por Ed Komarek
08 Marzo 2011
del Sitio Web ExopoliticsBlogspot

traducción de Adela Kaufmann
Versión original
 

Conocí a los Hopi alrededor de mediados de 1950 cuando era un niño, y siempre quise volver y visitarlos antes de morir.

Nuestra vida familiar era enriquecida por nuestro contacto y relación con miembros tribales Hopi, y creo que era lo cierto para los individuos Hopi y sus familias, a quienes llegamos a respetar y amar también. Una de las muchas razones que los Hopi llegaron a confiar en papá era que él confiaba en ellos con su familia y trataba a todas las personas con igual respeto y amor, y ha sido lo mismo con toda la familia.

Siempre he tenido una buena excusa para volver, porque mi papá, Ed Komarek Sr., fue un ecologista, empresario y científico y siempre tomó muchísimas fotos dondequiera que viajaba.

Tall Timbers Research Inc. tienen los documentos oficiales administrativos de mi padre en sus archivos, y esto incluye las fotos de los Hopi, especialmente algunas invaluables películas de cortometraje de ceremonias sagradas Hopi que a otros blancos no se les permitía ver ni filmar.

Recuerdo vagamente los debates en ese tiempo, entre los ancianos Hopi y papá. Ellos sabían que estaban perdiendo rápidamente su cultura e historia, y creo que por eso acordaron con papá permitirle tomar fotos, tanto para los Hopi como para futuras generaciones de la nación.

Hay que recordar que en la década de 1950 y antes, los Hopi fueron maltratados por los blancos.

Incluso en la década de 1950, turistas blancos irrumpían directamente en casas Hopi tomando fotografías sin permiso. Nuestra familia fue una de las muy pocas excepciones, que trató a los Hopi con amor y respeto, y este fue devuelto.

Roland N., cuyo apellido no puedo deletrear, y que ahora está muerto, solía venir a nuestra Plantación Songbird (Canto de Pájaro) a cazar pavos salvajes, y yo solía ir a cazar con él. Él estaba estacionado en la Base Aérea Englin no muy lejos. Todavía tengo el pequeño arco, las flechas y el rayo de baile que hizo para mí.

Recuerdo los ancianos Hopi enseñarme a cómo bailar probablemente gobernador Howard o Peter N. La relación con los Hopi comenzó cuando papá estaba buscando encontrar tipos primitivos de maíz que eran resistentes a la sequía de los calurosos veranos del sur. Trabajó como gerente de la plantación de caza Greenwood, directamente con el famoso financista John Hay Whitney, que también fue embajador en Inglaterra.

Papá tenía una relación especial con John, cuando el trabajo científico de papá era considerado como parte de su trabajo en Greenwood. Mientras las cosas se desarrollaran sin contratiempos en Greenwood, papá podía pasar la mayor parte de su tiempo y el tiempo de su hermano Roy, organizando y construyendo el Tall Timbers Research Station. John quería hacer algo para la agricultura sureña que ayudara a pagar las facturas de Greenwood, por lo a que él y a papá se les ocurrió la idea de un negocio de semillas de maíz híbrido.

De alguna manera papá, a través de sus círculos científicos descubrió que el maíz de los Hopi y otros granos indios en el oeste podrían ser plantados dos piensos abajo, donde había humedad en el desierto y que brotarían y crecerían hasta la superficie.

Recuerdo que papá tuvo que crear un poco de exhibición en una vitrina para probar esto, ya que la gente en Greenwood no creía que esto fuese posible. Recuerdo haber visto esta exposición. La información genética del maíz indio se convirtió en parte de los granos híbridos de maíz del sur en Dixie 18 vendidos, por la Compañía de Semillas Greenwood.

Mi padre y mi madre Betty Komarek decidieron que toda la familia debía ir a acampar en el oeste en unas vacaciones en familia. Durante varios principios de veranos la familia pasó mucho tiempo con varias tribus indígenas, pero los Hopi resultaron ser especiales. Recuerdo que cuando llegamos a la tierra Hopi, que papá se reunió con el gobernador Peter N., que empezó a probarlo de buenas a primeras, como a papá le gustaba decir, y le dijo a papá que él estaba ocupado y que volviera mañana.

Se nos permitió acampar en un huerto de manzanas en el desierto por la noche, y Peter estaba sorprendido que papá regresara al día siguiente y de nuevo le dijo que regresara al día siguiente.

A Peter se le imaginaba que, como la mayoría de la gente blanca, papá no tenía el interés o la paciencia para seguir siendo postergado.

En el tercer día quiso la suerte que papá comenzara a hablar con Peter sobre su pequeña colección de mamíferos que todavía tenía como un hobby para el Museo de Campo de Chicago, y quiso la suerte que papá sacara un cajón de Tortugas Gopher rellenas.

Peter dijo:

“¿tú mismo atrapas estos?”, “sí”, dijo papá, y Peter dijo, “¡Ven conmigo!”

Papá llevó consigo un par de trampas para Gophers (ardillas de campo) al campo sagrado de maíz donde los Gopher estaban comiéndose las raíces del maíz bajo tierra.

Una vez más quiso la suerte que al día siguiente papá cogió una Gopher con una de las trampas subterráneas.

Esa es la historia de cómo como papá solía decir que rompió el hielo y fue el comienzo de una larga e inusual amistad que le dio a papá la oportunidad de conocer a otros ancianos Hopi y gobernadores. Mirando hacia atrás, en retrospectiva, todos estos acontecimientos aparentemente ordinarios tuvieron una importancia espiritual más profunda, ya que nuestra relación con los Hopi realmente despegó en esa parcela sagrada de maíz. Esto lo llevé en mis sueños durante toda mi vida.

Veo las piezas cayendo en su lugar mientras planeo este viaje hacia el oeste en abril. Creo que en realidad nada sucede por accidente y se puede observar esto en nuestra vida cotidiana si prestamos atención.

Creo que las historias de la raza extraterrestre llamada los Tall Whites por Charles Hall no es nueva, estoy investigando evidencias, y el contacto se remonta en el tiempo hasta antes de que del hombre blanco, según consta en las historias sagradas de los indios del suroeste.

Creo que es importante que vaya de nuevo a la tierra Hopi antes de ir a Nevada a investigar a los Tal Whites (los Blancos Altos).

Al momento de escribir este artículo recuerdo que los muñecos Kachina representan a la Gente del Cielo y que mientras los Blancos Altos vinieron del espacio, también vivieron bajo tierra en el Valle de Indian Springs, Nevada y desde su base se aventuraban a la superficie y sin duda entraron en contacto con los pueblos indígenas antes del hombre blanco.

Me acuerdo de las Kivas sagradas construidas bajo tierra y las historias de la creación de los Hopi emergiendo de las entrañas de la tierra a una vida sobre la tierra.

El primer viaje hacia el oeste fue el comienzo de varios viajes de verano, a las tierras Hopi. Creo que la generación más joven Hopi se sorprenderían de saber que muchos de los sonajeros de tortugas sagradas utilizados en las ceremonias sagradas, cascabeles de piernas y tambores llegaron desde el sudoeste de Georgia y de un hombre blanco.

No sólo los Hopi quieren caparazones de tortuga, sino que también pieles de zorro y plumas de guajolotes silvestres que la familia les suministra. No me sorprendería que algunos de estos no terminen en museos Hopi.

No satisfechos con sólo recibir los regalos, los Hopi insistieron en devolver a cambio muñecas Kachina, vasijas de barro, figuras de arcilla y cestas, y mucho de esto se encuentra en nuestro lugar de origen que ahora se llama Centro Natural Canto de Pájaro (Birdsong Nature Center). Recuerdo en mi infancia haber limpiado los caparazones de las ahora en peligro de extinción Tortugas Gopher, caparazones de tortugas de agua y caparazones de tortugas de cajón, con nuestra contratada mano de obra de Pete en nuestro granero.

Dudo que el significado espiritual más profundo de esto pasara desapercibido por los Hopi de hoy. Mientras papá siempre fue el científico objetivo, hacia el exterior, al verlo por dentro no iba a ser lo mismo conmigo. Yo elegí el camino espiritual a temprana edad, cuando comencé a interesarme en lo paranormal entrando a una librería metafísica en Fairbanks, Alaska en pleno invierno.

Este interés progresó hasta el interés que tengo hoy en la vida extraterrestre, y lo que ésta significa para la evolución humana en la tierra y en el espacio.

Me imagino que sé casi tanto como cualquiera sin una autorización de seguridad de Alto Secreto, y necesito ganar acceso. He oído decir que desde hace mucho tiempo, al investigador OVNI/ET Wendle Stevens que poco antes de su muerte visitó la tierra Hopi el año pasado y pensé que esto era espiritualmente significativo. Cabe señalar que Wendele dijo que había conocido a los Blancos altos dos veces en su vida, como me lo contó Aileen Edwards.

He oído bastantes historias de papá acerca de sus interacciones con los Hopi. Una de los más interesantes fue que un campesino le dijo a papá que él iba a dejar que el viento pusiera 2 pulgadas de tierra vegetal en su campo. Papá no le creyó, pero siendo el científico que fue puesto fuera del juego y por supuesto el año siguiente había dos pulgadas más de tierra vegetal en ese campo.

Mediante el uso del cepillo y ramas clavadas en el suelo, el agricultor utilizó al viento para cubrir el campo de manera uniforme con una capa superior de suelo.

De niño yo estaba mucho más interesado ​​en los animales y en las plantas para buscar alrededor de las casas indígenas, especialmente sapos cornudos como mascotas que de aprender acerca de las personas. Mi hermana era más social y desarrolló y mantuvo una relación con la hija de Peter N. y viajó a la tierra Hopi varias veces.

Ella murió hace varios años y el resto de la familia se ha ido, y yo soy el último de los Komarek, ya que ni mi hermana ni yo nunca tuvimos hijos.

Hoy me metí en el Internet y hablé por teléfono con un Hopi en el Centro de Conservación Hopi acerca del material de archivo de mi padre. Estoy feliz de estar nuevamente en contacto con los Hopi y estoy deseando volver a restablecer el contacto con otros muchos de los Hopi.

Me pregunto si alguno de los niños con quienes mi hermana y yo jugamos detrás de las casas, donde nos mostraron el águila sagrada todavía están vivos y recuerdan a ese pequeño niño blanco de cabeza roja y a su hermana.

O a nosotros en esa aldea donde llegábamos, los tíos disfrazados de demonios persiguiendo a los niños y encarcelándolos, y que sus padres tenían que comprar su libertad con pan si no habían sido malos.

Mis padres dejaron el coche y cuando los demonios nos descubrieron, yo cerré las puertas ¡y mi hermana fue encarcelada! ¡Qué manera de mantener a los niños en la línea el resto del año.

A medida que avanza el tiempo voy a tratar de recordar más información para compartir antes de regresar a la tierra Hopi mes de abril, en mi gira occidental.

Ahora, armado con un nuevo ordenador portátil con acceso móvil, puedo mantenerme en contacto con amigos y socios de la comunidad OVNI/ET y mantener mi Offworld News Service mientras rastreo los pasos de los viajes de nuestra familia al oeste de hace más de 50 años.