por Guillermo Caso de los Cobos
Octubre 09, 2016

del Sitio Web TerraeAntiqvae





La tumba con las plantas de cannabis

a modo de mortaja

HONGEN JIANG
 

 


Un equipo de arqueólogos ha descubierto una gran cantidad de marihuana en un entierro antiguo en el noroeste de China, e indicaron que este hallazgo único brinda considerables alcances sobre cómo las culturas milenarias euroasiáticas usaban las plantas para rituales y propuestas medicinales.

 

La investigación (Ancient Cannabis Burial Shroud in a Central Eurasian Cemetery) fue publicada en Economic Botany.

El arqueólogo Hongen Jiang y sus colegas describen el entierro de un adulto de unos 35 años con características caucásicas en la depresión de Turfán. El hombre estaba desplegado en una cama de madera.

 

Trece plantas de cannabis en perfecto estado de conservación, cada una de casi un metro, fueron colocadas diagonalmente a lo largo del cuerpo del hombre.

 

Las raíces de las mismas estaban orientadas entre la pelvis y la altura del mentón, hacia el lado izquierdo de su rostro.
 

 


Una cobertura de cañizo cubría la tumba.
 


El entierro, según la datación por carbono, ocurrió aproximadamente entre 2.400 y 2.800 años atrás.

 

El descubrimiento se suma a una creciente colección de evidencias arqueológicas que demuestran que el consumo de marihuana era muy popular en la estepa euroasiática miles de años atrás, indicó Jiang.

 

El entierro es una de las 240 tumbas excavadas en el cementerio Jiayi, en Turfán, y está asociada con el área entre 3.000 y 2.000 años atrás. En aquel tiempo, el oasis de aquella depresión era una parada importante en la Ruta de la Seda.

Partes de la planta del cannabis fueron halladas en algunos otros entierros en Turfán, con mayor incidencia en el cementerio Yanghai descubierto cerca de una década atrás.

 

El mismo contenía cerca de medio kilogramo de raíces y hojas en polvo.

 

Se trata de la primera vez que los arqueólogos recobran plantas de marihuana completas y la primera vez que se usa como 'sábana' o cubierta en un entierro humano.
 

 


Trece plantas de cannabis casi enteras,

depositadas en diagonal y a modo de sudario

sobre el cuerpo del difunto.
 


Las raíces de marihuana fueron también halladas en el primer milenio a.C. en entierros escitas al sur de Siberia, incluyendo a una mujer que posiblemente murió de cáncer de mama - la marihuana podría haber sido usada para aliviar su dolor.

 

El hecho de que las plantas estuviesen aplanadas a lo largo del cuerpo del hombre llevó a los arqueólogos a concluir que eran frescas en su momento y podrían haber sido cultivadas para su entierro.

 

Sus cogollos y frutos sugieren que podrían haber sido colectadas en verano.

Otra de las preguntas que se hicieron los científicos es su utilidad:

además de sus efectos psicoactivos, la marihuana es usada por sus fibras durables para la ropa, como sus raíces ricas en aceite.

En el caso de las plantas de Jiayi, las cabezas tenían tricomas glandulares, que contienen el psicoactivo THC (tetrahidrocannabinol).

 

Los investigadores sospechan que esta marihuana fue cultivada por sus efectos y fue inhalada en rituales o por fines medicinales.
 

 


Las plantas de cannabis en un estado de conservación asombroso.

Con el tiempo han adquirido un color marrón amarillento.

 

 


Tricomas que cubren el tallo de la planta.
 


Hallazgos arqueológicos muestran que la marihuana se usó en Eurasia hace más de 5.000 años.

 

La primera referencia de ella registrada es de Herodoto, quien escribió que,

"los escitas arrojaban el cannabis sobre piedras calientes y se embriagaban al inhalar los vapores".

Lo usaron también los griegos y romanos, en Medio Oriente y África, y fue llevada a América por los exploradores.

 

El cáñamo crece de forma silvestre en las regiones cálidas y húmedas, aunque también se practica su cultivo (legal e ilegalmente) en distintas partes del mundo.
 

 

 


Fuentes