|

por Daniela Blanco
08 Noviembre 2025
del Sitio Web
Infobae

Un nuevo enfoque científico
remarca que el
efecto de los probióticos
depende siempre
de la cepa específica utilizada
y del perfil de
cada paciente,
alejándose del
uso indiscriminado.
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
El
consumo de probióticos específicos
puede ayudar a
reducir el
estrés en el sistema digestivo
y favorecer el
bienestar emocional.
Los últimos
hallazgos de la ciencia.
La microbiota intestinal es la
comunidad de microorganismos vivos - principalmente bacterias,
virus, hongos y arqueas - que reside en el tubo digestivo y
desempeña funciones esenciales en la salud humana.
Entre ellas, se destacan la preservación del
sistema inmunológico, la prevención de enfermedades como diabetes y
obesidad; la mejora del estado de ánimo y el impacto positivo en el
envejecimiento saludable.
El estilo de vida del siglo XXI contribuye a la pérdida de
biodiversidad bacteriana en la microbiota, y a la reducción de sus
colonias en el organismo, por el consumo frecuente de alimentos
industrializados, el sedentarismo, ciertas enfermedades crónicas y
el arco de trastornos del sueño.
Se estima que en América Latina, 1 de cada 5 personas presenta
síntomas digestivos disfuncionales. Entre ellos, el Síndrome de
Intestino Irritable afecta al 10-20% de los adultos y se
relaciona con altos niveles de estrés.
El 60% de los pacientes con este síndrome
experimenta impacto emocional, lo que refuerza la conexión entre el
intestino y el cerebro.
El Eje
Intestino-Cerebro

El estilo de vida del siglo XXI
propulsa dietas
pobres en fibra, altos niveles de estrés
y contaminación
ambiental que provocan
la pérdida de
diversidad bacteriana en el intestino,
según lo
reportado en estudios científicos recientes.
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
El médico y microbiólogo Gianfranco Grompone, investigador
científico especializado en el estudio de las interacciones entre
bacterias y células humanas, explicó a Infobae:
"Un metaanálisis (Limosilactobacillus
reuteri DSM 17938 and ATCC PTA 6475 for the treatment of
moderate to severe irritable bowel syndrome in adults)
publicado en Frontiers in Gastroenterology respalda que
el consumo sostenido de determinados probióticos incide de
manera favorable en el bienestar emocional y en la disminución
del estrés intestinal, efectos atribuidos a la interacción con
el eje intestino-cerebro".
"La evidencia clínica apunta a que la cepa Lactobacillus
reuteri Protectis incrementa la regularidad intestinal en el
93% de los casos y reduce la incomodidad abdominal hasta en un
72%", precisó Grompone, director científico del laboratorio de
origen sueco BioGaia - en alianza en la Argentina con
Abbott- que se especializa en la investigación y el desarrollo
de productos probióticos basados en la cepa Lactobacillus
reuteri.
Probióticos -
Nuevo enfoque, Cepas precisas
El intestino contiene más de 100 millones de neuronas en
comunicación constante con el sistema nervioso central, lo que ha
convertido al tracto digestivo en un verdadero "segundo cerebro".
Según informan los expertos de Mayo Clinic,
los probióticos pueden favorecer el
equilibrio intestinal y mejorar procesos fundamentales como,
-
el sueño
-
la concentración
-
la inmunidad

El yogur con probióticos
es uno de los
alimentos
recomendados
por expertos.
(Freepik)
Un nuevo enfoque científico adquiere protagonismo:
la importancia de distinguir las cepas
específicas de los probióticos para determinar en qué tipo o
perfil de paciente será más efectivo.
Comprender el papel que cumple cada cepa
resulta esencial al momento de evaluar su eficacia y definir los
beneficios que pueden ofrecer.
Como se mencionó, la evidencia clínica apunta a
que la cepa Lactobacillus reuteri Protectis incrementa la
regularidad intestinal en el 9 de cada 10 personas y reduce la
incomodidad abdominal hasta en un 72%.
Romper con la Alteración del
Equilibrio Intestinal

Lactobacillus acidophilus, L.
rhamnosus,
L. plantarum y
Bifidobacterium breve
son algunas de
las cepas probióticas más estudiadas
por su efecto
positivo sobre la digestión,
el equilibrio
inmunológico y la prevención de
enfermedades .
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
La cepa Lactobacillus reuteri cuenta con más de 250 estudios
clínicos que respaldan su eficacia, mostrando mejoras de hasta un
50% en síntomas de intestino irritable, reducción del dolor
abdominal y mayor regularidad intestinal en menos de un mes.
Cada cepa probiótica tiene efectos específicos, y Lactobacillus
reuteri Protectis es una de las más estudiadas y seguras, presente
también en la leche materna.
Para Gabriel Micali, director médico de Abbott Argentina
(MN:96101):
"El intestino, además de ser el lugar donde
se digieren los alimentos, es también considerado - en la
actualidad - como el centro de nuestra salud física y puede
influir en lo emocional también.
Cuidar su equilibrio es cuidar el bienestar
en su sentido más amplio".
Las cepas de probióticos más comunes incluyen las
de los géneros,
-
Lactobacillus (como L. acidophilus, L.
rhamnosus y L. plantarum)
-
Bifidobacterium (como B. longum y B.
breve),
-
Saccharomyces boulardii
La eficacia de los probióticos depende no sólo de
la cepa específica, sino también de la dosis.
Los Probióticos reestablecen el
Equilibrio de la Microbiota

Un estudio identificó 41 tipos de
bacterias intestinales
relacionadas
con la presencia de insomnio,
al tiempo que
revela que la reducción o el aumento
de bacterias
específicas puede condicionar
tanto la
posibilidad de padecer trastornos del sueño
como de
prevenirlos.
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
El estilo de vida actual altera la composición de la microbiota
intestinal, reduciendo la diversidad bacteriana que durante milenios
formó parte del cuerpo humano.
"Cuando ese equilibrio se altera, las
consecuencias no se limitan al sistema digestivo: puede aparecer
fatiga, ansiedad, irritabilidad y sensación de malestar general.
Por eso, cada vez más estudios destacan el
rol de los probióticos (microorganismos vivos que ayudan a
restaurar y restablecer el equilibrio natural de la microbiota
intestinal) como aliados de una salud integral", agregó el
experto Grompone.
"Los probióticos de nueva generación nos invitan a pensar la
salud de manera más integral. No solo ayudan a digerir mejor:
influyen en cómo nos sentimos, dormimos y
enfrentamos el día", agregó el doctor Micali.
Para que los probióticos sean efectivos, las
bacterias beneficiosas deben estar activas.
La médica clínica Ana Carolina Garrafa (MN 185.493), del área
de Gastroenterología del Hospital de Clínicas y miembro del
equipo de Transplante de Microbiota Fecal, destaca la
importancia de determinadas bacterias.
Entre ellas, Faecalibacterium, que produce
butirato, un compuesto
antiinflamatorio.

Estudios de los
Institutos
Nacionales de Salud de Estados Unidos
vinculan el uso
de probióticos y prebióticos
no solo a la
disminución de ansiedad y depresión,
sino también al
abordaje de enfermedades neurológicas
como autismo,
esquizofrenia y Alzheimer,
aunque aún se
requieren más ensayos clínicos en humanos.
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
"Las personas con insomnio suelen presentar
menor cantidad de Faecalibacterium, lo que crea un
entorno más inflamatorio y se asocia con una peor calidad del
descanso", explica Garrafa.
Los probióticos incluyen cepas como
Lactobacillus y Bifidobacterium, que según Garrafa,
"pueden modular la microbiota y mejorar la
respuesta al estrés y la percepción de la calidad del sueño,
según estudios experimentales".
Probióticos y Alzheimer
El uso de probióticos y prebióticos - actúan como "fertilizantes"
para la microbiota intestinal - han mostrado efectos positivos en el
sistema nervioso central, contribuyendo a,
...según
un estudio citado en 2023 por los
Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH).

Las bacterias desplazándose
a través de la
mucosa intestinal.
(Imagen
Ilustrativa Infobae)
Investigaciones recientes han identificado que estos compuestos
pueden mejorar la función cerebral y tener un papel relevante en la
prevención y tratamiento de trastornos mentales.
El análisis de las interacciones entre la microbiota,
el intestino y el cerebro ha permitido
comprender mejor los mecanismos de acción de los probióticos
y prebióticos, de acuerdo con el trabajo.
A pesar de estos avances,
el estudio citado advierte que se
requieren más estudios, especialmente ensayos clínicos en humanos,
para confirmar de manera concluyente los beneficios terapéuticos de
estos compuestos y respaldar su uso en el ámbito médico.
|