Diciembre 3, 2008

del Sitio Web ElProyectoMatriz

 


“Sí el maíz genéticamente modificado se difunde por todo el planeta,
una de las más grandes creaciones de la humanidad
-una de las fuentes alimenticias más fiables y diversificada-
podría ser severamente afectada o incluso destruida.
Igual que muchas de las comunidades que dependen del maíz”.
CAPULALPAM, Sierra Madre de Oaxaca, México

Este artículo es continuación de "¡Transgénicos En Mi Nevera!"
 

 

 

CRONOLOGÍA POLÍTICA

“La tecnociencia, los transgénicos y la biopolítica
se erigen en los ejes centrales a través de los cuales
se investigan los decursos de este controvertido jardín que,
mientras promete seguridad, nos aboca a un escenario
medioambientalmente incierto y, asimismo,
mientras propone idoneidad, nos introduce en un escenario
social marcado por la mercantilización de la vida”.
“El jardin biotecnologico” de IGNACIO MENDIOLA

Las raíces de la historia se remontan durante décadas.


Engdahl explica que es la historia de una poderosa familia y una “pequeña élite socio-política americana que busca establecer el control sobre la misma base de supervivencia humana”; la vida futura a través de los alimentos que tomamos. Es una “historia del crimen” –afirma en la introducción de “Semillas de destrucción”.

 

Es una pesadilla, real y amenazadora.

- La saga Rockefeller -

“El nombre de la familia es Rockefeller. El patriarca fue John D., y cuatro poderosos hermanos lo siguieron en la siguiente generación – David, Nelson, Laurence y John D. III.”

Los Rockefeller buscan establecer monopolios globales. Su intención con la agricultura fue llevar a cabo un esquema similar al que el patriarca desarrolló con el petróleo y la banca.

América Latina fue el principio de una revolución en la producción de alimentos que tenía un claro objetivo:

“controlar las necesidades básicas de la mayoría de la población mundial”.

La REVOLUCIÓN VERDE comenzó en Méjico y se extendió por América Latina durante los años 50 y 60. Posteriormente se introdujo en Asia, especialmente en India.

 

La Revolución Verde se basó en la proliferación de semillas híbridas infértiles en los mercados de países en vías de desarrollo. Esto implicaba que los agricultores debían comprar las semillas año tras año a los grandes productores multinacionales que controlaban su producción a través de patentes.

Se introdujeron modernas técnicas de agricultura bajo el falso pretexto de aumentar el rendimiento de las cosechas.

LYNDON JOHNSON
 

En los años 70, el presidente LYNDON JOHNSON se involucró entrenando científicos agrónomos de los países en vías de desarrollo en los últimos conceptos de producción. De esta manera serían aplicados en sus países de origen. Esta red fue crucial para le estrategia de Rockefeller.

Las tácticas de la “Revolución Verde” destruyeron el sustento de los campesinos y los forzaron a abandonar sus tierras para ir a vivir a los suburbios que ahora rodean todas las grandes ciudades del mundo. Convirtiéndose en mano de obra barata para la industria.

La “Revolución” también dañó la tierra: el monocultivo acaba con la diversidad, reduce la fertilidad del suelo y, con el tiempo, la cosecha disminuye; además el uso indiscriminado de pesticidas químicos causa serios problemas de salud.

La “Revolución Verde” fue sólo una REVOLUCIÓN QUÍMICA.

 

Los países pobres no podían pagar de ningún modo las ingentes cantidades de fertilizantes y pesticidas utilizados, así que obtuvieron créditos del Banco Mundial, el Morgan-Chase Manhattan Bank y otros grandes bancos de Nueva York respaldados por garantías del gobierno de EE.UU.

Aquí comenzó el proceso de esclavitud de la deuda al Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y a los bancos privados.

Engdahl explica que la ciencia de “modificación biológica y genética de plantas y otras formas de vida” salió de los laboratorios de investigación americanos en los años setenta y nadie se enteró.

Los ciudadanos pronto tendrían conocimiento porque la ADMINISTRACIÓN REAGAN estaba determinada a hacer de EE.UU. una potencia dominante en este campo emergente.

La industria agroindustrial biotech fue especialmente favorecida, y las compañías a principios de los 80, se apresuraron para desarrollar plantas, ganado y otro tipo de animales OMG. Washington se lo puso fácil con un clima amistoso y no-regulado, que persistió desde entonces, indistintamente con Republicanos y Demócratas.

La seguridad de la alimentación y los problemas de salud pública no se consideran vitales si chocan con los beneficios de esta industria. De este modo, la población entera está siendo utilizada como ratas de laboratorio con estos productos completamente nuevos, no probados y potencialmente peligrosos.

A la cabeza del esfuerzo de su desarrollo está una compañía con un largo registro de fraude, encubrimiento, soborno, engaño y desdén hacia el interés público: Monsanto.

- Monsanto: “No crecerá alimento que no nos pertenezca” -
 

Su primer producto fue la sacarina; posteriormente se demostró que era un carcinógeno.

Entró entonces en el terreno de los químicos, y se hizo notoria por el Agente Naranja que fue usado para deforestar las selvas de Vietnam en los años sesenta durante la guerra y expuso a cientos de miles de civiles vietnamitas y soldados de EE.UU. a la mortal dioxina, uno de los compuestos químicos conocidos más tóxicos.

Engdahl demuestra que a pesar de su pasado, Monsanto y otros gigantes de OGM dieron rienda suelta a la des-regularización en los años ochenta y, sobre todo, después del nombramiento de GEORGE H.W BUSH (senior) como presidente en 1989.

Su administración abrió la “caja de Pandora” haciendo que ningún tipo de regulación innecesaria los estorbase.

Después de esto, “no se aprobó ni una sola nueva ley reguladora de productos biotech o OGM a pesar de todos los riesgos desconocidos y los posibles peligros para la salud” que conllevaban. Una Orden Ejecutiva de Bush [padre] lo dejó bien atado. Dictó que las plantas y los alimentos OGM eran “sustancialmente equivalentes” a los ordinarios de la misma variedad como el maíz, trigo o arroz.

 

Esto estableció el principio de “equivalencia sustancial” como “punto clave de toda la revolución OGM”.

Es decir, por un lado se asegura que plantas y animales genéticamente modificados son sustancialmente iguales a los “naturales”. Sin embargo, por otro, se hace pagar tasas muy elevadas en concepto de patentes, no sólo a quienes utilizan semillas modificadas, sino a quienes sufren la desgracia de ver contaminados sus cultivos de manera involuntaria.

Las semillas de este tipo de biotecnología están patentadas.

 

Las multinacionales se justifican señalando que debe preservarse la propiedad intelectual para que la industria consiga beneficios. Pero esto crea, un “neofeudalismo“, que hace que los agricultores dependan de las multinacionales que les venden las semillas y su correspondiente herbicida; multinacionales que son además quienes después les compran los productos a bajo precio.

Monsanto escogió la leche como primer producto OGM, manipulándola genéticamente recombinando la hormona de Crecimiento Bovina (rBGH).

La comercializó bajo el nombre comercial, Posilac.

En 1993, la FDA (Food and Drug Administration - Administración de Alimentos y Fármacos) de CLINTON la declaró segura y la aprobó para la venta antes de que hubiera ningún tipo de información disponible para el consumidor.

Se vende ahora en cada estado y se promociona como “la manera de conseguir que las vacas produzcan un 30% más de leche”.

Los problemas, sin embargo, aparecieron pronto. Los granjeros informaron de pronto sobre infecciones más serias que las usuales, algunos animales no podían caminar. Otros problemas incluyeron la mastitis en las ubres de las vacas, así como terneros que nacían deformes.

La información fue suprimida, y la leche rBGH no se etiquetó, así no había forma de que ningún consumidor estuviese informado.

Tampoco se comunicó que esta hormona causaba leucemia y tumores en ratas, y que un comité de la Comisión Europea concluyó que los humanos que beben leche rBGH se arriesgan a padecer cáncer de pecho y próstata.

La UE prohibió el producto, pero no EE.UU. La FDA no actuó a pesar de los claros problemas de seguridad, y permitió que esta peligrosa leche se continuase vendiendo.

Fue sólo el principio.

El 1 de enero de 1995, se estableció oficialmente la OMC (Organización Mundial de Comercio) con poder para dar vigencia a las leyes dictadas por las corporaciones en los Estados miembros. La agroindustria americana ya era dominante, pero ahora tenía un nuevo cuerpo supranacional no-electo para adelantar su agenda privada a escala global.

La OMC es la “policía” del libre comercio global. Y la agricultura es una prioridad.

Cargill escribió las reglas que Engdahl llama el “Plan Cargill”:

  • Prohibición de todos los programas gubernamentales que apoyen la agricultura y la ganadería local (aunque no pestañea ante los subsidios estadounidenses masivos)

  • Prohíbe a los países la imposición de controles de importación para defender su propia producción agrícola

  • Prohibición del control de la exportación agrícola incluso en tiempos de hambre

  • Prohíbe a los países restringir el comercio de la alimentación por leyes de seguridad; esta demanda abre mercados mundiales a la importación de alimentos OGM sin restricción y sin la necesidad de demostrar su seguridad.

El lobby International Food and Agricultural Trade Policy Council (Consejo de Política Comercial de Agricultura y Alimentación Internacional) (IPC) trabajó con Cargill y la agroindustria de EE.UU. para adelantar esta agenda.

El llamado Grupo de Cuatro países QUAD tomó la primacía - EE.UU., Canadá, Japón y UE.

 

Encontrándose en secreto, crearon la política para todos los 134 miembros de la OMC: la agricultura fue bosquejada por los gigantes agroindustriales de EE.UU. como Cargill, Monsanto, ADM y DuPont junto con los gigantes de la UE (Unión Europea) Nestlé y Unilever.

Estas políticas fueron diseñadas para eliminar leyes y protecciones nacionales a favor del LIBRE MERCADO SIN RESTRICCIÓN que favorece los países del Norte Global.

Actualmente, la administración BUSH [hijo] está aprovechándose de una calamitosa situación alimentaria y presionando a la Unión Europea. Dicha situación ha obligado a África y otros pueblos en desarrollo a aceptar este tipo de ayudas “humanitarias”.

A medida que las poblaciones se enfrentan a la hambruna la administración de los agro-negocios y sus amigos ven una fabulosa oportunidad para imponer su programa.

La Secretaria de Estado, Condoleezza Rice, sugirió en una conferencia de los Cuerpos de Paz:

“Tenemos que examinar de nuevo algunas de las cuestiones relativas a la tecnología y la producción de alimentos. Sé que los OMG no son populares en el mundo, pero hay lugares en los que los cultivos genéticamente manipulados resistentes a la sequía deben ser una parte de la respuesta”.
(PROBLEMA-REACCIÓN-SOLUCIÓN)

- Ayuda “humanitaria” -
 

Según la revista electrónica Biodemocracy News de febrero de 2003, India rechazó parte de un cargamento de soja y maíz de Estados Unidos valorado en 100 millones de dólares porque estaba contaminado con transgénicos.

El gobierno de Brasil confiscó un cargamento de maíz MG procedente de Estados Unidos, exigiendo su devolución o incineración.

En Filipinas, miles de personas destruyeron cultivos transgénicos y se tiraron a las calles a protestar porque el gobierno cedió ante las presiones de EE.UU. para aceptar estos productos.

Se pone también como alarmante ejemplo el rechazo por parte del gobierno de Zambia (2002), de la “ayuda alimentaria” ofrecida por EE.UU. por tratarse de grano transgénico y la prensa nacional lo refrenda:

“Es muy interesante constatar que por primera vez Zambia estaba obligada a aceptar un regalo. ¿No nos debería preocupar, como receptores, que el donante insista tanto en que aceptemos alimentos transgénicos? ¿Los americanos se preocupan solamente de nuestro estomago o hay algo más detrás del regalo?”, se puede leer en el periódico Zambia Daily Mail de 5 de noviembre de 2002.




ORGANISMOS GENÉTICAMENTE MANIPULADOS

 

En la búsqueda de tipos de organismos manipulados, podemos encontrar: semillas resistentes a la sequía, semillas que generan plantas capaces de segregar toxinas que las “protegen” de sus predadores y plagas, tomates transgénicos azules que incluyen una vacuna contra la peste bubónica y neumónica (el vector primario es Xenopsylla cheopis, una pulga con predilección por roedores), patatas o tabaco que producen la vacuna contra la Hepatitis B, una planta modificada que produce insulina, pollos inmunes a la gripe aviar,…

“Animal modificado genéticamente que sirve como mascota”.

 

Se trata del pez cebra fluorescente fabricado en Taiwán, y al que se le ha transferido el gen que hace fluorescente a una anémona para iluminar en la oscuridad.

Están esterilizados para que no pueda reproducirse caso de liberarse en su medio natural y, con el nombre de “Perlas nocturnas”, su precio de venta será 17 dólares”.

Aunque los “engendros” que más nos han estremecido y alarmado en esta búsqueda, sin duda alguna, han sido:
 

ARROZ CON GENES HUMANOS

La alimentación con este tipo de grano,
¿podría calificarse de canibalismo?
 

A pesar de los sucesivos escándalos relacionados con la contaminación de contingentes de arroz por variedades modificadas genéticamente (MG), el gobierno de EE.UU. ha aprobado de forma preliminar el cultivo a gran escala de variedades de arroz transgénico que incorporan genes humanos.

Ventria Bioscience, la empresa que lo desarrolla, ha abandonado aparentemente sus planes de utilizar este arroz MG como un aditivo en alimentación animal, y está intentando comercializar su arroz productor de proteínas humanas como una cura para la diarrea en países en vías de desarrollo.

La diarrea se puede tratar de una forma eficaz y barata con unas simples sales de rehidratación, así que es absurdo producir una alternativa modificada genéticamente. Esto ha llevado a que se especule sobre si se está utilizando a niños enfermos de países en vías de desarrollo en una cínica campaña para “vender” que Ventria Bioscience está motivada por el altruismo.

En sus planes a largo plazo está el incluir las proteínas humanas transgénicas en yogures, barritas de cereales y bebidas rehidratantes para deportistas.

¿Realmente necesitamos una solución transgénica que cure la diarrea? ¿Es aceptable liberar arroz MG en el medio ambiente, donde inevitablemente contaminará otras variedades de arroz? ¿De verdad nos parece aceptable consumir proteínas humanas?

“Un solo tipo de arroz alimenta a cientos de tipos de personas”
-Proverbio chino.

La pregunta es: ¿Un solo tipo de arroz podría matar a cientos de tipos de personas?

Hasta las propias publicaciones científicas de Ventria se plantean cuestiones sobre su seguridad.

Después abandonar aparentemente los planes de comercializar el arroz transgénico para alimentación animal, Ventria lo ha probado ahora en niños en Perú como posible tratamiento para la diarrea infantil.

A raíz de los experimentos en Perú, surgen muchas preguntas sobre si los padres de los niños fueron adecuadamente informados de que el tratamiento experimental incluía proteínas humanas transgénicas. Esto ha dejado algunas incertidumbres en Perú. También han surgido dudas sobre la seguridad, ya que algunos padres de los niños del estudio denunciaron que sus hijos sufrieron reacciones alérgicas.

Aunque la diarrea es la responsable de más de 2 millones de muertes al año, la mayoría en países en vías de desarrollo, sus causas están bien estudiadas y su tratamiento es simple y fiable. En muchos casos la diarrea dura sólo un día o dos y el paciente se recupera totalmente sin ningún tratamiento. Sólo en casos más prolongados es necesario un tratamiento para prevenir la deshidratación del paciente.

 

En esos casos, la administración por vía oral de sales rehidratantes es muy efectiva.




MAÍZ TRANSGÉNICO ESPERMICIDA

 

Has leído bien: MAÍZ ESPERMICIDA.

Y el experimento es tan “actual” como del año 2001. Hace ya aproximadamente ocho años.

“El potencial del maíz espermicida como arma biológica es altísimo”
SILVIA RIBEIRO
(ETC Group)

La compañía biotecnológica Epicyte (San Diego, Estados Unidos), socio corporativo de la multinacional Dow Chemicals, está experimentando con la producción de anticuerpos humanos en maíz transgénico.

Uno de estos experimentos es la producción de maíz espermicida, para usarlo como anticonceptivo.

El maíz anticonceptivo está basado en la investigación de una condición femenina poco frecuente - infertilidad inmunológica - en la cual, la mujer fabrica anticuerpos que atacan a los espermatozoides.

- Maíz criollo -

“Es terrible pensar que el maíz anticonceptivo
se mezcle con el maíz común
y termine en los copos del desayuno de las personas”
GREENPEACE

La empresa Epicyte asegura que no van a plantar sus maíces experimentales de espermicidas humanos cerca de ningún otro cultivo con el que se pudieran cruzar. Lo mismo afirman Dow y DuPont, que están desarrollando maíz para producir plásticos, y ProdiGene, que está desarrollando maíz que produce enzimas para la industria de los adhesivos, o proteínas superdulces para elaborar edulcorantes de bajas calorías.

Al contrario de lo que afirman éstas y las demás empresas del ramo, la industria biotecnológica no ha podido contener sus transgenes, y está contaminando con el polen de sus plantas transgénicas a miles de agricultores canadienses y estadounidenses que no lo querían ni lo sabían, y también al maíz nativo mexicano.

El potencial del maíz espermicida como arma biológica es altísimo ya que es de fácil cruce con otros maíces, pasa inadvertido y se podría insertar en el corazón mismo de las culturas indígenas y campesinas. Ya nos ha tocado presenciar cómo se han usado repetidamente campañas de esterilización contra indígenas.

 

Este método sería ciertamente mucho más difícil de detectar.

“Al parecer, la “INDUSTRIA DE LA VIDA” como gusta autodenominarse a las empresas de la biotecnología, se dedica a métodos para producir la esterilidad en semillas y la infertilidad de seres humanos.

Si pensamos que son las mismas empresas que nos legaron armas biológicas como “el agente naranja” y decenas de contaminantes químicos, cuyos derrames y uso han producido la enfermedad y muerte de decenas de miles de personas, sería más adecuado llamarlas “LAS INDUSTRIAS DE LA MUERTE”.

SILVIA RIBEIRO

(investigadora y coordinadora de programas del Grupo ETC, periodista y coordinadora de campañas medioambientales)




ANIMALES TRANSGÉNICOS DE “CONSUMO”

 

Crear los primeros los pollos del mundo en aves GM también es parte del esquema con el objetivo de transformar la población animal en Organismos Genéticamente Manipulados .

El terror generado en 2005 por la Administración de George Bush haciendo creer que una pandemia de gripe aviar amenazaba a la población, consiguió destinar mil millones de dólares solicitados al Congreso para una droga llamada Tamiflu.

Entrar aquí a detallar los entresijos de este inmoral negocio sería demasiado extenso. Pero mencionaremos que este producto fue creado y patentado por los laboratorios Gilead Science uno de cuyos accionistas y Presidente era Donald Rumsfeld (Secretario de Defensa de los EE.UU.)

Para 2006, el aumento del miedo a la gripe aviar, apuntaba a la conquista por parte de los partidarios de los OGM de la fuente de proteínas cárnica más importante del mundo: POLLOS TRANSGÉNICOS inmunes a la enfermedad.

Según William Engdahl, Monsanto, primera compañía mundial propietaria de patentes de frutas y verduras, segunda en cosechas agronómicas y tercera en agroquímica, estaría ya patentando ingeniería genética en animales. De hecho, lo aplicó en 2005 sobre sus medios de ingeniería para identificar genes derivados de semen de CERDO patentado.

“Cualquier cerdo producido utilizando estas técnicas reproductoras, estaría cubierto por esas patentes”.

Compañías como Monsanto y Cargill han invertido grandes cantidades en la modificación genética de animales.

Con fecha 27 de noviembre de 2008, encontramos este titular:

“Nuevo paso para la comercialización de animales transgénicos en EE.UU.“

Después de siete años de debate, la agencia norteamericana para la alimentación ha publicado el borrador del documento que regulará el comercio de animales genéticamente modificados, dejando un espacio de 60 días para el debate público.

Semillas, plantas, árboles, animales…



¿PARA CUÁNDO SERES HUMANOS GENÉTICAMENTE MODIFICADOS?

El salto es mínimo y previsiblemente nos lo “venderán” invocando la mejor de las intenciones, como por ejemplo poder modificar genéticamente futuros bebés para que no desarrollen enfermedades hereditarias… o argumentos similares.

No es por casualidad que financien, a través de lo que llaman fundaciones filantrópicas, biotecnología (básicamente junto a la planificación familiar). Una especie de tecno-demografía.

Esta tecnología está, como no se cansa de denunciar ETC Group, en manos privadas, financiada en todo el mundo por los “benefactores” cuyo fin es conformar una humanidad a su medida.

Engdahl explica cómo cuatro gigantes agroindustriales utilizan la,

“simulación, la mentira y el disimulo en una campaña bien orquestada para progresar hacia la última meta de Henry Kissinger” :

“Controla el petróleo para controlar a las naciones,
controla los alimentos para controlar a los pueblos”.