Los seres humanos estamos siendo fumigados como insectos desde hace 
			décadas por todo el planeta. 
				 
				
				A continuación tenemos una entrevista a 
			la doctora en Toxicología Industrial Hildegarde Staninger, en la que 
			se establece una clara relación entre el 
				
				Síndrome Morgellons y las 
			fumigaciones 
				Chemtrails. La Dra. explica en detalle algunas de las 
			acciones que están llevando a cabo contra el ser humano mediante las 
			fumigaciones secretas de estos nano-fibras sintéticas. 
				 
				
				Tras las 
			fumigaciones, se introducen en el cuerpo humano 
				
				nano-partículas que 
			funcionan activamente como nano-robots en el interior de nuestro 
			organismo generando maquiavélicos problemas de salud. Algunas personas 
			han sentido como si tuvieran insectos corriendo debajo de la piel. 
				
				 
				
				Además, dice que podría afectar especialmente a aquellas personas 
			con implantes de silicona.
Todos estamos siendo expuestos a estos nano-robots, sólo es cuestión 
			de cómo reaccione la genética de cada uno. Estamos siendo 
			envenenados y parasitados artificialmente.
DESPERTARES
				
				
 
				
				 
				
				
Creo que mañana van a volver a la carga…
				
Estoy casi segura que el objetivo no es la modificación del clima, 
			sino nosotros, los seres humanos.
Los reportajes sobre la enfermedad de Morgellons, que se está 
			disparando en número por todo el mundo, y ya hay científicos que la 
			relacionan con los chemtrails. Que sueltan esas fibras que parecen 
			telarañas y quedan pegadas en los tejados, árboles, césped… 
			
				 
				
				Investigadores comentan que al entrar en el cuerpo humano, éste no 
			lo detecta como un enemigo y por ello no se nos activa el sistema 
			inmunológico. Buscad información al respecto. Hay una entrevista a 
			la doctora en Toxicología Industrial Hildegarde Staninger que lo 
			explica. 
				 
				
				Y comenta que los metales pesados son vehiculantes, porque 
			al llevar carga mantienen en correcto estado las fibras, que una vez 
			las tenemos dentro, ya se activan solas por los propios impulsos 
			eléctricos del cuerpo.
Heura