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			04 Enero 2016 
			
			del Sitio Web
			
			PYHS 
			traducción de Pedro 
			Donaire  
			05 Enero 2016 
			
			del Sitio Web
			
			BitNavegante 
			
			
			
			Versión original en ingles 
			 
  
			
			  
			
			  
			
			
			  
			
			P22-Hyd 
			
			  
			
			  
			
			 
			Los científicos de la Universidad de Indiana han creado un 
			biomaterial altamente eficiente, capaz de catalizar la formación de 
			hidrógeno de ese "santo grial" de la división del H2O, 
			a fin de producir hidrógeno y oxígeno que sirva de combustible a 
			coches baratos y eficientes que funcionen con agua. 
  
			
			  
			
			  
			Renderización artística de P22-Hyd,  
			
			un nuevo biomaterial 
			creado al encapsular  
			
			una enzima de 
			hidrógeno dentro de una envoltura de virus.  
			
			Crédito: Indiana 
			University 
			
			  
			
			 
			La enzima modificada gana fuerza al estar protegida dentro de la 
			envoltura de proteínas o "cápside" 
			de un virus bacteriófago; este nuevo material es 150 
			veces más eficiente que la forma inalterada de la enzima. 
			 
			El proceso de creación del material fue informado recientemente
			
			en el journal Nature Chemistry.
			 
			
				
				"Básicamente, hemos tomado la 
				capacidad de un virus para auto-ensamblar innumerables bloques 
				de construcción genéticos e incorporarlos a una enzima muy 
				frágil y sensible, con la notable propiedad de tomar protones y 
				expulsar gas de hidrógeno", dijo Trevor Douglas, profesor de 
				Química Earl Blough en la Universidad de Artes y Ciencias de 
				Bloomington, que dirigió el estudio.  
				  
				
				"El resultado final es una partícula 
				similar a un virus que se comporta igual que un material 
				altamente sofisticado que cataliza la producción de hidrógeno." 
			 
			
			Otros científicos de la misma 
			universidad que han contribuido a la investigación fueron, 
			
				
					- 
					
					Megan C. Thielges, profesor 
					asistente de química  
					- 
					
					Ethan J. Edwards, Ph.D. 
					estudiante  
					- 
					
					Paul C. Jordan, un investigador 
					post-doctoral en Alios BioPharma, que era doctorando en el 
					momento del estudio  
				 
			 
			
			  
			
			  
			
			Ilustración que 
			muestra la liberación de hidrogenasa-NiFe  
			
			desde el interior de 
			la envoltura del virus, o "cápside",  
			
			de un P22 
			bacteriófago.  
			
			Crédito: Universidad 
			de Indiana 
  
			
			  
			
			El material genético utilizado para 
			crear la enzima,
			
			hidrogenasa, es producido por dos 
			genes de la bacteria común
			
			Escherichia coli, insertados dentro 
			de la cápside de protección, utilizando métodos desarrollados 
			previamente por estos científicos.  
			
			  
			
			Los genes, hyaA y hyaB, dos genes de la 
			E. coli que codifican subunidades clave de la enzima hidrogenasa. La 
			cápside proviene del virus bacteriano conocido como bacteriófago 
			P22. 
			 
			El biomaterial resultante, llamado "P22-Hyd" (un nuevo 
			biomaterial creado mediante la encapsulación de una enzima 
			productora de hidrógeno dentro de un cascaron de virus), no sólo 
			es más eficiente que la enzima inalterada, sino que también se puede 
			producir a través de un proceso de fermentación sencilla a 
			temperatura ambiente. 
			 
			El material es potencialmente mucho menos costoso de producir y más 
			respetuoso con el medio ambiente que otros materiales utilizados 
			actualmente para crear pilas de combustible.  
			
			  
			
			Por ejemplo, el platino es un metal poco 
			frecuente y costoso, y se utiliza comúnmente para catalizar el 
			hidrógeno como combustible en productos tales como coches de 
			concepto de alta gama. 
			
				
				"Este material es comparable al 
				platino, excepto que es verdaderamente renovable", subrayó 
				Douglas.  
				  
				
				"No es necesario extraerlo, puedes 
				crearlo a temperatura ambiente utilizando una tecnología de 
				fermentación a escala masiva, y es biodegradable. Se trata de un 
				proceso muy ecológico de fabricar un material sostenible de muy 
				alto nivel." 
			 
			
			El P22-Hyd rompe los enlaces químicos 
			del agua para crear hidrógeno y además trabaja a la inversa para 
			recombinar el hidrógeno y el oxígeno para generar energía.  
			
				
				"La reacción se ejecuta en ambos 
				sentidos, de manera que puede ser utilizado como catalizador 
				para la producción de hidrógeno y como catalizador para pilas de 
				combustible", explicaba Douglas. 
			 
			
			La forma de hidrogenasa es una de las 
			tres que se dan en la naturaleza:  
			
				
				di-hierro (FeFe), de sólo hierro 
				(Fe-only) y de nitrógeno-hierro (NiFe).  
			 
			
			Para el nuevo material fue seleccionada 
			la tercera forma, debido a su capacidad para integrarse fácilmente 
			en los biomateriales y tolerar la exposición al oxígeno. 
			 
			La
			
			hidrogenasa-NiFe también gana 
			significativamente mayor resistencia a la encapsulación y 
			descomposición de productos químicos del medio ambiente, y conserva 
			la capacidad de catalizar a temperatura ambiente.  
			
			  
			
			La hidrogenasa-NiFe sin alterar, por el 
			contrario, es altamente susceptible a la destrucción de productos 
			químicos del medio ambiente y se descompone a temperaturas 
			superiores a la temperatura ambiente, haciendo de esta enzima sin 
			protección una mala elección para su uso en la fabricación y 
			productos comerciales como los automóviles. 
			 
			Estas sensibilidades son, 
			
				
				"algunas de las principales razones 
				por lo que estas enzimas no han cumplido anteriormente con su 
				promesa tecnológica", señaló Douglas.  
			 
			
			Otra es su dificultad de producirla. 
			
				
				"Nadie logró nunca una forma de 
				crear la suficiente gran cantidad de esta hidrogenasa, pese a su 
				increíble potencial para la producción de biocombustibles.
				 
				  
				
				Ahora, sin embargo, tenemos un 
				método para estabilizar y producir altas cantidades de material 
				y de aumentar enormemente su eficiencia." 
			 
			
			El desarrollo es altamente 
			significativo, de acuerdo con Seung-Wuk Lee, profesor de 
			bioingeniería de la Universidad de California-Berkeley, que no formó 
			parte del estudio. 
			
				
				"El grupo de Douglas ha estado al 
				frente en este tipo de trabajos durante las dos últimas décadas.
				 
				  
				
				Se trata de un nuevo trabajo pionero 
				para producir combustibles ecológicos y limpios y hacer frente 
				al problema de la energía en el mundo real al que nos 
				enfrentamos hoy en día, y crear con ello un impacto inmediato en 
				nuestra vida en el futuro cercano", comentó Lee, cuyo trabajo ha 
				sido citado en un informe del Congreso estadounidense sobre el 
				uso de los virus en la fabricación. 
			 
			
			Más allá del nuevo estudio, Trevor 
			Douglas y sus colegas siguen trabajando con P22-Hyd como 
			ingrediente ideal para aprovechar la energía de hidrógeno 
			investigando formas de activar una reacción catalítica con la luz 
			del Sol, en contraposición a otros métodos de laboratorio. 
			
				
				"La incorporación de este material 
				en un sistema de energía solar es el siguiente paso", añadió 
				Douglas. 
			 
			
			  
			
			  
			
			Referencias 
			
				
			 
			
			 
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