por Ron Paul

Abril-Junio 2020

del Sitio Web RonPaulInstitute

traducción de Alonso González de Nájera
10 Julio 2020

del Sitio Web Editorial-Streicher

 

 

 

La siguiente entrada reúne seis breves artículos de Abril, Mayo y Junio pasados del que fuera congresista y candidato a la presidencia estadounidense Ron Paul (ronpaulinstitute.org), que ofrecemos en castellano, en todos los cuales habla de la realidad del coronavirus en Estados Unidos y de cómo lo han manejado los pequeños tiranos que han aparecido y que se están dando sus gustos.

 

Menciona varios interesantes y legítimos conceptos que tienen que ver con la libertad personal y la salud en general, sobre todo lo que tiene que ver con los forzosos confinamientos.



 

 


 

 

 

¿Y Si el Confinamiento Fuera Todo un Error Garrafal?
por Ron Paul
20 Abril 2020

Versión original en ingles


Desde California a Nueva Jersey los estadounidenses están protestando en las calles.

 

Ellos están exigiendo que se acaben las órdenes de arresto domiciliario dadas por personeros gubernamentales por una epidemia de virus que incluso según las últimas cifras del gobierno estadounidense reclamará menos vidas que la epidemia estacional de gripe de 2017-2018.

A través de Estados Unidos, millones de negocios han sido clausurados por una "orden ejecutiva", y la tasa de desempleo ha aumentado incontrolablemente hasta niveles no vistos desde la Gran Depresión.

 

Los estadounidenses, que han visto disminuir sus salarios reales gracias a la mala práctica monetaria de la Reserva Federal, están encontrándose metidos a la fuerza en la pobreza y haciendo fila para conseguir pan. Es como una película de terror, pero es real.

La semana pasada el Secretario General de la ONU advirtió que una recesión global resultante de la clausura mundial por el coronavirus podría causar,

"centenares de miles de muertes adicionales de niños al año"...

Mientras escribo esto, menos de 170.000 personas han sido reportadas como habiendo muerto por el coronavirus en todo el mundo.

Muchos estadounidenses también han muerto el mes pasado porque no pudieron recibir el cuidado médico que necesitaban. Los tratamientos contra el cáncer han sido pospuestos indefinidamente. Las cirugías salvadoras de vidas han sido postergadas para hacer espacio para casos de coronavirus.

 

Entretanto los hospitales están dejando de lado a miles de personas porque los esperados casos de coronavirus no han ocurrido y los hospitales están parcialmente vacíos.
 

 


¿Qué ocurre si la "cura" es peor que la enfermedad?

A países como Suecia que no clausuraron su economía ni pusieron a la población bajo arresto domiciliario no les está yendo peor que a los países que sí lo hicieron.

 

La tasa de muertes por millón por coronavirus es más baja que en muchos países clausurados.

Del mismo modo, los Estados estadounidenses que no arrestaron a los ciudadanos por simplemente caminar por la playa no lo están haciendo peor que aquellos que lo hicieron.

 

La gobernadora de Dakota del Sur Kristi Noem dijo la semana pasada:

"Hemos podido mantener abiertos nuestros negocios y dejar a las personas asumir alguna responsabilidad personal".

Dakota del Sur ha registrado un total de siete muertes por coronavirus.

Kentucky, un Estado con una clausura estricta, está cinco veces más poblado que Dakota del Sur, pero tiene muertes por coronavirus unas 20 veces más. Si el confinamiento y el arresto domiciliario son la respuesta,

¿no deberían esos números estar invertidos, con Dakota del Sur viendo muertes masivas mientras Kentucky evita dicho virus?

Cuando Anthony Fauci primero advirtió que dos millones de personas morirían, hubo una carrera entre funcionarios federales, estatales y locales para ver quién podía hacer pedazos la Constitución más rápido.

 

En ese entonces Fauci nos dijo que si hacíamos lo que él dice sólo un cuarto de millón moriría.

Ellos clausuraron Estados Unidos incluso más severamente.

 

Luego, con poco más que un encogimiento de hombros, anunciaron que un máximo de 60.000 personas morirían, pero tal vez menos.

Eso es ciertamente terrible, pero es sólo una temporada de gripe de promedio alto.

Imagine si hubiéramos usado incluso una fracción de los recursos gastados para encerrar a toda la población y nos hubiéramos enfocado en proveerle asistencia y protección a los más vulnerables:

las personas de edad y aquellos con condiciones médicas serias.

Podríamos haber protegido a esas personas y todavía haber tenido una economía a la cual volver cuando el virus hubiera seguido su curso. Y no nos habría costado seis billones de dólares tampoco.

Los gobiernos no tienen derecho o autoridad para decirnos qué negocio u otra actividad es "esencial". Sólo en los Estados totalitarios el gobierno reclama esa autoridad.

 

Deberíamos alentar a todos aquellos que están resistiéndose pacíficamente y demandando respuestas de sus líderes elegidos.

 

Ellos no deberían poder salirse con esto.

 

 



Lo Siguiente en la Tiranía del Coronavirus: Vacunaciones Forzadas y "Certificados Digitales"
por Ron Paul
27 Abril 2020

Versión original en ingles


En mi primera semana en la Cámara de Representantes en 1976, fui uno de los dos votos en contra de la legislación que se apropiaba de fondos para un programa de vacunación contra la gripe porcina.

 

Una epidemia de gripe porcina estaba en ese entonces dominando los titulares, de manera que la mayoría en Washington DC estaba frenética por "hacer algo" en cuanto al virus.

Desafortunadamente, la vacuna contra la gripe porcina precipitadamente desarrollada y producida apuradamente no sólo fue ineficaz sino peligrosa.

 

Aproximadamente 50 personas que recibieron dicha vacuna subsiguientemente contrajeron el síndrome de Guillain-Barré, una forma potencialmente fatal de parálisis...

 

Según un experto de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC), la incidencia del Guillain-Barré fue cuatro veces más alta entre aquellos que recibieron la vacuna contra la gripe porcina que en la población general.

Esa triste historia puede pronto repetirse.

 

Ahora mismo, los gobiernos y las industrias privadas están trabajando rápidamente para desarrollar y distribuir una vacuna contra el coronavirus.

 

El fundador de la Corporación Microsoft Bill Gates, quien es un financiador principal de esos esfuerzos, ha sugerido que a todo aquel que reciba una vacuna le sea emitido un "certificado digital" que pruebe que él ha sido vacunado.

 

El doctor Anthony Fauci, cuyo registro de predicciones equivocadas hace de él el Bill Kristol de la epidemiología, también quiere que los individuos porten consigo alguna prueba de que han sido vacunados.

Otra propuesta autoritaria planteada para tratar con el coronavirus es obligar a todo el mundo a descargar una aplicación telefónica que rastreará sus movimientos. Eso permitiría a los personeros gubernamentales identificar a aquellos que pudieran haber estado cerca de alguien que pudiera haber tenido coronavirus.

 

Tal obligatorio "rastreo de contacto" es un asalto contra nuestra privacidad y libertad.

Las vacunas pueden mejorar la salud.

Pero no todas las vacunas son seguras y efectivas para todas las personas...

Además, ciertas prácticas modernas, como dar a los niños muy pequeños múltiples vacunas a la vez, pueden causar problemas de salud.

 

El hecho de que las vacunas puedan beneficiar a algunas personas, o incluso a la mayor parte de las personas, no justifica que los gobiernos obliguen a los individuos a ser vacunados. Tampoco justifica vacunar a los niños en contra de los deseos de sus padres.

 

Y ciertamente no justifica mantener a los individuos y a las familias en una cuarentena involuntaria porque no tienen "certificados digitales" que prueben que ellos han recibido sus inyecciones.

Si el gobierno puede obligar a los individuos a recibir tratamiento médico en contra de su voluntad, entonces no hay motivo de por qué el gobierno no puede obligar a los individuos a comprar seguros médicos, a prohibirles poseer armas de fuego, dictar sus términos de empleo, e impedirles tomar acciones supuestamente dañinas como fumar marihuana o beber leche cruda.

 

De modo semejante, si el gobierno puede pasar por sobre los deseos de los padres en cuanto a tratamientos médicos para sus niños, entonces no hay ninguna razón de por qué el gobierno no puede usurpar la autoridad de los padres en otras áreas, como la educación.

Los proponentes de vacunas obligatorias y vigilancia reforzada están tratando de chantajear al pueblo estadounidense argumentando que el confinamiento no puede terminar a menos que creemos un Estado de vigilancia de asistencia médica y hagamos obligatoria la vacunación.

 

El creciente número de estadounidenses que están cansados de no poder ir al trabajo, a la escuela o a la iglesia, o incluso llevar a sus niños a un parque por los mandatos del gobierno, deberían rechazar ese "trato".

 

En lugar de eso, deberían demandar un fin inmediato a las clausuras y la restauración de la responsabilidad individual para decidir cómo proteger mejor su salud.


 



Escuchar a los "Expertos" en Coronavirus ha Conducido a la Muerte y Desesperación
por Ron Paul
18 Mayo 2020

Versión original en ingles


El 21 de Abril el Washington Post trató salvajemente a la decisión del gobernador de Georgia Brian Kemp de comenzar a abrir su Estado después de un encierro de semanas.

"Georgia lidera la carrera para convertirse en el Destino Nº 1 de la Muerte en Estados Unidos", dijo con desprecio el titular del diario.

El escritor y gurú liberal Dana Milbank, en verdad encontró hilarante la posibilidad de georgianos muriendo, sugiriendo que,

"como una promoción, Georgia podría ofrecer ventiladores a los primeros 100 huéspedes de hotel al registrarse".

Milbank, quien obviamente todavía está siendo pagado mientras millones de personas están sin trabajo, ve su empleo como impulsar la narrativa predominante de que debemos permanecer en el temor y nunca cuestionar lo que los "expertos" como el doctor Fauci nos dicen.

Bien; han pasado tres semanas desde el ataque de Milbank contra Georgia y su gobernador, prediciendo una muerte ampliamente generalizada que él encontró humorística.

 

Sus predicciones son casi tan sin valor como su propio carácter.

 

Georgia no sólo no ha visto al,

"coronavirus... quemando a Georgia como nada lo ha hecho desde William Tecumseh Sherman",

...como Milbank se rió, sino que los casos de Covid, las hospitalizaciones y las muertes han visto una gran disminución desde que el gobernador comenzó a abrir el Estado.

Tal vez, en primer lugar, salir al aire libre y a la luz del Sol ¡no debería haber sido prohibido!

De hecho, como nosotros ahora tenemos muchos más datos, se está haciendo cada vez más claro que los Estados y los países que más clausuraron también sufrieron las tasas más altas de mortalidad.

 

La ultra-cerrada Italia sufrió 495 muertes por millón por Covid mientras la relativamente no cerrada Corea del Sur sufrió sólo 5 muertes por millón.

 

Lo mismo es cierto en Estados Unidos, donde los Estados sin clausura como Dakota del Sur resultaron relativamente no tocados por el virus, mientras Estados manejados de manera autoritaria como Michigan, Nueva York y California ha sido más duramente golpeados.

En aquellos Estados más duramente golpeados ahora estamos viendo que la mayor parte de las muertes ocurrieron en recintos de cuidado de ancianos, después de que los gobernadores le ordenaron a los pacientes enfermos con Covid que abandonaran los hospitales y regresaran a sus casas de cuidado.

 

Allí, ellos infectaron a sus co-residentes que era más probable que tuvieran las múltiples co-morbilidades y edad avanzada que convirtieron al virus en una sentencia de muerte.

 

¿Serán esos gobernadores obligados a responsabilizarse de esa insensible desconsideración por la vida?

Ayer, el secretario de Health and Human Services Alex Azar admitió lo obvio:

"Estamos viendo que en lugares que están abriendo, no vemos esta alza en los casos".

Entonces,

¿por qué no abrir todo...?

Porque estos tiranuelos no pueden soportar la idea de perder la capacidad de tratar mal a las personas.

Suspender todo Estados Unidos por un virus que parece ser menos mortífero que un virus de resfrío común - particularmente entre los menores de 80 años que no están ya enfermos - ha dado como resultado el desempleo masivo y la destrucción económica.

 

Más estadounidenses pueden morir de los equivocados esfuerzos para combatir al virus que del virus mismo.

Los estadounidenses deberían hacer una pausa y reflexionar sobre las mentiras que a ellos les están siendo vendidas. Las mascarillas son simplemente una forma de manipulación psicológica.

 

Muchos reputados médicos y científicos han dicho que son inútiles y potencialmente dañinas. Los encierros están destinados a condicionar a las personas para que obedezcan sin cuestionar.

 

Una nación de gente que sólo hace lo que le dicen los "expertos" sin cuestionar, es una nación madura para un descenso hacia la tiranía total.

 

Ésta no es una advertencia vacía, sino que está respaldada por la Historia. Es tiempo de hacerle frente a todos los pequeños tiranos desde nuestras ciudades hasta Washington DC.

 

Es hora de reclamar nuestra libertad...

 

 



El Coronavirus Muestra por qué Necesitamos la Separación de Medicina y Estado
por Ron Paul
8 Junio 2020

Versión original en ingles


Parece como si hubiera sido sólo ayer.

 

A los estadounidenses,

  • se les negó el derecho a ir a sus iglesias.

  • Se les negó el derecho a visitar a sus seres queridos en el hospital.

  • Se les negó el derecho a abrir sus negocios e ir al trabajo para proveerse ellos mismos y a sus familias.

  • Se les negó el derecho a ir a restaurantes, a bares, a salones de peluquería...

Ninguna ley fue aprobada que negara esos derechos. Incluso aquello sería ilegal e inmoral.

 

Pero lo que sucedió fue peor.

Esos derechos básicos les fueron negados por gobernadores, jueces de tribunal de condado, e incluso por alcaldes locales que tomaron como excusa la epidemia del coronavirus para gobernar por decreto.

 

Ellos robaron un poder que no era suyo y lo esgrimieron en todos los niveles para meter a la fuerza a Estados Unidos en un arresto domiciliario de tres meses.

Entonces, en medio de las órdenes de permanecer en casa a través del país, los mismos gobernadores y funcionarios locales que encerraron a los estadounidenses en sus casas repentinamente aparecieron con sus llaves y abrieron las puertas.

 

Repentinamente no sólo estaba bien salir a la calle, sino que ¡era requerido salir a la calle!

¿Qué sucedió?

 

¿Una cura?

 

¿Una vacuna milagrosa...?

No... Los funcionarios que encerraron a los estadounidenses encontraron una causa que sintieron que requería a los estadounidenses en las calles para protestar:

los policías habían matado a un hombre negro, George Floyd, que estaba bajo su custodia en Minneapolis; y repentinamente la necesidad de protestar superó a la necesidad de,

"quédese en casa, salve vidas"...

Repentinamente los mismos "expertos en salud" que nos dijeron que no debemos reunirnos en multitudes o habría muertes por coronavirus por millones, emitieron declaraciones que apoyaban el congregarse en multitudes.

 

Una carta abierta acerca de las protestas por George Floyd firmada por más de 1.200 médicos y otros profesionales de la salud aclaraba que ellos,

"no condenan esas reuniones como riesgosas para la transmisión del Covid-19".

Sin embargo, ellos escribieron,

"eso no debería ser confundido con una posición permisiva con respecto a todas las reuniones, en particular las protestas en contra de las órdenes de permanecer en casa".

¿Desarrolló el coronavirus una especie de inteligencia superior que lo facultó para distinguir entre aquellos que estaban congregándose por una "buena causa" y aquellos que estaban congregándose por una mala?

 

Claro que no...

 

Lo que ha ocurrido desde el principio de este vergonzoso episodio del coronavirus es la politización de la salud pública por obra de gente autoritaria.

Dos prestigiosas publicaciones médicas, The Lancet y el New England Journal of Medicine, se vieron obligadas a retirar estudios que habían publicado y que concluían que la Hidroxicloroquina hacía daño a los pacientes que tenían el Covid.

 

La prisa para imprimir dichos estudios pareció más bien una maniobra política que algo basado en principios científicos.

 

Una vez que el Presidente Trump reveló que él estaba tomando hidroxicloroquina, los medios predominantes de comunicación e incluso publicaciones "expertas" comenzaron a atacar a dicha droga.

Eso es lo que ocurre cuando la medicina se fusiona con el Estado.

 

Nosotros recibimos la peor parte de ambos.

Tenemos al burócrata de carrera el doctor Fauci diciéndonos que nunca podremos darnos la mano otra vez y que debemos quedarnos en casa hasta que sea encontrada una vacuna.

 

Entretanto, los médicos a través del planeta están reportando que esta variante del coronavirus va desapareciendo por sí misma.

Tenemos en Estados Unidos una tradición de separación de Iglesia y Estado por una buena razón. El consorcio de Estado e Iglesia invita a la opresión y la corrupción. Necesitamos adoptar ese mismo enfoque para Medicina y Estado.

 

Vemos ahora cómo este consorcio ha producido la misma clase de corrupción y tiranía ampliamente generalizada.


 



¿Es la "Segunda Ola" del Coronavirus otro Fraude?
por Ron Paul
15 Junio 2020

Versión original en ingles


Hace una semana o poco más o menos los principales medios de comunicación y miles de representantes de la "comunidad médica" nos dijeron que debemos dejar de lado las órdenes de permanecer en casa e ir a las calles para protestar por la muerte de George Floyd a manos de la policía.

 

El virus Covid-19 no molestará a las personas que están protestando por esa injusticia, dijeron ellos. El virus sólo ataca a las personas que salen de sus casas para protestar contra las órdenes de permanecer en casa.

Ahora, después de que miles de negocios - muchos de ellos poseídos por negros - han sido reducidos a escombros y de que personas inocentes en las ciudades interiores ya no tienen ningún lugar donde comprar artículos de primera necesidad, los medios predominantes de comunicación han desistido de su cobertura continua de las protestas.

 

Repentinamente la semana pasada todos ellos simultáneamente adoptaron una nueva historia de temor para aterrorizar a las multitudes:

una "segunda ola" de coronavirus estaba entre nosotros, y estaba apuntando a esos Estados que se atrevieron a "abrir" sus economías y a comenzar a retornar a vidas relativamente normales...

Texas, Florida y California fueron seleccionadas para amedrentar al resto del país para que pensara que si usted se atreve a salir de su hogar usted se contagiará con el coronavirus y morirá... (sic)

 

Hubo una repentina alza en "casos" de coronavirus, afirmaron ellos.

 

Es divertido que justo hace un mes o poco más o menos ellos estaban exigiendo que nosotros en forma masiva aumentáramos los exámenes comprobatorios, lo que produciría justamente dicha "alza" en los casos de coronavirus que ellos ahora están usando para amedrentar a las autoridades para que decreten de nuevo las órdenes increíblemente destructivas de permanecer en casa.

En el condado aquí en Texas que incluye a Houston, la joven juez que en cierta forma se concedió el poder para clausurar la tercera ciudad más grande de Estados Unidos, nos advierte que ella otra vez puede clausurar al condado Harris para combatir esta "segunda ola" de casos.

 

Ella incluso amenazó con asignar otra vez millones de dólares a un hospital de campaña en un estadio de fútbol de Houston que no vio un solo paciente en la "primera ola" de coronavirus.

 

Es difícil no preguntarse cuáles compañías políticamente conectadas están cosechando millones de dólares en contratos para un hospital obviamente no necesitado.

 

Miles de camas en Houston están vacías, mientras a los pacientes con cáncer se les han rehusado sus exámenes y tratamientos desesperadamente necesitados.

Como lo señala el ex-congresista David Stockman, los números reales del coronavirus de ningún modo apoyan la aseveración de los medios de comunicación de que una "segunda ola" de infección está pasando por encima de Texas.

 

Stockman nos informa que en Texas la,

"tasa de casos infectados reportados de 256 por 100.000 es sólo el 10% de la tasa real de 2.477 por 100.000 en los cinco distritos de la ciudad de Nueva York; y su tasa de mortalidad de 6,2 por cada 100.000 habitantes es simplemente el 3% de los 196 por cada 100.000 de Nueva York".

No hay "situaciones críticas" en Texas.

Es simplemente más alharaca publicitaria de los medios de comunicación...

Es divertido que no se atrevan a mencionar a Georgia, que también ha abierto su economía y no ha visto ningún "alza" en absoluto.

Las mismas personas que estaban exigiendo más exámenes comprobatorios ahora están gritando que debemos clausurar la economía otra vez porque esos tests - que son notoriamente poco confiables - están mostrando más casos de coronavirus.

 

¡Ésta es una enfermedad a la que sobrevive el 99,9% de la gente que se contagia!

 

Pero 40 millones de personas sin trabajo y las miles de vidas que terminarán debido al cierre no son nunca mencionados.

Hay algo más ocurriendo aquí y no está de ningún modo relacionado con la salud pública.‒


 



Los Medios Informativos Están Mintiendo sobre la "Segunda Ola"
por Ron Paul
29 Junio 2020

Versión original en ingles


Durante meses, el Washington Post y el resto de los medios predominantes de comunicación mantuvieron una morbosa "cuenta de muertos" en sus primeras páginas y en lo alto de sus emisiones noticiosas.

 

La epidemia del coronavirus se trataba casi del número de muertos.

 

La narrativa estaba destinada a dar apoyo a gobernadores como Cuomo en Nueva York y Whitmer en Michigan, quienes convirtieron sus Estados en autoritarios bajo la falsa noción de que destruir los trabajos de la gente, su libertad y sus vidas en cierta forma impediría a un virus hacer lo que hace el virus siempre:

esparcirse a través de una población hasta que eventualmente pierde fuerza y se extingue...

La "cuenta de muertos" fue siempre el titular de prensa.

Pero entonces de repente a principios de Junio los medios predominantes de comunicación hicieron un giro a lo George Orwell y nos sermonearon con que se trataba de "casos" y que siempre se había tratado de "casos".

La muerte, y especialmente la tasa de fallecimientos por infección, eran irrelevantes...

¿Por qué...?

Porque desde el máximo en Abril, las muertes habían decrecido en un 90% y estaban continuando derrumbándose.

 

Eso no era lo suficientemente aterrador, así es que los medios noticiosos fingieron que esas buenas noticias no existían.

Con masivos aumentos de exámenes comprobatorios, el número de "casos" se incrementó.

 

Ésta no es una ciencia compleja:

mientras más personas usted pone a prueba, más "casos" usted descubre.

Desafortunadamente, nuestros medios predominantes de comunicación están sólo interesados en impulsar la "línea del partido".

 

Así es que las buenas noticias de que millones más han sido expuestos mientras la tasa de fallecimientos continúa declinando - lo que quiere decir que el virus se está debilitando - son enterradas debajo de histéricos falsos reportes de "nuevos casos".

Lamentablemente muchos gobernadores, incluyendo al nuestro aquí en Texas, son incapaces de resistir las interminables mentiras de los medios predominantes de comunicación.

 

Ellos están haciendo pasar otra vez a los estadounidenses a través de la pesadilla de las clausuras forzosas de negocios, las mascarillas faciales obligatorias, y las restricciones de las libertades constitucionales en base a propaganda falsa.

En Texas la propaganda de la "segunda ola" se ha hecho tan maligna que los líderes de los cuatro principales hospitales en Houston tomaron la extraordinaria decisión a fines de la semana pasada de dar una conferencia de prensa conjunta para clarificar que las historias de terror de los hospitales de Houston abrumados con casos de Covid son simplemente falsas.

 

El doctor Marc Boom del Houston Methodist dijo que el reporte acerca de la capacidad del hospital es engañoso.

 

Él dijo:

"Muy francamente, estamos preocupados de que hay un nivel de alarma en la comunidad que es injustificado ahora mismo".

De hecho, ha habido mucho reporte de que el "alza" en los casos en Texas no se debe a un resurgimiento del virus sino a las prácticas hospitalarias de comprobar si hay Covid en cada paciente que entra para cualquier procedimiento.

 

Si la persona da positivo, bien, eso se cuenta como una "hospitalización por Covid".

¿Por qué los hospitales serían tan deshonestos en sus diagnósticos...?

Miles de millones de dólares de los que se ha apropiado el gobierno federal están siendo canalizados hacia dichos recintos en base al número de "casos de Covid" que ellos pueden producir.

 

Como siempre he dicho, si usted subsidia algo, usted consigue más de eso. Y por eso es que estamos teniendo más casos de Covid.

Volvamos a las medidas originales usadas para amedrentar a los estadounidenses para que renunciaran a sus libertades constitucionales:

los números diarios de muertos.

Aunque sabemos que los hospitales han atribuido falsamente incontables muertes al "Covid-19", que fueron muertes CON el virus en vez de A CAUSA del virus, estamos viendo muertes reales declinando lenta pero firmemente durante el último mes y medio.

 

La disminución de muertes no es una gran forma de empujar la propaganda de la "segunda ola", de manera que los medios noticiosos y los políticos han movido los postes de la meta y han decidido que sólo los "casos" son importantes.

 

Ésa es otra tremenda mentira.

Resista la propaganda y defienda su libertad.

 

Ésa es la única manera en que pasaremos a través de esto...