20 Septiembre 2014

del Sitio Web RT

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Un equipo de RT habló con los dos físicos rusos que buscan reproducir la legendaria Torre Wardenclyffe, creada a inicios del siglo XX por el gran Nikola Tesla, para generar energía limpia y que permitiría transmitirla de forma inalámbrica.

 

 

"No hay emoción más intensa para un inventor que ver una de sus creaciones funcionando", esta es una de las frases más conocidas del físico Nikola Tesla (1856-1943), para algunos, el mayor inventor de la historia de la humanidad.

 

Y aunque este físico realizó esta afirmación tras ver consumados muchos de sus proyectos, quizás el más importante de ellos no corrió la misma suerte.

La Torre Wardenclyffe, también conocida como la Torre Tesla (ver video a pie de pagina), se construyó cerca de la isla de Manhattan (EE.UU.) a inicios de 1900 pero no se completó por razones desconocidas hasta ahora, aunque se alega que su cierre fue por problemas financieros. Según teorías de Tesla, este proyecto podría ser el sistema más efectivo en el mundo para la producción y transmisión de electricidad.

Ahora los físicos rusos Leonid y Serguéi Plejánov proponen ejecutar este proyecto, utilizando materiales y tecnología contemporánea.

"Imagina que puedes poner paneles solares en una extensión de 100.000 kilómetros en el Sahara, y construyes una torre de alto voltaje industrial de transmisión allí.

 

Eso será suficiente para abastecer de energía a todo el mundo. Ya puedes olvidarte de estaciones de gas, estaciones de carbón, plantas nucleares, etc.", comentaron a RT los hermanos Plejánov.
 
 

"Ya puedes olvidarte de

estaciones de gas, estaciones de carbón,

plantas nucleares, etc. "

 

 

Serguéi y Leonid desean desarrollar un laboratorio experimental para mostrar que el proyecto de Tesla es posible.

 

Pero para el prototipo a escala necesitan 800.000 dólares. Dada la magnitud de la cifra, han lanzado una campaña de 'crowdfunding' (financiación colectiva) a través de Internet para recaudar el dinero.

En Rusia, los experimentos o prácticas relacionadas a la energía no son de solo de ahora. Ya en la década de 1980, el Estado Soviético construyó una torre para canalizar rayos eléctricos generados en las tormentas, y así poder analizar su impacto.

Los hermanos Plejánov comenzaron los estudios de los documentos y patentes de Tesla hace unos cinco años.

 

Para defender las ventajas del proyecto, aseguran que las fuentes de energía verde suelen tener sus generadores muy alejados de los centros de consumo y esto implica un gran costo para transportarla, mientras que su proyecto no precisa de ese gasto.

Según los físicos rusos,

"los desiertos del planeta reciben del Sol en 6 horas la misma energía que necesita el mundo durante un año".

De los 800.000 dólares necesarios para realizar el proyecto, al momento solo han recaudado cerca de 50.000.

 

Sin embargo, los hermanos Plejánov consideran que si logran transformar en realidad el mito que envuelve la Torre Tesla, no solo habrán devuelto la credibilidad a su creador, sino que también le habrán mostrado al mundo, una forma revolucionaria de administrar la energía eléctrica.

Según los autores del proyecto, la versión moderna de Wardenclyffe, también conocida como 'transmisor planetario', permitirá,

"transmitir la energía a través de la Tierra a cualquier distancia en el planeta", lo cual ayudará a resolver muchos problemas tecnológicos.