercial en Sudamérica completada con una dulce metáfora: Li 
				cabalgando a lomos de un ferrocarril chino que ejercerá de nueva 
				línea de metro en Río de Janeiro frente a las Olimpiadas de 
				2016", afirma el analista Pepe Escobar a RT.   
				"¿Dónde 
				está EE.UU. en todo esto? En ninguna parte", sostiene.   
				"La evolución constante de las 
				relaciones estratégicas de
				
				las naciones BRICS es percibida 
				por los círculos de Washington no solo con incredulidad sino con 
				miedo", sostiene el experto, afirmando que
				es "prácticamente imposible" 
				que EE.UU. dañe realmente a China, Rusia o Brasil y que 
				la "ira de Washington" apunta esencialmente hacia el gigante 
				asiático, el cual "se ha atrevido a realizar trato tras trato en 
				el antiguo 'patio trasero de EE.UU.'." 
			Escobar destaca en su análisis la 
			reunión de enero que tuvo como fruto que el mandatario chino Xi 
			Jinping
			
			prometiese canalizar 250.000 
			millones de dólares para proyectos de infraestructura en los 
			próximos 10 años y la multitud de 
			proyectos de infraestructura superior que en America Latina están 
			siendo financiados con capital chino.   
			Así son la firma de 35 acuerdos de 
			inversión y cooperación entre Brasil y el gigante asiático o la 
			construcción de dos presas hidroeléctricas en la Patagonia argentina 
			por un acuerdo de 4.700 millones de dólares. 
				
				"El panorama a largo plazo permanece 
				inexorable; el BRICS y las naciones Sudamericanas - que 
				convergen en la Unasur - 
				apuestan por un orden mundial multipolar y un proceso 
				continental de independencia.    
				Es evidente cómo esto se aleja de la 
				doctrina Monroe", sentencia. 
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