TRABAJO Y MATERIALES

 

A nosotros - los civilizados - se nos ha inculcado la creencia

de que las pertenencias

son más importantes que pertenecer.

-Derrick Jensen, Endgame Volume I (80)


Cualquiera que proclame que quiere dejar el mundo material para vivir 'la vida espiritual' es, en mi opinión, un crédulo (en el mejor sentido) en dos frentes.

 

Primero, el mundo material es la prueba de nuestra espiritualidad, es la oportunidad de demostrar que nuestras creencias espirituales no son sólo pensamientos abstractos y palabras sin sustancia. La espiritualidad no es algo meramente filosófico. No se trata de sentarse en la posición del loto cantando el OM. Recitar pasajes palabra por palabra del Corán, la Biblia o el Bhagavad Gita tampoco significa necesariamente una vida espiritual, no más que ir a la iglesia los domingos o adorar al sol.

 

Estas prácticas en sí mismas tienen el potencial de ayudar a llevar una vida más conectada, amorosa, empática, compasiva y respetuosa - que creo es el papel de cualquiera de estas historias que elijas - pero son probablemente menos espirituales en sí que el acto de tener una buena y vieja mierda en el váter seco.

 

Yo personalmente trato de practicar la espiritualidad aplicada (a pesar de fallar miserablemente en el día a día) en la que la espiritualidad se revela a través de lo que haces cada día y cómo cubres tus necesidades físicas. Creo que la profundidad de tu espiritualidad se revela a través de los modos de obtener y comer la comida, hacer fuego, la delicadeza al caminar en la Naturaleza, cómo interactúas con gente que no necesitas, tus respuestas a decisiones difíciles, cómo tratas a los extraños y a los que dices amar y los niveles de valor que muestras cuando la debilidad es la opción más fácil.

 

Se revela por tu respeto por el agua, el aire y la tierra, los elementos que componen tu carne y tus huesos y por el modo de compartir tus dones con el mundo.

 

Un reportero preguntó en una ocasión a Mahatma Gandhi cuál era su mensaje para el mundo. Él respondió "mi vida es mi mensaje", lo que significaba que creía que su forma de vivir la vida diariamente tenía más importancia y relevancia que decir al mundo lo que pensaba sobre cómo debían vivir o lo que tenía que creer. Las palabras son mucho más fáciles. Parafraseando a Kahlil Gibran (81), la acción es el amor hecho visible.

 

La segunda parte de la delusión es que es sencillamente imposible dejar el mundo material a menos que aceptes la muerte, algo que no me sorprende que ninguna persona que conozco quiera. Hay algunas necesidades básicas que tienes que cubrir si quieres sobrevivir y varían de una región geográfica a la otra.

 

Estar cerca de estas necesidades materiales básicas tiene todo tipo de beneficios para ti, para el planeta y para todos los que lo comparten contigo y cómo decidas cubrirlos es un curioso proceso profundamente espiritual. Ir por debajo de estos mínimos (¡la inmensa mayoría de nosotros desafortunadamente no corremos peligro de hacerlo!) a largo plazo puede ser negativo para ti y por extensión para el organismo del que formas parte. La clave es, una vez más, encontrar el nivel óptimo de requerimientos materiales, el nivel que enriquezca tanto al yo egocéntrico como al holístico.

 

Creo que explorar los aspectos espirituales de nosotros mismos es crucial para nuestro bienestar y será central para el grado de dignidad con el que enfrentemos las convergentes crisis ecológica y social que tenemos ante nosotros, así que no quiero ofender a nadie por sus prácticas espirituales. Pero creo que haríamos bien en dejar de ver al material y al espiritual como dos dominios separados y en su lugar, ver el espíritu que discurre invisible a través de cada mosquito, cada acto, cada roca, a través de todas y cada una de las plantas y animales, a través de nosotros mismos.

 

Ver lo mundano imbuido con lo glorioso nos permite tratar la Tierra y la comunidad de vida que lleva consigo como si la calidad de nuestras vidas dependiera de ello - y desde luego que depende. Cubrir nuestras necesidades de la forma más sostenible y estimulante para la comunidad y facilitando las conexiones que podemos es una de las prácticas espirituales más potentes disponibles para nosotros; al menos esa ha sido mi experiencia en la vida.

 

Si decides vivir libre de dinero, o más simplemente, hay ciertas necesidades físicas que tendrás que cubrir, independientemente de si decides hacerlo en la ciudad o en el bosque.

 

Que cubras esas necesidades usando métodos paleolíticos o inscribiéndote en la creciente matriz de páginas de economía del don, o una mezcla de ambas, es tu decisión y dependerá ampliamente de tu situación particular, de a qué tienes acceso, de las razones por las que quieres vivir con poco o nada de dinero y tu competencia para sobrevivir tanto en el paisaje urbano como en el salvaje.

 

Para cubrir tus necesidades necesitas trabajo (tuyo o de otro) y materiales hasta cierto grado.

 

 

 

Trabajo

 

Dados los sistemas político y económico en los que hemos crecido, junto con los mitos que tales sociedades nos han ido metiendo a cucharadas desde el nacimiento, sería más fácil creer que el único modo de gestionar el trabajo en nuestras economías es con el dinero.

 

Como con todo, no tiene que ser realmente así. Es sólo una historia, una de muchas, y una que podemos cambiar si ya no nos sirve. Nuestro actual modo de vida puede ser teóricamente conveniente, pero si la conveniencia se vuelve una destructora del alma ¿sigue siendo conveniente? La economía moderna hace poco por el espíritu humano; ha dejado a muchos de nosotros tristes y odiando lo que hacemos cada día.

 

Al contrario de lo que los defensores del dinero querían hacerte creer, en realidad el dinero inhibe nuestro sentido de libertad y a través de sus mecanismos nos impide perseguir las cosas que realmente queremos hacer en la vida. Los Estados Unidos, la autoproclamada y abanderada tierra de la libertad no exige legalmente una compensación por despido y casi uno de cada cuatro trabajadores no la tiene (82).

 

Hay otros modos de vivir y trabajar, formas que nos estimulan, que construyen comunidades resilientes de gente que confía y depende una de otra, sistemas que crean unidad en vez de división. Algunas de las que incluiré en el menú más abajo todavía están basadas en el concepto de intercambio (un par son incluso formas de moneda local), sin embargo las incluyo porque pueden ayudarte a avanzar en tu propio modelo POP y actúan como pasos de base hacia una vida totalmente en la economía del don.

 

Se pueden dividir en dos categorías generales: la moderna, que es lo que será útil para la mayoría de forma inmediata y la paleolítica, también conocida como el arte de sobrevivir.

 

Habilidades modernas y sistemas de trabajo

Desde que dejé el dinero en 2008, he notado un enorme surgimiento de la economía del don, la mayoría organizado online.

 

Esto presenta un problema. No hay una verdadera solución libre de dinero para Internet debido a la complejidad de las tecnologías involucradas. Puedes acceder a Internet sin dinero utilizando la biblioteca local. Sin embargo, aunque es gratis en el uso, las bibliotecas en la economía monetaria están financiadas por los contribuyentes.

 

Por ello, proyectos como estos en esta sección deberían ser considerados estrategias transicionales, en contraste con algo que se debería conseguir a largo plazo.

 

 - Freeconomy W

Creé Freeconomy en 2007, parcialmente en respuesta al hecho de que todas las demás alternativas a la economía monetaria que conocía estaban basadas en la vieja mentalidad del intercambio que yace en el corazón de la economía monetaria dominante. Sentía que se necesitaba desesperadamente una alternativa a las alternativas.

 

Freeconomy supone compartir tu tiempo, talentos, herramientas y conocimiento en el grado que te sea cómodo - totalmente gratis - sabiendo que siempre que necesites ayuda con otra cosa, o el préstamo de un destornillador, otro miembro de tu grupo local (que quizá nunca habías visto) te ayudará con el mismo espíritu.


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W - La traducción de Freeconomy sería Economía Libre, pero se mantiene la palabra inglesa puesto que da nombre a todo un movimiento.

 

No hay créditos, pagarés o sistemas de solvencia que rellenar o aburridos trámites administrativos que hacer; lo incondicional es mucho más eficiente y menos burocrático que lo condicional. Esta filosofía suena radical cuando se considera dentro de la mentalidad actual, pero el viejo adagio "el que siembra, recoge" lo ilustra bien.

 

Usarlo es incluso más simple que la propia idea. Una vez que te inscribes, instantemente tienes acceso a un conjunto completo de talentos de todos los demás miembros de tu área local cuyo radio puedes definir entre 1 y 40 kilómetros dependiendo si vives en Londres (u otra ciudad) o en el Bosque de Dean (u otro bosque). De ahí en adelante, piensa en Freeconomy como tus páginas amarillas online, pero donde todo el mundo hace todo y comparte todo gratis.

 

Tomemos un ejemplo para mostrar su simplicidad. Se te ha pinchado la bici. En lugar de arrastrarla hasta la tienda o el taller, entras en la página y buscas con la palabra 'mecánico'. El programa te informará de todos los miembros dentro del radio elegido que se han inscrito con 'mecánico de bicicletas' como una de sus habilidades, indicando los que están más cerca de tu casa primero y a continuación los que están lejos en orden descendente.

 

Puedes contactar con ellos a través de la página y si ambas partes estáis satisfechas podéis organizar un encuentro en los términos que os vayan mejor (lo único que pedimos es que no haya intercambio de dinero). Tendrás el trabajo hecho gratis, al mismo tiempo aprenderás como arreglar un pinchazo y quizá podéis hacerlos buenos amigos. Los comentarios que he recibido indican que a menudo la persona hace una comida para la persona que les ha ayudado como gesto de agradecimiento, pero de ningún modo esto no se da por supuesto.

 

Si te preocupa que sólo participen profesionales del Reiki y de las velas Hopi, piénsalo bien. Los miembros de Freeconomy han ofrecido más de 500.000 habilidades en el momento de escribir, con más de 2.000 tipos preestablecidos para elegir en la página. Las habilidades van desde peluquería hasta fontanería.

 

Yo - bastante irónicamente - he ayudado a una organización local de caridad para niños con sus cuentas y sus previsiones financieras y he tenido consejos legales gratis de otro miembro que nunca había visto antes.

 

Contra todas las expectativas de amigos que me decían que era demasiado idealista para funcionar en un mundo en el que el-lobo-se-come-al-lobo, Freeconomy está floreciendo, no estoy demasiado sorprendido. Piense lo que piense un economista convencional, una mirada a la auténtica economía funcional que conocemos - la Naturaleza - me enseñó que los lobos muestran una fuerte preferencia por ayudar a sus colegas lobos más que por comérselos.

 

Ahora hay grupos de Freeconomy en más de 160 países en todo el mundo y su éxito refleja el deseo y la necesidad de la gente de un nivel decente de economía del don en sus vidas, especialmente a medida que el crack en la economía monetaria continúa ampliándose y haciéndose visible para todos. Los miembros parecen estar entusiasmados con hacer cosas sin otra razón que el simple hecho de que otro ser humano necesita ayuda y que se les ha dado la habilidad para poder ayudarles. ¿Qué otra razón aparte de comprender que podemos ayudar a otra alma necesitamos para hacerlo?

 

¿Tenemos siempre que obtener algo a cambio en estos días? Freeconomy me ha enseñado que no y que la gente disfruta realmente de la incondicionalidad. No creas a los que tratarán de convencerte de lo contrario.

 

 

 - Círculos de don

Los círculos de don es una idea originalmente desarrollada por un grupo de gente, incluyendo Alpha Lo (83), en California, pero que ahora está extendida por el mundo entero.

 

Es el equivalente a un grupo Freeconomy a pequeña escala y off-line. Crear uno y hacer que funcione es fácil. Todos (el número óptimo es entre 12 y 20 personas, más o menos) sentados en un círculo y comienza por exponer algunas necesidades. Puede ser desde un compañero para jugar al tenis, un escritorio, ayuda para la declaración de la renta hasta aprender a hacer un arco y un taladro, el préstamo de un saco de dormir o llevar a alguien a algún lado.

Una vez que todos han dicho lo que necesitan, el grupo hace otra ronda y dice lo que quieren compartir. De nuevo, puede ser cualquier cosa desde habilidades y cosas a conocimiento y tiempo. Una vez que se ha terminado, hay una ronda opcional en la que todos pueden dar las gracias a los otros del grupo por haberles ayudado de algún modo o al grupo en general.

 

Aunque esto puede parecer superfluo si hay limitación de tiempo, es crucial para la sostenibilidad a largo plazo del grupo. Oír los modos a través de los que los otros han dado gratuitamente inspira al resto del grupo a hacerlo también, anima a todos los involucrados y mostrar gratitud por lo que recibimos es una parte importante de la vida.

 

Algunos consejos: es inteligente tener un facilitador que comprenda las economías del don (puede ser una persona diferente cada semana y se pueden tener múltiples facilitadores en cada encuentro) y alguien que tome notas de los detalles de contacto de los asistentes, lo que quieren recibir y lo que ofrecen, de modo que todo el mundo pueda dar seguimiento de las cosas si es necesario.

 

Los grupos se pueden reunir con la frecuencia que les parezca útil - algunos se reúnen cada semana, algunos una vez al mes. Las organizaciones pueden crear sus propios círculos de don como una forma de hacer las cosas sin necesidad de dinero o de financiación, de un modo que lleve a la gente de esa organización a reunirse con un propósito común.

 

Los beneficios de esto frente a un modelo basado en la web como Freeconomy es que pone a la gente cara a cara de un modo que construye y nutre una interdependencia real. Tampoco requiere Internet y su infraestructura global para existir, lo que significa que cualquiera puede utilizarla. Su única cara oculta es que no funciona tan bien cuando el número supera los 20, mientras que un modelo como Freeconomy (que en efecto es un gran círculo de don online) puede manejar cualquier número de personas.

 

En mi modelo POP, describiría los círculos de don como el ideal y Freeconomy como una herramienta que podemos utilizar a medida que pasamos a un punto en el que cada calle tiene su propio círculo de don auténtico.

 

 

- Intercambio de Ayuda (84)

HelpX funciona casi del mismo modo que el más conocido esquema WWOOF, con la diferencia fundamental de que no está limitado a las granjas ecológicas.

 

Con este esquema los participantes pasan algunas horas del día trabajando para sus anfitriones, a menudo en lugares como hostales, barcos de vela, albergues o granjas, a cambio tienen comida y alojamiento (junto con la posibilidad de vivir una nueva cultura o aprender una lengua y otras habilidades). Abre la posibilidad de tener la experiencia libre de dinero del WWOOFing tanto en la ciudad como en el campo.

 

Normalmente la gente trabaja para sus anfitriones alrededor de cuatro horas al día y tienen el resto del día libre para hacer lo que les guste. De nuevo, combinando esto con el autostop o el ciclismo cualquiera puede vivir durante un año o más sin necesidad de dinero, burocracia o cuentas bancarias si quieren hacer un ensayo. Mientras que los beneficios ecológicos de este esquema sólo se utilizan si se hace en una granja ecológica, permite a cualquiera una oportunidad fácil para saber qué se siente viviendo sin un céntimo a tu nombre.

 

Tales experiencias pueden tener un impacto enorme en tu crecimiento personal y te proporcionan un trampolín hacia una vida libre de dinero más localizada y basada en el don.

 

 

- Esquemas de Intercambio Comercial Local (LETS, sus siglas en inglés) y Bancos de Tiempo

Es cuestionable añadir estos esquemas en un libro sobre vida libre de dinero, pero, como dije en el capítulo 2, pueden ser un peldaño para cualquiera que está actualmente enredado en la economía monetaria, permitiéndole a la larga ir hacia la economía del don si lo desea.

 

LETS es una red de personas que están de acuerdo en utilizar una moneda local para compartir sus habilidades.

 

Sus miembros crean e intercambian créditos que, como señala Peter North (85),

"respaldan con el compromiso de hacer suficiente trabajo para pagar este 'compromiso' (no 'deuda') en un tiempo razonable en el futuro…no necesitas moneda local antes de empezar - sólo te comprometes a trabajar para otra personas que te lo pida en el futuro".

Es un poco como Freeconomy, pero sin el sentimiento estimulante de incondicionalidad que sólo la economía del don crea realmente y sin los lazos de interdependencia que sólo el dinero y el crédito inmediato-y-exacto pueden tan eficientemente destruir.

 

Los bancos de tiempo son lo mismo que LETS en que se intercambian créditos de un modo u otro. Cuando ayudas a María con su coche durante una hora, ingresas una hora de tiempo. Cuando Juan llama a la puerta de tu ruidoso vecino con un bate de béisbol y lo pone firme, como acordado, Juan ingresa una hora de las tuyas. La diferencia crucial con el Banco del Tiempo es que el tiempo de todos (y por tanto la vida, porque ¿qué es la vida sino tiempo?) se valora igual. El de la persona que te ayuda a dar forma a tu jardín igual que el tiempo que das con tus habilidades de fontanería o de desarrollo de páginas Web.

 

Así que ¿son diferentes estas opciones al dinero 'normal'? No son suficientemente diferentes como para ser soluciones a largo plazo. Aunque todavía perpetúan la vieja historia de un modo más sano, proporcionan a las comunidades una resiliencia extra frente a los choques de la moneda nacional, sin embargo es marginal a no ser que localicen totalmente su economía material junto con la moneda.

 

También permite a los miembros tener las cosas hechas mientras que reducen su dependencia de los bancos, créditos y fundamentalmente del proceso corrupto de creación de dinero que va con ambos - esto sólo puede ser bueno. Su papel como trampolín hacia una nueva forma de vida, un nuevo tipo de economía, es crucial.

 

Pero las monedas locales no deberían ser nuestro santo grial.

 

 

- Otros esquemas de intercambio de talentos

Swapaskill(.com) (86) y LocalSkillSwap(.com) (87) son esquemas de trueque directo sin créditos o dinero que se registre o contabilice.

 

En sus sitios web simplemente indicas qué habilidades quieres compartir con otros y cuáles te gustarían a cambio. En términos de mi modelo POP para trabajo y habilidades en una economía libre de dinero, está entre Freeconomy y las monedas locales - no son incondicionales, pero son mucho más informales y valoran el tiempo y las habilidades de todos por igual.

 

Habilidades Antiguas

La razón por la que describí las opciones del menú libre de dinero en el capítulo 2 es porque en el momento en que mencionas el concepto de vida libre de dinero, surgen diferentes cosas en la mente de diferentes personas.

 

Algunas, como los economistas basados en recursos Peter Joseph y Jacques Fresco, imaginan una tecnotopía en la que las máquinas hagan casi todo el trabajo en el contexto de un mundo que ha evolucionado conscientemente más allá de los conceptos de débito y crédito, conceptos que el dinero representa en su forma física.

 

Otros, como Derrick Jensen (88), creen que el único modo sostenible de vida es uno en el que el nivel de tecnología utilizado sea próximo al del paleolítico. El caso que Jensen presenta en los dos volúmenes de Endgame [Fin del juego] tiene sus raíces en la realidad y en un lugar de una profunda comprensión ecológica y se coloca en contraste total con las fantasías de gente que quiere todo: un planeta abundante, vivo y sano y al mismo tiempo todos los aparatos que sólo se pueden tener a sus expensas.

 

Independientemente de en qué lado de la valla libre de dinero caigas, no hay absolutamente ninguna razón para no aprender lo básico de la supervivencia - comer, beber y estar al abrigo. Todo esto con frecuencia dependerá de tu conocimiento del arte de hacer fuego: la comida necesita a menudo ser cocinada para hacerla comestible, el agua hervir para purificarla en un ambiente contaminado y en los climas húmedos y fríos puede ser esencial para evitar la congelación y permanecer seco.

 

Dependiendo de tus razones personales para desear vivir libre de dinero y de tu particular situación, los modos para hacer fuego pueden variar ampliamente. En mi modelo POP para la economía personal que subrayé en el capítulo 3, declaré que mi única razón para vivir libre de dinero surge del deseo de reconectarme con la Naturaleza y con Su gente y lugares. Mantener esa filosofía significa que, en mi modelo POP para hacer fuego, el simple arco y taladro está en la cima.

 

Otros entre vosotros querrán vivir libres de dinero para no tener nunca más que cargar con la economía asalariada y con todo lo que viene con ella. Si es el caso, usar mecheros abandonados o tirados podría estar en la cima de vuestro modelo POP. Con frecuencia los encuentro por la calle alrededor de los pubs los domingos por la mañana.

 

Sin embargo, hay muchas buenas razones para resistirse al uso de mecheros, incluso los que están destinados al vertedero antes de tiempo y otras formas de encendedores producidas en masa. Y hay muchas buenas razones para utilizar arco y taladro.

 

  • Primero, no depende de un sistema industrializado que está matando el planeta y esto es algo importante para mí. Hablar de las consecuencias personales, sociales y ecológicas de la industrialización (y de los conceptos sobre los que se asienta) mientras que simultáneamente te beneficias de ella, me produce bastante disonancia cognitiva. La comodidad es incómoda.

  • Segundo, hace que esté alerta sobre donde estoy, las condiciones meteorológicas, las plantas que me rodean y qué hora del día es. Los beneficios emocionales, físicos, mentales y espirituales de esto son sustancial y sumamente inestimables. Si es un día húmedo, tengo que recoger yesca y astillas por la mañana temprano, mantenerlas pegadas a mi cuerpo durante el día, así por la noche tengo suficiente material seco para encender un fuego. Niveles tan bajos de tecnología me mantienen en el momento presente y profundamente consciente de lo que me rodea. Comparativamente, el mechero es mucho menos beneficioso para el bienestar global de tanto el yo egocéntrico como el holístico. La comodidad nos hace sentir menos vivos.

  • Tercero, el sistema industrializado que crea cada uno de los pequeños aparatos puede no existir en algún momento del futuro. Así que aprender cómo hacer fuego sin ellos podría salvar tu vida en una escenario tipo apocalíptico que todos querríamos evitar. Del mismo modo, si por alguna razón te encuentras en medio de la nada (tipo bosque) sin un mechero, entonces saber cómo utilizar los materiales naturales a mano podría ser la diferencia entre la vida y la muerte. La comodidad puede dejarte peligrosamente poco hábil.

  • Cuarto, es simplemente divertido. La comodidad es aburrida. Una vez que dominas el arte de encender fuego has dado el primer paso en el camino de saber cómo vivir en medio de la tierra en la que te encuentras. Pero es sólo el primer paso básico. Todas las habilidades que necesitas son un libro en sí mismas. El libro de Ray Mears Outdoor Survival Handbook [Manual de Supervivencia al Aire Libre] (89) y Essential Bushcraft [Superviviencia Esencial] (90) junto con el de John 'Lofty' Wiseman SAS Survival Handbook [Manual de Supervivencia del SAS] son guías muy útiles por razones muy variadas. Mears habla elocuentemente sobre nuestra necesidad de caminar muy delicadamente en la Naturaleza para dejar la menor traza posible (que es también un buen talento para la supervivencia en países con animales que te quieren comer) y proporciona todas las destrezas que necesitarás. Lofty es mucho más superviviente, lo que es comprensible dados sus antecedentes militares, y se centra sólo en la supervivencia básica del yo egocéntrico. Yo estoy más en el campo de Mears, pero hay tanto conocimiento práctico empaquetado en el libro de Wiseman que merece la pena tener una copia contigo si tienes la suerte de aventurarte fuera de la civilización.

 

Leer sobre esas habilidades casi perdidas es una cosa, la práctica es otra.

 

Recomiendo fervientemente hacer un curso cerca de donde vives con un profesor que tenga buena reputación y una mirada profunda de la Naturaleza. Cuanto más largo sea el curso, mejor, puesto que te dará la experiencia de practicar y perfeccionar estas destrezas en todo tipo de escenario y condiciones meteorológicas.

 

Alternativamente, ¿por qué no organizar un grupo local de entusiastas de la supervivencia con el que reunirse regularmente y enseñarse mutuamente las habilidades que conoces o hacer series de noches o fines de semana alrededor de la supervivencia? Podría ser realmente una capacidad esencial y muy valiosa en el futuro.

 

Otro elemento crucial en la vida libre de dinero para los puristas es el tallado del sílex puesto que resuelve la cuestión de cómo producir instrumentos cortantes (que es central para la supervivencia) de un modo que no requiera un nivel de tecnología más alto de lo que es necesario para ser sostenibles en términos absolutos.


El arte de tallar sílex

por Will Lord

tallador de sílex, profesor y fundador de Más allá de 2000 A.C (92)

 

El tallado de sílex es el arte de crear herramientas (tales como cuchillos) y proyectiles esculpiendo piedras de sílice como el sílex. Este talento, trágicamente casi inaudito ahora en el Occidente global, fue una parte muy importante de las vidas de algunas personas durante más de 10.000 años.

 

El sílex, cuando se encuentra, está habitualmente recubierto por una piel llamada corteza. Una vez que el sílex se abre, accidentalmente o intencionadamente, tendrá superficies lisas y bordes cortantes. Estos bordes fueron los que interesaron a nuestros ancestros. El color de la superficie interna puede variar mucho, pero con frecuencia el negro se consideraba mejor debido a su alto contenido en sílice.

 

Teniendo esto en cuenta, crearás una forma en sílex para el propósito que se te ocurra, mientras que sea segura para el usuario.

 

Las dos 'herramientas' que se usan para tallar el sílex son:

  1. Martillo Duro: son piedras tipo cuarcita o basalto.

  2. Martillo Suave: se hacen con cornamenta de ciervo, empleando la sección pesada (la que conecta con la cabeza del animal) como superficie del martillo. Se llama coronita.

El proceso comienza usando un martillo duro para eliminar secciones grandes del sílex que no se necesitan.

 

Esto sólo se consigue pensado mucho y dependiendo del detalle de la superficie que vas a golpear, por ejemplo el ángulo del sílex y el volumen que quieres eliminar. Una vez que tengas controlado el proceso y que tengas una forma básica, entonces desgastarás suavemente los bordes para inclinarlos y producir lo que llamamos una plataforma. Después se golpea con el martillo suave que produce lascas más larga y finas dejando el borde afilado como se desea.

 

¿Por qué molestarse con el antiguo arte de tallar sílex en un mundo lleno a rebosar de tecnología (y de cuchillos)? Hay muchas razones para ello, la arqueología es una de ellas. Pero muchos de nosotros nos estamos dando cuenta ahora de que necesitamos volver a un modo de vida más amable con la Tierra. Qué mejor lugar para comenzar que con un talento cotidiano requerido para hacer una de nuestras herramientas y armas más básicas.

 

A medida que avanzas en la talla del sílex el pasado se abre a ti y tú ganas un sentido de empoderamiento personal similar al sentimiento que experimentas cuando enciendes un fuego por fricción - ese sentimiento de libertad, que puedes sobrevivir sin los productos del mundo moderno y toda la destrucción y explotación que van con él.

 

 

Materiales

 

A parte del trabajo, el segundo componente principal de cualquier economía - monetaria u otra - son los materiales.

 

Cuántos necesitas depende de una serie de factores: tu situación particular, si tienes hijos o no, y lo simple o compleja que quieras tu vida. En nuestro mundo de consumismo de masas, vivir libre de dinero no tiene que significar una vida de austeridad, puesto que hay mucho material de desecho para extraer sin producir otra cosa.

 

A pesar de esto, una vida de simplicidad voluntaria puede tener muchas más recompensas que inconvenientes. Una vez que superé mi adicción a las cosas me di cuenta cuánto habían interferido en mi felicidad y qué poco sentido habían añadido.

 

Por ello, aunque voy a elaborar un menú general para que puedas cubrir tus deseos más salvajes sin necesidad de dinero, no estoy de ningún modo animándote a llenar tu vida de porquerías sin sentido sólo porque puedes hacerlo. Las cosas que poseemos acaban por poseernos, erosionando nuestro sentido de libertad y con el tiempo engañándonos hasta pensar que nunca podríamos vivir sin ellas.

 

Cosas en general

Considerando la cantidad de 'cosas' en el mundo y que este libro tiene un tamaño limitado, es imposible hacer un listado de cómo conseguir cada material del mundo sin dinero.

 

Mi mejor recomendación es primero decidir lo que necesitas - y preguntarte realmente si lo necesitas de verdad - y después encontrar un libro o un recurso en Internet especializado en ese material.

 

Hay muchos recursos gratuitos por ahí que podrían ser muy útiles para ayudarte a conseguir lo que necesitas, todos con sus propios méritos; los describiré brevemente. Hay también algunos artículos comunes, como pañales, papel y libros, para los que daré mis soluciones.

 

Si consigues tus propias creaciones innovadoras, incluso mejor.

 

 

Freecycle y Freegle

 

Ambos proyectos hacen exactamente lo mismo. De hecho, Freegle (93) fue creado por un puñado de exmoderadores de Freecycle (94) después de un largo periodo de frustración con la administración estadounidense de Freecycle.

 

¿Qué hacen y cómo trabajan? Ambos son sistemas logísticos muy inteligentes que relacionan gente que tiene cosas que no necesita con gente que no tiene cosas que necesitan y viceversa.

 

Tomemos un ejemplo. Tu hija ha crecido demasiado para utilizar la bicicleta que tiene y ya no la necesitas. Si no tienes una amiga que la quiera, puedes apuntarte a la lista local de Freegle o Freecycle. Publicas una oferta enviando un correo normal a todos los miembros de la lista simplemente explicando la oferta y el código postal en el asunto (OFERTA: Bici de niña 28001) de forma que todo el mundo de la lista lo puede ver.

 

Cualquiera que esté interesado te enviará un correo privado y tú eliges a quién quieres dar la bici. Mi política preferida es que se la lleva la primera persona, a menos que me contacte alguien desesperadamente necesitado. A partir de ahí podéis acordar una fecha para la recogida, lo habitual, aunque no necesariamente, es que lo haga el receptor.

 

Si necesitas algo, también puedes hacer una petición simple (BUSCO: Tetera 33000). Y ya está. Es un sistema en el que todo el mundo gana, aún más nuestro sobrecargado planeta.

 

El primer grupo Freecycle de Gran Bretaña se formó en 2003; en el momento que escribo, existen 540 grupos con 2,5 millones de miembros (hay más de 8 millones de miembros en todo el mundo). Freegle, creado solamente en 2009, ya tiene más de 1,2 millones de miembros en 320 grupos. Lo que significa que, no importa dónde estés, habrá un grupo cerca de ti con suficiente masa crítica para cubrir tus necesidades.

 

El aumento de popularidad de tales proyectos también muestra lo lejos que la economía del don ha llegado en la última década y el gran potencial que tiene en un momento en el que las profundas lagunas del modelo económico dominante se vuelven cada vez más evidentes. Entre Freegle y Freecycle, cada año millones de toneladas de cosas usadas se mantienen alejadas de los vertederos.

 

Un problema es que los proyectos están basados en la Web. Afortunadamente, ahora hay muchas versiones offline de Freecycle - las gratitiendas (Freeshop) y graticlaje en la calle (street freecycling) son dos ejemplos bien establecidos de esto.

 

 

 

Gratitienda (Freeshop)

 

Bristol, y un número creciente de áreas en GB, tiene ahora su propia Gratitienda.

 

Este concepto varía desde un puesto convencional organizado por el grupo local a un formato estándar de tienda en una calle. La última funciona del mismo modo que una tienda normal excepto que no hay caja registradora, cámaras o guardas de seguridad observando cada movimiento. Eres al mismo tiempo proveedor y cliente, aportando las cosas que ya no necesitas y tomando las que necesitas.

 

Piensa en ella como una Freecycle offline, una que no depende de Internet, y una con mayor sentido de comunidad real. Las gratitiendas también tienen la ventaja de permitirte que veas algo y si es necesario, lo pruebes antes de llevarlo.

 

Healthy Planet [Planeta Sano] (95), una organización de beneficencia británica, gestiona una red nacional de tiendas de libros (y DVDs) gratis en salas vacías en las calles comerciales de todo el país.

 

Cara Sandys, la persona que está tras la rama de Southampton, dice que es una situación ganador-ganador para todos: los propietarios tienen una reducción de impuestos por alojar a una organización de beneficencia en locales que no pueden alquilar; el ayuntamiento tiene una tienda desocupada menos de la que preocuparse; los voluntarios tienen un espacio comunitario gratis; y los clientes tienen libros gratis. Añade que no ve ninguna razón para que no se utilice el mismo modelo de tienda gratuita para "mobiliario o ropa de niños" (96).

 

Otra versión reciente de la Gratitienda ha sido el Really Really Free Market [Mercado Realmente Realmente Gratuito] (MRRG) (97) que creció a partir de las protestas antiglobalización de la última década. Aunque no hay dos MRRG iguales - afortunadamente - con frecuencia son tanto para materiales como para trabajo.

 

Contradiciendo lo que nuestra cultura nos quiere hacer creer, nadie llega y se lleva todo de una Gratitienda. La evidencia empírica ha demostrado que cuando la gente sabe que puede coger lo que necesita cuando lo necesita tiene poca o ninguna tendencia a coger más de lo que necesita. La isla ficticia de Thomas More, Utopía, se basaba en esta filosofía; quizá Utopía no sea tan utópica como las economías monetarias nos querrían hacer creer.

 

Si todavía no hay una Gratitienda en tu área, ¿por qué no organizar un grupo para montar una (contactando las que ya existen o Healthy Planet para tener consejos)? Podría ser cualquier cosa desde un puesto semanal o mensual para empezar a un local abierto siete días a la semana (98).

 

 

 

Graticlaje en la calle (Street freecycling)

 

Esta idea está extendida en numerosos barrios de la periferia de Bristol.

 

Es muy similar a las ideas precedentes excepto que pones lo que sea que ya no quieres fuera de tu casa con una nota que diga algo como "Por favor, coge gratis todo lo que hay en el exterior". Ten cuidado de especificar exactamente lo que estás dando, de otro modo ¡podrías ver cómo se van por error tu gnomo del jardín o tu cubo de reciclaje!

 

Podría casi garantizar a cualquiera que quiera amueblar su casa que podría hacerlo sólo pasando un día o dos por tres barrios periféricos de Bristol. Si en tu área no existe esta cultura todavía, entonces sé una pionera y comienza tú misma. Te sorprenderás de lo rápido que la idea levanta el vuelo. Poniendo un cartel diciendo que todo es gratis atrae la atención - antes de que te des cuenta, todos los vecinos lo harán.

 

Las ideas se pueden extender muy rápido con sólo una acción simple.

 

 

 

Contenedores

 

Si alguien tiene un contenedor fuera de su casa lleno de cosas, evidentemente quieren deshacerse de ellas, echa un vistazo para ver si hay algo que necesitas y que se puede rescatar.

 

Si lo hay, es de buena educación llamar a la puerta y preguntar primero, pero casi siempre te darán permiso, en parte debido al hecho de que a poca gente le gusta tirar cosas y parcialmente porque liberará espacio en el contenedor, lo que potencialmente les ahorrará dinero.

 

Pregunta amablemente - si eres amigable, encontrarás que la otra persona también lo será.

 

 

 

Compartir tus cosas - no darlas

 

Si tienes cosas que todavía quieres usar, pero que sólo utilizas irregularmente, quizá quieras compartirlas con otros en vez de darlas.

 

Con este fin, hay un servidor de páginas web para compartir y todas de modos ligeramente diferentes. Mi favorito es un proyecto llamado Streetbank(.com) (99) que describen como,

 "un ático gigante, un cobertizo, un juego de herramientas, un baúl de ropa extravagante, una biblioteca y una colección de DVDs para ti y para cualquiera que viva a un kilómetro de tu casa".

Si por alguna razón, éste no te va, puedes intentarlo también en FavorTree(.com) (100), LetsAllShare(.com) (101) o Ecomodo(.com) (102).

 

Las dos últimas páginas web también te permiten alquilar tus cosas, pero te recomiendo vivamente que hagas un ejercicio de confianza y compartas tus cosas gratis - tendrás muchas más posibilidades de crear una nueva amistad así, algo a lo que muchos de nosotros sabemos que es imposible de dar un valor financiero.

 

Debería añadir que veo todos estos esquemas online como estrategias transicionales. En mi mundo ideal, todos conoceríamos a nuestros vecinos suficientemente bien como para no depender de esa alta tecnología. Pero en realidad, no es así. La gente hoy se ha vuelto aprensiva para pedir cosas prestadas a gente que vive al lado, lo que resume perfectamente la cultura extraña que vivimos.

 

Los proyectos que utilizan programas de alta tecnología como estos pueden ayudarnos a superar el espacio entre la realidad y lo ideal hasta que cuestiones externas transformen la primera en el último.

 

Dicho esto, no hay nada que te impida organizar tu calle, tu ciudad o tu pueblo para hacer algo muy similar a estas páginas web, pero de un modo que no sea online (lo que a menudo excluye a los mayores). ¿Por qué no llamar a la puerta del vecino y organizar una reunión (quizá en el bar) para ver qué sistema funcionaría mejor para tu comunidad, permitiéndote recibir las preocupaciones que tiene la gente relativas a prestar y pedir prestado?

 

Podría ser tan simple como crear una lista fotocopiada de cosas que los miembros interesados del área quieren compartir con los otros.

 

 

 

Pañales

 

Una cosa que probablemente no quieres compartir, o conseguir de Freegle, son los pañales de tus hijos.

 

La mayoría de los padres y madres son conscientes de que se pueden hacer pañales reutilizables y lavables. Si todo el mundo los utilizara, sólo en GB, se ahorrarían 8 millones de pañales en el vertedero cada día (3.000 millones anualmente) (103), además la media de ahorro sería de 580 euros.

 

Sin embargo hay una opción que te ahorra tanto la molestia como el gasto de hacer y usar pañales lavables. Se llama Comunicación de la Eliminación (CE) también conocida como Bebé Sin Pañales (104). Es una técnica de entrenamiento al retrete en la que el padre o la madre utiliza señales, pistas o la intuición para lidiar con las necesidades fisiológicas del bebé.

 

El ideal de este método es no usar pañales, pero lo puedes combinar con pañales lavables cuando la situación lo requiera. Que se extienda el uso de la CE no sólo quita una buena cantidad de ellos de los vertederos y reduce la carga de trabajo que supone el uso de lavables, también empodera a los progenitores para estar más en sintonía con sus hijos. La CE se inspiró inicialmente de los métodos tradicionales de la época preindustrial, así que no es nada nuevo.

 

Al no tener hijos, no hablo desde la experiencia personal. Amigos cercanos han utilizado este método, y hablan muy bien de él en lo que se refiere a la relación con sus hijos, al dinero que ahorran y al impacto ecológico.

 

 

 

Libros y papel

 

Sitios Web para compartir libros

ReaditSwapit(.co.uk) (105) es un sitio web que utiliza un programa y una funcionalidad muy inteligentes para permitirte, primero, encontrar gente que ya tiene los libros que quieres y después, cambiarlos por alguno de los tuyos.

 

Simplemente te suscribes, metes los números ISBN de los libros que quieres pasar (el sitio encuentra toda la información del libro, incluyendo el autor, la edición y una imagen de la portada) antes de empezar a buscar los libros que quieres. Si ningún miembro tiene en ese momento una copia, puedes añadirlo a tu lista de deseos y el sitio te avisará automáticamente en el momento que se añada. Cuando pides un libro que está disponible, tu lista de libros será enviada a la propietaria de ese libro para que elija un título.

 

Si encuentra uno que le gusta, acepta el intercambio y la página os envía la dirección postal de cada una de manera que podéis enviaros los libros (o llevarlos en mano si estáis en la misma zona, lo que significa que no necesitáis dinero para el correo). Y a diferencia de la biblioteca, no tienes que devolverlo lo que es estupendo para libros que se tarda en leer y para gente que no tiene tiempo de leerlos en el tiempo estipulado.

 

Bookmooch(.com) (106) es otro sitio similar que utiliza un sistema ligeramente distinto basado en puntos. También te permite donar fácilmente libros a organizaciones de caridad y a diferencia de ReaditSwapit, su funcionalidad permite intercambios internacionales.

 

Si no puedes encontrar el libro que quieres inmediatamente en ninguno de estos, entonces ¿por qué no hacer un intento con otros tal como Bookhopper(.com) (107)?

 

 

Clubes para compartir libros

Un paso mejor que los sitios Web para compartir libros es un club para compartir libros en la vida real, puesto que no necesita un Internet dependiente de dinero para existir.

 

Podría funcionar exactamente como los anteriores (o mejor aún, con gente dando libros sin la condición de que le devuelvan uno a cambio), excepto que tiene los beneficios de la interacción de la vida real - residentes locales reuniéndose con sus vecinos, la oportunidad de hablar sobre los libros que piensas compartir y una exposición de títulos y temas que ni siquiera hubieras pensado buscar si estuvieras usando un sitio Web.

 

Puesto que es totalmente local, no hay gastos de envío. Si te gustan los libros y te gustaría conocer gente nueva localmente, porqué no organizar tu propio club de libros y promoverlo en la red Freeconomy o en otras redes locales.

 

 

Bookcrossing

Una alternativa realmente divertida a las webs anteriores es Bookcrossing (108), un proyecto más alineado con los ideales de la economía del don que incorpora la filosofía págalo-más-adelante.

 

Funciona así: registras un libro en su sitio web, entonces puedes imprimir una etiqueta para él con un número de identificación único (si eres completamente libre de dinero y sin impresora puedes escribir el número en un lado de la portada usando una pluma con tinta de seta). Todo lo que tienes que hacer después es dejarlo en algún lugar al azar, como un banco del parque, el autobús o en la mesa de un café. El agraciado receptor puede ir online, ver dónde ha estado en el pasado y marcar su nuevo destino.

 

En cualquier momento en el futuro puedes usar el número de identificación para ver a qué lugar del mundo ha ido - los miembros con frecuencia descubren que ha dado la vuelta al planeta yendo a lugares inimaginables, inspirando e informando a mucha gente en el camino y estimulándola a través del espíritu del don incondicional.

 

Si no usas Internet, entonces porqué no simplemente dejar un libro en cualquier lugar con una notita simpática diciendo porqué quieres pasarlo y que esperas que el afortunado lo disfrute. Algunos pubs, cafés y centros públicos tienen rincones de libros que permiten eso - llevas un libro que te gusta y que quieres pasar y si resulta que ves uno que te gusta te lo llevas.

 

 

Bibliotecas

Ésta es una de las pocas herramientas libres de dinero que es obvia para todo el mundo, a pesar de que sólo es gratis en la entrega y no en sus operaciones.

 

Las bibliotecas están infrautilizadas cuando se considera el tamaño del mercado de libros nuevos. Esto es en parte debido al hecho de que ninguno de nuestros líderes políticos nos anima a compartir recursos. Como hemos visto en el capítulo 1, compartir es el enemigo de una economía globalizada de alta tecnología. Se nos ha dicho que la respuesta a la austeridad económica es más crecimiento económico y no el uso eficiente de todos los recursos que ya tenemos.

 

Por más que me gusta la idea de las bibliotecas, son un ejemplo clásico de porqué la economía libre de dinero tiene que estar basada en tecnologías simples. Si todo el mundo dejara de comprar libros hoy y en su lugar, los cogiera de la biblioteca, la industria editorial colapsaría de la noche a la mañana.

 

¿Por qué? Porque compartir es el enemigo de una economía globalizada de alta tecnología. No lo diré suficiente. Y hoy los libros producidos en masa son una forma de alta tecnología, nos guste o no.

 

 

Periódicos

Si necesitas una fuente de papel para encender tu estufa (como yesca o para hacer leños de papel), entonces acércate al vendedor de periódicos y pregúntale si puedes utilizar los periódicos sobrantes que normalmente reciclan.

 

Las basuras del quiosco están a menudo llenas de papel porque sólo tienen que devolver al distribuidor la portada del periódico para recibir la devolución. Puedes ayudarle a reducir el desperdicio y usarlo gratis simplemente preguntando, una relación de la economía del don en la que con frecuencia los vendedores de periódicos están más que encantados de entrar.

Es también un buen recurso a explotar si quieres hacer papel maché. O, como veremos en el capítulo 9, para limpiar tu trasero en combinación con un baño de composta.

 

 

Papel y bolígrafos

En la parte más alta de mi modelo POP para papel y bolígrafos estaría hacerlos tú mismo.

 

Los puedes hacer usando una combinación de Coprinopsis atramentaria para la tinta y una pluma de un pájaro grande y algunos políporos del abedul (Piptoporus betulinus) o políporo de escamas (Polyporus squamosus) junto con una malla y un marco para hacer papel (109).

 

Me di cuenta de que cuando tienes que encontrar los materiales para hacerlo y hacerlo tú mismo, tienes menos tendencia a desperdiciarlo que cuando tienes hojas de A4 que puedes encontrar por algunos euros en la tienda.

 

A menos que quieras conectar con la Naturaleza hasta ese punto, hay modos más simples de conseguir papel sin coste. Usar el reverso de los sobres está bien y especialmente si es de publicidad. Si tienes amigos que trabajen en una oficina, pídeles que recuperen papel que sólo ha sido impreso por una cara y que no trituren.

 

Como con todo lo relativo a la vida libre de dinero, observar todo desperdicio como una fuente potencial te ayudará a encontrar tus propias soluciones creativas que es cómo debería ser. La homogeneización y la uniformidad no tienen lugar en la economía libre de dinero que yo imagino.

 

 

 

Herramientas, aparatos y equipamiento

 

Quiero decirte un pequeño secreto - odio los cortacésped. No es sólo que arruinen la paz y tranquilidad de una en otro tiempo gloriosa tarde de verano; también son domadores de jardines potencialmente salvajes.

 

Dejar que tu jardín evolucione como quiere se ha convertido en un 'faux pas' social y un camino limpiamente recortado se ha convertido curiosamente en un ideal por el que hay que luchar. El césped perfectamente cuidado se ha convertido en el símbolo más revelador de lo profundamente que nos ha afectado la historia de nuestra separación de la Naturaleza.

 

Tengo algo que agradecer a los cortacésped: me estimularon a incluir en el movimiento de Freeconomy un programa mundial (pero localizado) para compartir herramientas (incluye más de 2.000 herramientas tales como cámaras digitales, guadañas, taladros de todo tipo e impresoras). En el verano de 2007 vivía en una calle de 45 casas. En mis tres años allí, nunca oí más de un cortacésped funcionando al mismo tiempo. A pesar de esta observación, una persona de cada dos en la calle tenía uno.

 

Era descaradamente obvio incluso para un loco como yo que no era un buen uso del dinero (o del tiempo) ganado duramente por los residentes locales, ni de los decrecientes recursos del planeta. La solución no era muy complicada - un programa que ya habíamos desarrollado para el área de compartir talentos Freeconomy. Lo único que implicaba era aplicar los mismos principios y métodos para el programa de compartir herramientas.

 

A pesar de sus orígenes como un proyecto para compartir habilidades, Freeconomy también es el sitio Web más grande del mundo para compartir herramientas. Funciona del mismo modo que el departamento para compartir talentos. Simplemente te inscribes, eliges las herramientas que quieres compartir con otros miembros en tu área y buscas las que necesitas cuando las necesitas. Los términos con los que los miembros comparten dependen de los individuos involucrados; de nuevo, el único requisito es que no haya intercambio de dinero.

 

Como argumenté en el capítulo 1, es importante recordar que incluso compartir nuestras herramientas de alta tecnología no es una solución sostenible a largo plazo.

 

El cortacésped sólo puede producirse (especialmente a los precios que encontramos ahora) si una de cada dos personas de la calle tiene uno. Si hubiera realmente sólo uno por cada 45 casas, la industria colapsaría por no ser capaz de tener beneficios de las economías de escala requeridas. No me sentiría demasiado orgulloso por compartir el cortacésped - la única solución a largo plazo es simplificar nuestras tecnologías de modo que puedan hacerse a escala local.

 

Dicho esto, proyectos como Toolshare [Compartir herramientas] siguen siendo potentes estrategias transicionales, que deberíamos utilizar totalmente como un paso intermedio para reducir nuestra huella ecológica hasta que fuerzas externas conspiren para ayudarnos a construir las economías del futuro.

 

El sistema Toolshare de Freeconomy es sólo un alternativa de pobre frente a conocer a tu vecino lo suficientemente bien como para saber que tiene un cortacésped y estar en suficientes buenas relaciones como para pedírselo prestado (o para mostrarle como utilizar una guadaña).

 

Me gustaría que Freeconomy se volviera obsoleto en 10 años, porque tal solución tecnológica ya no fuera necesaria.


 

Cinco cosas que hacer con un pallet

por Dave Hamilton

autor de Grow your food for free… well almost [Cultiva tu comida gratis… bueno casi] y co-autor (aparentemente ha escrito los mejores fragmentos) de The Self-Sufficientish Bible [La Biblia de la Autosuficiencia]

 

Es célebre que los prisioneros de la conocida Bahía de Guantánamo hicieron su trocito de verduras con nada más que las semillas de sus comidas y con las cucharas de plástico que les daban para comer.

 

Esto demuestra que cultivar tu propia comida no tiene que ser caro y que incluso no tiene porque costar nada. Si ellos pueden hacerlo con tan pocos recursos, cualquiera puede.

 

 

Pallets

Los pallets se han convertido en una parte universal de la vida moderna.

 

Necesarios para transportar toda la mierda que muchos parecen considerar esencial para la existencia, pueden aparecer en los lugares más insospechados. Creo que se han vuelto tan ubicuos que si alguna vez colonizamos las estrellas los pallets vendrán con nosotros.

 

Al contrario de muchos de los desperdicios de la vida en el siglo XXI, el pallet tiene al menos algunos usos y muchos de ellos son en horticultura.

 

Plataformas de composta

son una de las cosas más fáciles y prácticas que puedes hacer con pallets. Simplemente atornilla tres juntos en forma de U después entiérralos en la tierra hasta el ancho de un tabla para evitar que se caiga. A continuación usa otro atado delante a modo de puerta. Es mejor tener tres: uno para fermentar, uno para añadir y uno para usar. Sin embargo, si no tienes espacio puedes arreglártelas con uno.

 

Maceta

Arranca una de las tablas con una barra. Usa cuatro como postes, atornilla tres tablas a lo largo y tres a lo ancho a los postes antes de cortarlos al tamaño deseado. Llénalo con una mezcla de composta y tierra y alimenta las plantas enfermas o que están dando frutos con consuelda.


Asiento

Busca online una plantilla para hacer un asiento. A falta de eso, si tienes un futón mira cómo está ensamblado y úsalo como modelo.


Cobertizo

Son un poco más complicados, pero posibles. Me resultó mejor con los postes desechados de la estructura interna de viejos muros huecos y después usar pallets que no tuvieran agujeros entre las planchas como superficie externa. Otros métodos suponen atornillar dos pallets juntos para la parte de atrás del cobertizo y cuatro (dos altos) por los lados. Las paredes no estarán a prueba de lluvia a menos que las cubras, pero debería ser una estructura fuerte.


Valla

Usa pallets intactos como paneles de la valla o simplemente deja un lado intacto, quitando los bloques y los soportes inferiores y atornilla a los postes de la valla, haciendo una terminación en punta.

 

Las cosas sólo se convierten en basura cuando ya no encontramos un uso para ellas. Los pallets son sólo la punta del iceberg lleno de basura. Hay un mundo de artículos desechados esperando a que los usemos - en la horticultura o de otra manera.

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