por Rubén Torres
15 Febrero 2017
del Sitio Web LaCosechaDeAlmas


 

 

 

 

 


Muchos son los que tratan de encontrar a su alma gemela, buscan técnicas para encontrar o realizan cursos.

 

Las almas gemelas no existen, el concepto gemelo y alma no pueden ir juntos por que no existen dos almas exactamente iguales; eso solo se da en cuerpos físicos y aun así el concepto gemelo seria incorrecto.

Existen almas afines, almas que han compartido múltiples experiencias juntas y forman un grupo que encarna tomando distintos roles.

 

Dentro de ese grupo, se forman afinidades entre las almas, formando vínculos que sobreviven mas allá de las vidas que elijan, y cuando encarnan, esas almas se acaban atrayendo y encontrando, creando lazos fuertes de amistad o amor.

 

Esas afinidades que se forjan en el ser (Ser-afines) perduran y se despiertan en cuanto esas almas entran en contacto.

 

La sensación de conocerse desde siempre, la comunicación no verbal o la necesidad imperiosa de estar junto a ese Ser a pesar de no tener ningún vinculo sanguíneo o relación previa, es lo que muchos han llamado como alma gemela, quizás porque ese Ser lo notas tan igual, tan afín a ti que casi es un reflejo tuyo, eso es lo que se llama alma gemela, pero que no es mas que un alma afín.

Todos tenemos almas afines, pero no todos tenemos la oportunidad de encarnar en el mismo instante.

 

Así que es probable que el ser mas afín que encuentres no sea tu pareja o que finalmente encarne, en un hijo o un nieto o incluso no coincidas en esta vida con ella.

 

Por eso es inútil buscarla, por que si tu alma mas afín encarnó contigo seguramente la hallas encontrado ya, porque es algo que se atrae inconscientemente y es imposible de evitar.

Aquí nadie se pierde, tu alma afín no esta perdida, el instante que estas viviendo es demasiado breve y pronto os volveréis a encontrar. Todos pertenecemos a un grupo, pero estos grupos eventualmente se separan para encarnar de distintas formas.

Según se evolucione estos grupos crecen y las almas afines aumentan en número.

 

Ya no hay un alma afín sino un alma grupal, la suma de almas afines formando una sola alma, así es como se van sumando y se llega a la Fuente para acabar formando un todo y volver a empezar.