PRIMERA PARTE

EVIDENCIA DE VUELCOS DEL GLOBO 
 

I - Escritos Históricos 
 

De la historia judía temprana, según consta en la Biblia, nos llega la historia de un gran diluvio, una historia familiar para los pueblos más civilizados. *

Todas las montañas estaban cubiertas por el agua. Noé y su familia, junto con dos de cada especie de aves, bestias, y reptiles fueron salvados en un arca que atracó en el monte Ararat en Asia Menor. La elevación más alta de esta montaña es 17,100 pies sobre el nivel del mar. 

La causa física de la gran inundación es confirmada por la historia bíblica, que consta de dos narrativas fusionadas, de éstas nos enteramos de que "ese mismo día todas las fuentes de la gran profundidad se rompieron... Y la lluvia cayó sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches.

Es lógico y evidente que la ruptura de "todas las fuentes del gran abismo", fue el efecto de una causa específica, y que la causa fue mecánica, obligando a un cambio en los niveles de mar y tierra. 

Es obvio que la lluvia de cuarenta días y cuarenta noches fue incidental a la inundación, y no su causa. Noé y su grupo de supervivientes fueron "encerrados" el Arca, y por lo tanto no sabían nada de las condiciones atmosféricas exteriores. Es posible que hayan pensado que la lluvia causó la inundación, ya que la historia de la lluvia ha sido transmitida por su posteridad. 

La aritmética simple demuestra la imposibilidad de la teoría que sostiene que la tierra fue inundada hasta las cimas de las montañas por agua de lluvia; esto deja "las fuentes del gran abismo" como la causa natural de la inundación, estando ésto de acuerdo con los registros históricos. 

El monte Everest está a 29,000 pies sobre el nivel del mar, y su cima estaba sumergida. En cuarenta días y cuarenta noches, hay 960 horas o 57,600 minutos, para que las aguas se levantaran 29,000 pies, por lo que las aguas subieron 725 pies por día, 30 pies por hora, o aproximadamente 6 pulgadas por minuto! 

Obviamente ninguna lluvia continua podría crear tan grande inundación. Dado que las aguas de lluvia se escurren hacia los océanos, tal inundación sería imposible por medio de la lluvia. Además, sería más allá de la capacidad del ciclo de evaporación de la lluvia, condensación y precipitación para producirlo. 

Por lo tanto, ruptura de las aguas de las fuentes del gran abismo, (Vea las páginas 51, 144) causada por los movimientos de los materiales de la tierra, se mantiene como la interpretación lógica de la historia bíblica del Diluvio. Por otra parte, esto encaja claramente en el patrón de la teoría del vuelco del globo, y ayuda en la identificación del último vuelco  de la tierra como la causa de la inundación. 

En la mitología de los griegos, el pecado de la raza humana provocó que Zeus aplastara la tierra con una inundación, lo que ocurrió, según se decía, en el siglo XV antes de su Época. A partir de esta inundación, sólo un hombre, Deucalión y su esposa, Pyrra, sobrevivieron en el arca o cofre que llegó a posarse en el monte Parnaso, Grecia. La altura sobre el nivel del mar actual de esta montaña es 8,000 pies. Los helenos (griegos) eran descendientes del hijo de Deucalión, Hellen. 

Los antiguos hindúes, caldeos y judíos, todos tienen registros que indican que un gran diluvio ocurrió hace poco más de 5,000 años. 

Cuvier se refiere, sin identificación, a una antigua colección brahamana de prosa indoeuropea que tenía una teoría  recurrente de la inundación. 

William Thomasson dice en su libro El Período Glacial y El Diluvio que,

"los chinos tienen una maravillosa tradición, que adecuadamente interpretada, nos habla de su repentino salto volando hasta el Ártico... Es la historia de los Diez Troncos o Edades."

Confucio, nacido alrededor de 551 A.C., comienza su historia de China, con una referencia a una inundación retrocediendo había sido "elevada a los cielos." 

Platón, relata, a través de la historia Critias, a Solón por medio de los sacerdotes egipcios en el año 600 A.C., que una gran guerra de invasión se había producido cerca de 9,000 años atrás, liderado por los reyes de la Atlántida, una poderosa isla imperio, que fue más tarde hundida por un terremoto, dejando una infranqueable barrera de barro para los marineros navegando más allá de lo que hoy es Gibraltar.

Atlántida - El Mundo Antediluviano

por Ignatius Donnelly

Texto completo

Contiene pruebas históricas de un gran diluvio, incluidos los detalles de muchos registros escritos y leyendas de Asiria, Babilonia, Caldea, Hindú, y el Norte y de origen sudamericano. 

El Sr. Donnelly se refiere sólo a la desaparición de la Atlántida, y con ella, su civilización. Sus investigaciones revelan evidencias de una civilización anterior al diluvio, y de la dispersión de los pueblos y de sus artes después de la catástrofe. En realidad, la mayoría de los pueblos existentes en ese entonces, y su civilización, fueron tragadas y sumergidas inmediatamente por esta última inundación del mundo. 

Teorías acerca de la llamada corteza terrestre de cien a ciento cincuenta años atrás revelan que los escritores de ciencia de la Época parecen haber estado divididos en dos grupos principales. Los que pertenecían a la vieja escuela de pensamiento son conocidos como "Cataclismistas" o "catastrofistas". 

Ellos se aferraban a la heredada, y en ese entonces aceptada teoría de que los principales cambios observables en la superficie de la tierra fueron los resultados de un poder de ajuste diferente de lo que hoy se entiende comúnmente como Las Leyes de la Naturaleza. 

En la vista de la nueva escuela de pensamiento, representada por los denominados "uniformitarios," el funcionamiento de las fuerzas naturales, inmutables, explicables podrían ser responsable de todos los cambios en la superficie del globo. Desde entonces, el mundo científico se ha convertido, en sus creencias, en su totalidad, en uniformista, la teoría catastrófica de los cambios geológicos a través de los caprichos de la naturaleza se ha ido abandonando. 

El eslabón perdido, que mantuvo a los cataclismistas y uniformitarios separados, no es más que una aceptación como una verdad científica básica de que el catastrofismo es una parte del funcionamiento natural de las leyes de la naturaleza. 

Hace unos impares cien años, los cataclismos eran reconocidos de haber ocurrido-, como son reconocidos hoy - pero las explicaciones ofrecidas no eran generalmente aceptadas, porque estaban basadas en el llamado capricho de la naturaleza: errático, anormal, caprichoso control por la naturaleza, o el ajuste temperamental además de las leyes de la naturaleza. Hoy en día, los científicos buscan en las leyes de la naturaleza la explicación de todos los fenómenos físicos. 

La diferencia entre cataclismistas, que afirmaron conocer las respuestas, aunque mal, y los fundamentalistas, que todavía estaban buscando una explicación científica a los que podrían estar de acuerdo, se ilustra con la siguiente historia. 

A cataclismistas se les preguntó cómo iba a explicar el fenómeno si viera una barra de acero flotando en el aire. "Bueno", dijo, "si llego a presenciar algo así sabría que esto probaba la suspensión temporal de una de las leyes de la naturaleza." 

Un fundamentalista, cuando se le hizo la misma pregunta, respondió:

"Si viera acero flotando en el aire, sabría que esto probaría la existencia de una ley de la naturaleza de la que yo soy ignorante."

Lo que los cataclismistas explicaron erróneamente, en ese momento, y los uniformitarios dejaron sin explicación, está ahora racionalmente explicado por la teoría básica de un vuelco automático del globo  - una teoría que es estrictamente uniformitaria, estando totalmente de acuerdo con las leyes inmutables de la naturaleza. 

Arqueología 

EN EL sitio de la antigua ciudad de Ur de los caldeos, que se encuentra en la actual Irak a unas ocho millas al oeste del río Éufrates, cerca de su confluencia con el río Tigris, los arqueólogos han revelado capas de materiales que indican que una ciudad tras otra ocupó el área durante un largo período de tiempo. 

Excavando capa tras capa hasta una profundidad de unos quince pies, se han revelado unos ciento treinta y cinco períodos sucesivos de vida urbana, cada período también está determinado por una dinastía diferente. 

Ligeramente debajo de la profundidad de quince pies, los arqueólogos se encontraron con una capa de arcilla, de ocho a diez pies de espesor. Debajo del lecho de arcilla descubrieron diez (un relato dice doce) capas  representando sucesivas dinastías, pero no se encontraron reliquias ni artefactos a ser de un tipo diferente a las que se encuentran por encima de la arcilla. 

Un descubrimiento significativo fue el hecho de que se encontró cerámica pintada debajo del lecho de arcilla, pero no  encima de el, con excepción de  muestras dispersas de cerámica pintada encontradas inmediatamente encima de la arcilla, pero no más arriba. 

Los arqueólogos están de acuerdo en que una inundación debe haber producido el lecho de arcilla. La arcilla está formada por sedimentación en el agua. El sedimento se deriva principalmente de la trituración de rocas sobre rocas bajo presiones y movimientos de hielo glacial. Un lecho de arcilla de tres pies le toma un largo tiempo desarrollarse, la cantidad de tiempo necesaria para su creación puede determinarse contando sus venas o capas, como se explica en la sección titulada "Geología." 

El cobre es un ingrediente de los artículos encontrados en los estratos encima del lecho de arcilla, pero el cobre está ausente en los artefactos por debajo - lo que sugiere una discontinuidad de las dos civilizaciones separadas por el período de tiempo durante el cual se estaba creando el lecho de arcilla. 

Comparando las reliquias y artefactos encontradas en las diferentes capas de tierra con aquellas de otras civilizaciones, podemos estimar el tiempo transcurrido, representado por el relleno total de tierra por encima del lecho de arcilla a tener cerca de 6,000 años.

Un alto grado de civilización, en la culminación de la Época Nº 2 A.P. (Antes del Presente) explicaría la cerámica pintada. Un movimiento de la superficie terrestre, causado por el vuelco  de la tierra, de un clima templado a una latitud fría, su inmersión debajo el mar y toda la desaparición de su pueblo y de su civilización, está indicado para la Época Nº 1 A.P., durante la cual se formó el lecho de arcilla. 

Al comienzo de la Época actual, en el momento de la última gran inundación, la superficie de la tierra se salió a su latitud actual, en donde nuevamente fue habitada por seres humanos, pero estos nuevos pueblos no poseían el arte de la pintura en la cerámica, que caracteriza los artefactos de la raza que había sido destruida por la inundación. 

Ur de los caldeos, probablemente se encuentra en el Golfo Pérsico, a pesar de que ahora está cerca de 115 kilómetros en el interior. El nivel del mar no se ha mantenido constante, como se explica en otro lugar, y el bajo delta del río Éufrates se ha extendido al Golfo. Las claves para ello son el registro encontrado en Ur de un héroe marino, conquistador de la tormenta y el mar, y  artefactos indicando el comercio con lugares distantes, probablemente en parte por mar.

Excavaciones hechas por arqueólogos en Cnosos, Creta, han dado a conocer 43 pies de suelo y luego roca virgen. Las reliquias y artefactos descubiertos indican moradas sucesivas por el hombre, y en comparación con las muestras recogidas en otros lugares, estos objetos representan un período de tiempo de unos 5,300 años. 

El suelo que se desarrolló durante estos años distantes vino de los restos de vegetación y de animales, del polvo transportado por el viento, y de erosiones en los niveles superiores. Las reliquias y artefactos no fueron encontrados en las excavaciones muy profundas cerca de la superficie de la roca, este hecho indica que un período de tiempo transcurrido antes de que la gente se fue a vivir allí y también que la acumulación gradual de los materiales de la tierra se había extendido durante un período de más de 5,300 años. 

El sustrato de roca por debajo de la tierra en Cnosos encaja en el patrón de la teoría de un vuelco del globo. 

Durante la Época Nº 1 A.P., el área de tierra que ahora se conoce como la isla de Creta, estaba ubicada cerca de una latitud correspondiente al presente Círculo Polar Ártico. 

Hoy, situado cerca del extremo oriental del mar Mediterráneo, se encuentra en un clima templado, está cubierto con tierra y vegetación, y las personas han estado viviendo allí durante más de 5,300 años.

Los mamuts 

Fósiles de animales, especialmente mamuts, ofrecen una prueba positiva de que la tierra ha rodado a sus lados hasta su dirección normal de rotación. 

Los mamuts se encuentran ahora en las regiones árticas, enterrados en estado natural en el suelo permanentemente congelado. Su presencia, condición y ubicación documentan una catástrofe gigantesca en la que el clima de una gran área de tierra cambió repentina y drásticamente. Sólo un repentino giro o vuelco  del mundo podría haber causado este cambio. 

Los mamuts siberianos son comúnmente designados por los términos "lanoso" o "Norte". Sus cuerpos y extremidades están cubiertos de largo y grueso pelo asemejando agujas tubulares de plástico de color marrón rojizo. Además, se encontró una capa de pelo corto y fino. Sin embargo, la piel de la cabeza, el tronco y las orejas es suave. Es evidente que, como nuestros elefantes de hoy en día, éstos no eran de clima frío. De hecho, se habrían congelado en el actual clima de invierno de Siberia. 

Los contenidos de alimentos de su estómago y sus dientes, sin embargo, nos proporcionan la evidencia de su origen. 

La literatura sobre los mamuts está llena de referencias a su alimentación de árboles de hoja perenne, ahora la vegetación predominante de las regiones donde se encontraron los cadáveres. Esta referencia al parecer, es el resultado de los escritores asumiendo que los mamuts en realidad vivieron y prosperaron en el clima frío de Siberia. El análisis de los contenidos estomacales de estos canales no confirma esta teoría. 

La evidencia sugiere que los suelos de alimentación que contenían estos animales fue movido rápidamente de un ambiente cálido a un clima frío. Los cadáveres de los rinocerontes, también encontrados en el suelo, ayudan a fundamentar que algunas de las zonas de alimentación eran tropicales, y que el actual clima polar de sus lugares de descanso es muy diferente del clima edénico de la tierra en el que nacero y se criaron. 

El contenido de alimentos de los estómagos de los mamuts también nos da una idea de la hora exacta del día de la tierra se salió. Un estómago lleno indica la repentina muerte de un animal sano, y que la muerte ocurrió después, y no antes, el período de alimentación del día. La comida encontrada en los hocicos y estómagos de monstruos prehistóricos indica que habían estado pastoreando entre los abundantes pastos de clima cálido cuando la muerte repentinamente los alcanzó. 

La sugerencia de un vuelco  repentina del globo se fundamenta además por la condición de los cadáveres. Varios mamuts han sido encontrados en una posición vertical sobre sus patas traseras. Algunos se han encontrado con los huesos rotos. La posición vertical, apoyando la teoría de que se encontraron con una muerte repentina, los huesos rotos indican contusiones violentas justo antes de la muerte. 

Los súper huracanes o vientos extremos causados ​​por el  rápido vuelco   del globo darían cuenta que los grandes animales fueron lanzados sobre y enterrado en los escombros. Las furiosas aguas de una inundación producirían un efecto similar. La condición natural de los mamuts encontrados bajo tierra indicaría que estaban congeladas sólido poco después de haber sido enterrado vivo. 

En 1901, un mamut fue desprendido de la orilla del río Bereskovka en Siberia, a una latitud 66 norte, casi en el círculo polar ártico. Estaba sólidamente congelado en la tundra, pero su cabeza fue expuesta durante un deslizamiento de tierra. Era un animal macho, que se encontraba sentado sobre sus flancos traseros, con los huesos de la pelvis y de la pata delantera derecha rotos. 

En este estado no se podía mover, y mucho menos buscar alimento. 

Sin embargo, había muerto poco después de desayunar. Había una pequeña cantidad de hierba en la lengua que él había estado en el acto de comer. Sus dientes estaban llenos de hierbas a medio masticar; veintisiete libras de hierba fueron retiradas de su estómago, en una ocasión, y más en otra. Este animal está ahora montado  en el Instituto Zoológico de la Academia de Ciencias de Leningrado. 

El contenido del estómago del mamut de Bereskovka consistía principalmente de hierbas de campo, que fueron identificadas, analizadas y fotografiadas. Los nombres de las hierbas fueron dados en ruso y latín, en un artículo por G.N. Kutomanov en el Boletín de la Academia de Ciencias de San Petersburgo, 1914, Vol. 8, N º 6, páginas 377-88. 

Las hierbas son reportadas de manera similar en una detallada descripción de la liberación de la bestia, en el reporte anual de la Academia de Ciencias, 1914, Tomo 13. 

Ese reporte señala que "Contrariamente a la creencia popular, ningún árbol de hoja perenne han sido jamás encontrado en el estómago de un mamut." 

Nueve géneros de gramíneas fueron encontrados y nos ayudaron a establecer las condiciones climáticas en las que vivió el animal. Si los pastos eran hierbas árticas, el mamut debe haber vivido en un clima ártico. Si los pastos eran tropicales, ésto indicaría un clima tropical. Este problema fue presentado al Instituto Smithsonian. 

El Sr. C.V. Morton, curador de la División de Helechos, Departamento de Botánica, recomienda que todas las hierbas ahora se encuentran en climas templados, ninguna en los climas tropicales, y cuatro de las nueve se encuentran tan al norte como el Círculo Polar Ártico. 

Si las hierbas pudieron haber crecido en un clima tropical, y sobrevivido después de haber sido trasladadas a climas templados y fríos, no es comprobable. La presencia de los rinocerontes, sin embargo, indica que el clima era tropical. 

Un reporte sobre un rinoceronte encontrado en la orilla del río Vilui en Siberia afirma: 

"El animal parece haberse ahogado, ya que los vasos sanguíneos de la cabeza fueron encontrados por el profesor Brandt llenos de roja sangre coagulada, como lo que se produce por asfixia por ahogamiento. Probablemente fue sorprendido repentinamente en una inundación de un torrente de agua, de donde no tuvo ninguna oportunidad de escapar.

 

En un momento, que el animal estaba parado en tierra firme, pacíficamente pastando, y al momento siguiente fue abrumado por una rugiente inundación, las tumultuosas olas que acarreaban masas de barro y grava en su curso de barrido, por lo que se ahogó y fue enterrado casi al instante. Entonces, el intenso frío se instaló, el cuerpo se congeló, y el suelo no se descongeló hasta el día en que cayó en la orilla del río".

Tanto los rinocerontes del río Vilui como los mamuts del río Bereskovka evidentemente murieron de asfixia. El contenido estomacal de los mamuts, como es indicado por las muchas fotografías, no contienen agua. La hierba estaba seca. 

Por lo tanto, se razona, la bestia no se ahogó, sino que pereció en el súper huracán y las tormentas de polvo y la suciedad causada por el rápido movimiento de la superficie de la tierra en el aire en esa área en particular. Los mismos vientos, por su fuerza y presión, habrían llenado el aire con árboles, animales, tierra, arena, grava y escombros, en la que los animales fueron enterrados vivos. 

I.P. Tolmachoff afirma respecto al mamut de Bereskovka: 

"La pelvis, una pata delantera derecha y algunas costillas fueron encontradas rotas, así como indicaciones de una fuerte hemorragia y también asfixia en el barro. La muerte por asfixia es evidenciada por la erección del genital masculino, una condición inexplicable de cualquier otra manera . "

(Transacciones American Philosophical Society, N.S. 23, 1929).

Los médicos han corroborado la conclusión de asfixia de la conclusión del señor Tolmachoff; que a su vez, ayuda a establecer el hecho de que estos animales murieron por una  súbita extinción  masiva, y no por muertes lentas y separadas o individualmente. 

Tolmachoff también afirma que ningún mamut ni rinoceronte ha sido encontrado congelado en el hielo. 

Los restos fósiles de otros animales y  peces han sido encontrados con el contenido del estómago sin digerir. Una bestia con un roedor en parte masticado, por ejemplo, fue encontrada en Colombia, América del Sur, en 1945, y ahora está en la Universidad de California, en Berkeley. Esta bestia, clasificada como genus Borhyrna ha sido estimado en millones de años de antigüedad. 

Había sido enterrado en arena fina antes de haber tenido la oportunidad de digerir su desayuno recién ingerido. Cuando la piedra arenisca fue tallada a partir del esqueleto, el roedor fue encontrado descansando donde pertenecían los intestinos de la bestia. 

Las regiones del Ártico, donde se han encontrado mamuts, rinocerontes y otros animales, no tienen vegetación suficiente para soportar un solo mamut y el frío es tan intenso en invierno que ningún mamut podría sobrevivir. Sin embargo, justo antes del último vuelco  del mundo esta región fue poblada con innumerables manadas de animales. 

Vivían allí porque existía suficiente suministro de alimentos y el suministro de alimentos creció debido a que el clima era cálido. Millones de mamuts vivieron en lo que hoy es un refrigerador para sus cuerpos y huesos. 

La abundante vegetación, indicada por el suministro de alimentos, corrobora la otra evidencia de que la latitud donde vivían estos animales era tropical o templada. 

Grandes cantidades de huesos de mamuts, caballos, ganado vacuno, búfalos, camellos, ovejas, ciervos y otros animales que se alimentan de hierba, así como aquellos que se aprovechaban de los comedores de plantas han sido encontrados en la tundra congelada de Siberia. Sus restos se suman a la evidencia positiva de la profusa vegetación necesaria para apoyar estas hordas de animales. El hallazgo de al menos treinta y nueve mamuts en la tundra siberiana ha sido registrado. 

No han sido reportados animales más pequeños y menos espectaculares que los mamuts y rinocerontes, si es que han sido encontrados por cazadores y tramperos. Sin embargo, un gran número de animales más pequeños debió estar expuesto en la superficie a través de deslizamientos de tierra en la tundra, causados ​​por las lluvias de verano que, incapaces de penetrar en las tundras heladas, inundaron extensas áreas de tierra. 

En lo que se refiere a los restos de mamuts, mastodontes, dinosaurios y otros animales prehistóricos siendo encontrados ahora en áreas muy dispersas de la tierra, en muchas latitudes diferentes, y en formaciones de tierra sucesivas, tres hechos se destacan: Primero, el hecho de su destrucción total. Segundo, el hecho de que los últimos miembros de la especie murieron repentinamente mientras gozaban condición de buena salud. Tercero, el hecho de que sus restos muestran que sus habitaciones se extendieron muy dispersas y ahora están en áreas terrestres separadas.

La teoría de los recurrentes vuelcos del globo se ajusta a la evidencia mejor que cualquier otra. La teoría del vuelco explica los cataclismos destruyendo vida animal y vegetal,

La cuestión discutible de un puente de tierra en el estrecho de Bering, entre América del Norte y Asia, al parecer, se resuelve por las grandes cantidades de colmillos de mamut y huesos encontrados en las ahora separadas áreas frígida de la isla de Wrangell, e las islas de Nueva Siberia, Alaska y Siberia, lo que indica que estos animales vagaban libremente sobre una superficie conectada, en un clima cálido, justo antes del último vuelco del globo, los cambios en el clima de la mayor parte del tierra, así como la duración de cada Época entre los diluvios del mundo.



Vida Marina 

También en los mares se ha buscado vida orgánica que ayudaría a corroborar la teoría de un vuelco del globo, y pistas han sido encontradas en las focas y  langostas.

Las focas encontradas en el Mar Caspio y el lago Baikal en Siberia son las mismas focas que habitan en las aguas de Alaska. La evidencia indica que las dos ramas de la familia a la vez estaban juntos, como los mamuts, y se separaron durante el último gran diluvio. La mayoría de los lagos, así como las áreas terrestres del globo fueron temporalmente cubiertas con las aguas de los océanos permitiendo a las focas durante el Diluvio dispersarse en todas direcciones. 

Hay una explicación lógica y evidente para el enigma del por qué la misma variedad de foca ha de ser encontrada en tres de estos lugares muy distantes entre sí. Todas son descendientes de esas focas antepasadas que aún vivían, y podían encontrar un suministro de alimentos, cuando la inundación llegó a su fin. 

Algunos de entre el grupo de antecesores de las focas habían sido varados en tierra, algunos se encontraron en los lagos, mientras que otros todavía estaban en el mar. 

Una langosta de un género peculiar encontrada sólo en las aguas heladas del Ártico y en el PLA profundo del mar Mediterráneo. Encontrar esta langosta en el mar Mediterráneo contribuye a demostrar que el mar estaba cerca del Polo Norte antes del último vuelco de la tierra. En ese tiempo, sus aguas eran heladas y adecuadas a la especie de langosta de agua fría. 

Cuando la tierra volcó, este mar fue trasladado a un clima templado. La langosta de agua fría todavía sigue viviendo en ella, pero sólo en sus aguas más frías y en su más profunda depresión. 
 

Fósiles 

ALREDEDOR de un siglo y medio atrás, Georges Cuvier escribió:

"Es a los fósiles a quienes debemos el descubrimiento de la verdadera teoría de la tierra, sin ellos, no hubiéramos soñado, tal vez, que el planeta fue formado en Épocas sucesivas, y por una serie de diferentes operaciones.

 

Son los únicos que, en definitiva, nos dicen con certeza que el globo no siempre ha tenido la misma envoltura, no podemos resistir la convicción de que deben haber vivido en la superficie de la tierra antes de ser enterrados en las profundidades, y si tuviéramos sólo rocas carentes de fósiles para examinar, nadie podría sostener que la Tierra no se formó de una sola vez ".

Existe, en la actualidad, entre los científicos, un completo acuerdo con Cuvier. 

Las perforaciones a una profundidad de cuatro millas han divulgado las envolturas de la tierra, ahora llamados estratos, y cada uno nos proporciona un registro de la Época en que fue creado. 

Huellas y pistas de animales, reptiles y crustáceos, que fueron hechas muchos miles de años atrás en diversos lodos y arenas húmedas,  han sido descubiertas, y ahora se conservan en los museos, en forma de muestras de roca. Salpicaduras  de gotas de agua en el entonces blando barro cenagoso  han sido descubiertas en numerosos ejemplares de piedra. 

Cuando la evidencia de un clima tropical rodea esculturas congeladas de barro, y el repentino congelamiento sólo puede ser explicado por un supuesto vuelco  de la tierra que trajo el barro hacia un clima diferente. El sistema de solidificación del lodo por congelación, cuando se mueve rápidamente de un clima tropical o templado a un clima frío, claramente explica estos notables fenómenos. 

Las esculturas de barro, habiéndose vuelto como una piedra al congelarse, fueron “puestas” durante uno de los períodos glaciares, por la acumulación de una capa de sedimento. Esto, a su vez, sirvió de molde y conservó las formas de las esculturas después de que los especímenes habían sido volcados nuevamente a climas tropicales o templados y el barro o tundra congelado se descongeló durante la Época siguiente. En estos moldes, el antiguo barro se transformó lentamente en piedra. 

Hay grandes diferencias en las marcas de fósiles en las rocas. Los agudos y delicados cráteres de salpicaduras de gotas de lluvia no podrían haber sido preservados sino por congelación rápida. El barro de salpicaduras congeladas pronto retrocedió y se convirtió en marcas de viruela. Las medusas sepultadas en el barro y las ranas no podrían haber sido preservadas sino por congelación rápida, de otra forma pronto se habrían podrido.

En las orillas de la Bahía de Fundy, grandes zonas de barro rojo y arena seca, depositadas por las mareas de primavera, se pusieron al desnudo y se hornearon en el sol caliente del verano durante diez días durante las mareas muertas, la parte superior del barro consolidándose a una profundidad de varias pulgadas. 

Sir Charles Lyell reporta haber encontrado, en estas superficies de barro, pequeñas cavidades o marcas profundas causadas por las gotas de lluvia, huellas donde las aves habían caminado, y otras pistas. Al partir una losa de muestra del barro endurecido y al reducir su espesor, se encontraron huellas hechas durante varias mareas muertas anteriores sobre las capas inferiores: Cada una compuesta por  aves en diferentes tiempos. 

Esta es una ilustración de uno de los métodos de la naturaleza de la preservación de las marcas de huellas. Incluso hoy en día, impresiones fósiles de diversos tipos son producidas de esta manera, y pueden ser encontradas en muchas localidades diferentes. 

Este método de desecación de producir piedra del barro, y la preservación de marcas huellas, nunca podría ser responsable de delicadas cáscaras como cráteres de salpicaduras gota de agua que fueron conservadas por congelación rápida. 

Las marcas más agudamente delineadas de huellas de seres vivos y huellas de vegetación conservada en piedra se encuentran en las capas superiores de los estratos que corresponden al final de cada Época. Por ejemplo: la profusión de hojas y detalles de helechos sobre las superficies superiores de los depósitos de estiércol vegetal que se han convertido en carbón (como se describe en detalle más adelante), indican que la solidificación por congelación durante los últimos momentos de los miles de años de acumulación de lodo; después de ese momento no más lodo se acumuló en ese lugar. 

Acerca de dónde estaba ubicados éstos depósitos de lodo, un cambio revolucionario ocurrió en la forma en que fueron formados los materiales de la tierra. De esto sabemos que las condiciones necesarias para la formación de esas capas de la tierra cambió repentinamente. Sabemos que una condición para la formación de lodo de vegetales era un clima tropical o templado, y sabemos que su lenta creación consumidora de tiempo de pronto se detuvo. Sabemos que se desintegraría o habría sido consumido por la combustión lenta a menos que de repente hubiera sido cubierta. 

Por lo tanto, buscamos evidencias de un clima polar en los estratos suprayacentes, y con frecuencia encontramos arcillas, esquistos y pizarras, lo que confirma la teoría de un vuelco del globo. 

Una confirmación de la teoría de un vuelco del globo, evidenciado por el tiempo transcurrido entre las sucesivas capas de estratos superiores de la Tierra, proviniendo de las huellas de grandes dinosaurios que fueron examinados por un observador entrenado, en 1940, en el Rancho Davenport en Condado de Bandera, Texas. Él reportó grietas de sol en el limo llenando las huellas; esto indicaba que la superficie había debajo, a pesar de que ahora está por encima del agua. 

El elemento importante en el esa observación es el hecho de que las grietas por el sol estaban en el limo de llenando las impresiones, pero no en los materiales rocosos que contienen las marcas de las huellas. De esto se puede deducir fácilmente que las huellas se habían convertido en una capa dura y luego en roca antes de haberse depositado el relleno de limo que se rajó con el el sol, y que, por lo tanto, la carga de limo representó una Época posterior de tiempo de lo que lo hizo el material de roca que no se agrietó bajo el sol, y no podría haber sido contemporáneo. 

Los dinosaurios cuyos esqueletos se encuentran agrupados en formaciones de roca en el Monumento de los Dinosaurios, Utah, fueron ahogados por el gran diluvio que acabó la Época en la que vivían; ellos se hundieron en el fondo de un lago o de un río y fueron cubiertos con sedimentos que se convirtieron en roca en sucesivas Épocas de tiempo. 

Esas rocas son ahora pequeñas montañas. La agitación elevando fondos de lagos o ríos a elevaciones más altas se produjo durante uno de las Vuelcos posteriores de la tierra con reordenamientos simultáneos de masas de tierra y un gran diluvio. Desde  el Monumento Dinosaurio, un millón de libras de huesos petrificados han sido extraídas para su exhibición en varios museos. 

Tumbas masivas con restos de mamuts también  han sido descubiertas. Geoffrey Bibby, en su libro El testimonio de la Espada, describe un cementerio que contiene más de 900 mamuts, tanto jóvenes como viejos, varios cientos de otros animales de pastoreo, lobos y zorros; está ubicado en Předmostí, en Moravia central, en una cantera del valle de seis a diez pies bajo la superficie de la tierra que cubre la parte superior y el suelo, en un estrato que aún no se ha vuelto a la roca. 

Afirma de algunas opiniones encontradas en cuanto a la probable razón de su existencia. Cita cementerios masivos similares de mamuts como habiendo sido encontrado en la Baja Austria, en Krems, Langmannerdorf y Willendorf, y en otros lugares.

Evzen y Jiri Neustupny, en su libro ‘Checoslovaquia antes de los Eslavos’ (página 26) dice que,

"los huesos de más de un millar de mamuts se han encontrado en Předmostí y las cantidades descubiertas en Dolni Vestonice y Pavlov no son menos impresionantes."  

Los cementerios de mamuts pueden ser considerados como evidencia adicional de los recurrentes cataclismos de la tierra. 

Sus tumbas poco profundas, hacen parecer probable que vivieron en Época Nº 2 A.P., cuando la cuenca de la Bahía de Hudson estaba en el Polo Norte de Giro,  y también parece probable que sus cuerpos absolutamente no recibieron mucha protección contra la desintegración al igual que los mastodontes de Nueva York de la Época Nº 3 A.P. 

Una exposición en el Museo Americano de Historia Natural muestra a un grupo similar de esqueletos de animales prehistóricos, todos amontonados como despojos en un matadero, que se pueden explicar más racionalmente por la avalancha causada por un vuelco  del globo. Esos animales evidentemente llegaron a su muerte por ahogamiento cataclísmico en masa.

Sus cuerpos probablemente se quedaron en un remolino, o  en una obstrucción, o en un profundo agujero en el fondo de las aguas de la inundación transitoria, donde fueron cubiertos por tierra y escombros. La congelación rápida también puede haber retardado su desintegración.

El vuelco del globo, con grandes diluvios concurrentes, es confirmado por tales descubrimientos de esqueletos masivos de animales contemporáneos apilados juntos. Cementerios similares conteniendo esqueletos de peces contemporáneos serán discutidos más adelante. 

Ostras petrificadas, almejas, cangrejos y estrellas de mar se encuentran a profundidades de varios cientos de pies en la excavación del Canal de Panamá. Todos estaban perfectamente conservados, pero se habían convertido en piedra. Algunas de las especies no crecen en los trópicos, indicando que lo que hoy es Panamá en un tiempo estuvo ubicado en una zona templada. 

Muestras fósiles de medusas han sido descubiertas en formaciones rocosas del período Cámbrico, clasificadas entre las rocas más antiguas. Sus estructuras externas, así como algo de las formas interiores de la medusa, fueron encontradas muy bien conservadas. (Geología, por HF Cleland, página 416.) 

La solidificación por congelación, tanto de la arena y las medusas, en el momento del vuelco del globo, es la respuesta científica más simple a este antiguo enigma de cómo una medusa suave posiblemente se convirtió en roca sólida. Lo que ahora es roca fue una vez una arena suave y húmeda que repentinamente fue lanzada de tal forma que la medusa fue virtualmente enterrada en ella. Luego, también repentinamente ambos fueron congelados en una masa sólida mediante congelación rápida 

La preponderancia de los fósiles marinos encontrados hasta el momento, en comparación con las tierras altas fósiles, es debido a las divisiones de los discordantes escombros que cubren las superficies de los antiguos mares. Tales divisiones provocan la exposición de los ejemplares atrapados y conservados, entre los cuales los mejores conservados son aquellos que fueron congelados rápidamente.

Los fósiles de las tierras altas, incrustados en lo que era el suelo en ese tiempo, son más difíciles de detectar. Muchos animales, incluyendo los dinosaurios, son encontrados en roca. Los mamuts están siendo encontrados en la tundra o lodo que se va a transformar en roca, y mastodontes han sido recuperados de la tierra húmeda, muy por debajo de la superficie, que eventualmente se convertirá en piedra. 

Como hemos visto, los huesos de los animales fósiles deben ser asumidos como aquellos animales enterrados rápidamente después de la muerte, ya que los huesos que quedan en la superficie se pudren rápidamente debido a la oxidación y a la acción de ácidos orgánicos siempre que florezca la vegetación. Las antiguas enormes manadas de búfalos en las llanuras americanas no fosilizaron a su muerte. 

El presente enjambre de vida salvaje de la llanura africana no se fosiliza en la muerte. Al morir, los animales se vuelven parte de las sustancias componiendo el suelo.

Pero cuando entierros masivos de animales han ocurrido debido a los vuelcos del globo, los restos se han incrustado en la tierra a través de la cual las aguas cargadas de minerales se han filtrado y han establecido las condiciones para crear fósiles.  

Los árboles y la vegetación 

Los árboles fósiles y otros tipos de vegetación proporcionan evidencia adicional acerca de Épocas pasadas de nuestro planeta.

Árboles verticales y troncos de árboles son encontrados en el mar, troncos frescos yacen bajo tierra, frutas y hojas frescas, congeladas al igual que los mamíferos, son encontradas en Siberia; existen árboles fosilizados y petrificados, no sólo en la superficie de la tierra, sino también en niveles de capas de sus substratos. Y todos estos fenómenos tienen su origen muy racionalmente los últimos vuelcos del globo. 

En la Bahía de Fundy, en Fort Lawrence, Nueva Escocia, los troncos de un bosque sumergido de pinos y hayas están en posición vertical en el suelo en el que una vez que crecieron. Ellos se hacen visibles durante la marea baja. En otras partes de la Bahía de Fundy, también troncos cortos, en descomposición y raíces surgen brevemente y quedan expuestas para ver durante la marea baja. 

Estos troncos y tocones son los restos de árboles que una vez que crecieron en las tierras altas que fueron completamente sumergidos cuando la tierra dio el último vuelco . A medida que el nivel del mar se redujo más tarde (debido a las aguas acumulándose como hielo en la Antártida y en otros lugares) los árboles fueron todos gradualmente expuestos al aire. La oxidación se produjo, y las partes expuestas se pudrieron. 

Los troncos de los árboles de cualquier bosque sumergido, todos terminan abruptamente en la línea de bajamar, ya que cualquier parte de un árbol que sobresalga por encima del agua o barro, si se les da suficiente tiempo, se oxidan por el aire , se pudren, y son arrastrados. Lo que finalmente se queda son los tocones y troncos cortos que están por debajo del nivel más bajo del agua. 

Tres ramas en posición vertical fueron reportadas por Nordenskiold (en El viaje de Vega) de estar en el fondo del mar adyacente a las islas árticas de Nueva Siberia. Nordenskiold también se refiere a ramas de  árboles que se queman con un brillo, sin llama, y que siguen siendo arrojadas cada año en un lago del norte de Siberia, indicando bosques sumergidos, bajo la superficie del lago. 

En muchos lugares, troncos de árboles han sido encontrados bajo tierra. Estos árboles obviamente no crecieron bajo tierra, y en condiciones normales ningún árbol caído termina enterrado. Deben de haber crecido por encima del suelo en alguna Época anterior y luego fueron enterrados por un cataclismo, ya que los árboles muertos en el suelo sólo se pudren y se descomponen.

Ellos se oxidan gradualmente, al igual que las ramas de los árboles en descomposición proyectándose por encima del agua. En tales condiciones habrían desaparecido por completo antes de haber transcurrido cien años. Pero cuando los árboles están enterrados en agua o tierra húmeda, están protegidos de la oxidación, y son capaces de mantenerse frescos durante miles de años.

La presencia de estos árboles subterráneos es una prueba más de un cataclismo que los sepultó bajo tierra y sus escombros fueron transportados por el aire por los huracanes y las aguas de la inundación. 

Árboles frescos ahora pueden ser explotados en muchos lugares, incluyendo los pantanos Dismal de Virginia, el Hackensack, New Jersey, prados, y en la zona del pantano del istmo que conecta Nueva Escocia y Nueva Brunswick. 

En ciertas áreas del norte de Siberia, innumerables troncos llamados por los nativos "madera de Adán", y se dice que en todas las etapas de descomposición están incrustados en la tundra sólidamente congelada. Debido a que una vez fueron árboles en crecimiento, de los tipos que no crecen en ese clima, confirman que un cambio en el clima ha tenido lugar, como el que podría causar un vuelco del globo. 

Podrían haberse roto por un huracán o una inundación. Si es así, mostrarían una clara ruptura en el lado en el que estaba impuesta la fuerza de rotura y fibras desgarradas en el lado de sotavento. Un nuevo examen de la madera, para determinar los géneros y especies de los árboles, nos permitirá establecer el rango de latitud y el clima en el que crecían estos árboles. 

 
Un árbol llamado mamut, con la fruta y las hojas todavía en él, fue descubierto y reportado después un deslizamiento de tierra en la tundra siberiana. Tal almacenamiento en frío de la fruta de 7,000 años de antigüedad sólo puede explicarse por un transporte repentino de la fruta, de un clima cálido en el que creció a un clima frío de almacenamiento en el que ha sido refrigerado. 

Este espécimen de fruta, con hojas, y muchos otros especímenes de hojas reportadas de haber sido encontradas en Siberia también confirman el vuelco del globo. 

El Museo Americano de Historia Natural de Nueva York cuenta con una exposición de frutas y vegetales fósiles postulados como de millones de años de antigüedad; la exposición incluye higos y frutos de palma; hojas de plátano de tamaño completo frescas; higo, palma, sicomoro, pino y hojas de gingko, secoya, piñas y castañas de agua. Los frutos son de tamaño completo y se ven deliciosos, como si recién caídos de los árboles, las hojas también están frescas, no encogidas ni dobladas como las expuestas al sol, sino que sólo aparecen como caídas o puestas en agua. 

Es necesario aplicar la teoría de la "congelación rápida" a estos especímenes, ya que de otro modo se habrían podrido, aplastado, o destruido de otra manera, como la mayoría de otros tipos de vegetación. Los frutos y las hojas "puestas" a "congelación rápida", y luego selladas herméticamente dentro del suelo que se convirtió en roca,  establecieron los pre-requisitos para que tenga lugar el lento proceso de petrificación. 

Nada explica la fosilización de esta vegetación, sin el vuelco  de la tierra. Los higos, por ejemplo, son un producto tropical o semi-tropical. Para ser preservados tenían que ser congelados, y para congelarse deben haber sido trasladados a un clima frío. 

Árboles fósiles se encuentran en todo el mundo. Ejemplos notables de bosques petrificados se encuentran cerca de El Cairo, Egipto, en el nivel del mar, y aquellos  en lo alto de las montañas rocosas en el parque de Yellowstone, cerca de la divisoria continental. 

En este último lugar, hay veintisiete niveles horizontales de antigua vida arbórea, representando a un igual número de Edades de Vida. Todos han sido expuestos al haberse arrancado el lado de la montaña. 

Los árboles fósiles que han quedado expuestos en algunas de las capas de la tierra muestran períodos recurrentes de vida arbórea, los estratos mostrando vida arbórea están a veces separados por estratos de la tierra de donde faltan árboles. 

Donde se producen fósiles de árboles en un estrato, están ausentes en los estratos superiores e inferiores, pero se producen en los próximos estratos adyacentes, lo cual nos da una confirmación autorizada del vuelco de la tierra. El lento ascenso y hundimiento de la superficie terrestre en relación con los niveles del mar, que prevalecen en todo momento, no pueden dar cuenta de este fenómeno. 

Árboles fósiles verticales son encontrados en diferentes niveles en la Bahía de Fundy, Nueva Escocia. Los troncos de los árboles varían en diámetro, de catorce pulgadas a cuatro pies, y de altura seis hasta veinte pies. Los extremos inferiores están en los estratos de carbón o pizarra. Raíces de árboles penetran dos estratos diferentes en algunos lugares. 

Los troncos de los árboles, todos cortados abruptamente en la parte superior, se extienden a través de los diferentes estratos de pizarra, arenisca y arcilla, pero nunca a través de una costura de carbón por encima de ellos. Raíces de árboles habiendo crecido a través de dos estratos adyacentes de tierra confirman la suposición de que crecieron en el suelo y que el suelo se ha convertido en roca. 

Los estratos de carbón y esquistos  desde donde brotaron los árboles son considerados como pertenecientes a un período anterior de  estratos superpuestos por encima los extremos superiores de los troncos verticales. La costura de carbón inmediatamente superior fue un desarrollo aún más tarde. Las camas conteniendo árboles fósiles están por lo general separadas unas de otras por las masas de esquisto y piedra arenisca de muchos pies de espesor. Estas capas representan la evolución de miles de años y Épocas sucesivas de tiempo.

Nada de los árboles originales se conserva a excepción de la corteza, que forma tubos de puro carbón bituminoso y se rellena con arena, arcilla, y otros depósitos que aparecen como sólidos cilindros internos. 

En uno de los árboles examinados por Sir Charles Lyell, nueve capas distintas, o depósitos, se formaron el cilindro interior, mientras que sólo había tres capas de tierra rodeando el árbol. Las formaciones en las que se encuentran las capas escalonadas de troncos fósiles verticales contienen también unas diecinueve vetas de carbón. Se extienden de dos a tres millas de longitud a lo largo de la costa, y no son interrumpidas por fallas. 

La mejor vista de estos antiguos troncos de los árboles puede ser tenida en Joggins, donde están los acantilados son de 150 a 200 pies de altura, formando la costa sureste de la entrada de la Bahía de Fundy, llamado Chignecto Bay. Los árboles fósiles están todos en ángulo recto a los planos de estratificación, que están inclinados en un ángulo de 24 grados respecto a los del suroeste. 

Las líneas de incursión de estos planos, junto con la longitud de la formación levantada, como se muestra en los datos de la perforación Spur Ranch (véase la página 73), indican que los árboles fueron una vez enterrados aproximadamente 2 a 2'2 'millas debajo de la superficie, y que son entre cinco y diez millones de años de antigüedad. 

La circunstancia de que todos los árboles se han cortado abruptamente en la parte superior indica que una vez estuvieron bajo el agua como bosques sumergidos, en cuyo momento la corteza se carbonizó como está ocurriendo hoy los tocones de árboles verticales en la Bahía de Fundy. 

Las capas escalonadas de árboles fósiles son una confirmación visual de que la tierra se ha volcado  repetidamente. Cada capa fue desarrollada durante una Época diferente. Cada Época terminó con un cambio de la verdadera latitud para el área de la tierra ahora conocida como Nueva Escocia. 

Similares niveles de capas de árboles fósiles se encuentran en las regiones árticas. El congelado bosque de "Wood Hill" en las islas de Nueva Siberia, bien dentro del Círculo Polar Ártico es descrito por Nordenskiold como siendo de 200 pies de altura y consistiendo en gruesas y horizontales capas de arenisca  alternadas con capas de fisionados tallos de árboles bituminosos, amontonados unos sobre otros en la parte superior de la colina, con troncos verticales incrustados en la piedra arenisca de los estratos superiores. 

Esta divulgación científica, el análisis muestra que las ramas del árbol bituminoso, que ahora están en forma fosilizada de carbón, fueron crecimientos sucesivos de edades más tempranas. Las gruesas capas de arenisca corresponden a las arenas creadas durante las Épocas intermedias de tiempo, o arena dejada por uno de los grandes diluvios sucesivos de la tierra. 

El hecho de que estos árboles fósiles estén extendidos en la ladera de una colina, indica que la colina es un remanente de tierra que quedó después de que las áreas terrestres circundantes fueron arrancadas por la inundación o por un glaciar. 

Las ramas de los árbol verticales en los estratos superiores son los restos de los árboles que crecían en el momento del último cataclismo del mundo, y se puede predecir con confianza que, al reexaminarlos, los troncos de los árboles que sobresalientes resultarán ser crecimientos de un clima templado o tropical.

Campos superpuestos de carbón, separados por un considerable espesor de roca, se describen en "flora fósil de Coalfields Sydney, Nueva Escocia", por W.A. Bell (en Memoir 215, Servicio Geológico de Canadá). El texto y las ilustraciones describen cientos de especímenes de fósiles de hojas, helechos, cortezas de árboles y madera. Muchos de los horizontes sucesivos contienen fósiles duplicados, pero en cada horizonte  se producen diferencias en las especies, con los más antiguos (más abajo) difiriendo más de los últimos. 

Es natural suponer que los fósiles de hojas y cortezas de árboles provienen de árboles que También se han fosilizado. Capas de árboles fósiles en posición vertical, como los de los acantilados de Joggins en el lado opuesto de Nueva Escocia, no se encuentran nunca en las capas de carbón, y por lo tanto se supone que permanecerían sin descubrir en las derivas de las minas de carbón de Sydney, a las que el señor Bell limita su reporte. 

Sus muestras fueron en su mayoría tomadas de los techos de las minas de carbón que se extienden a tres millas de la costa bajo el mar. Árboles fósiles se exponen en la superposición en los acantilados adyacentes, como en Joggins. 

Troncos fósiles verticales similares se han encontrado en otros lugares. Por ejemplo, en el St. Helen, Lancashire, Inglaterra, que se producen en arcilla limosa debajo de una capa de unos siete pies de tierra vegetal de color marrón. El estrato que contiene los árboles es reportado de ser de veintiún pies de grosor, inclinados veintitrés grados hacia el sureste al este, y descansa en piedra arenisca blanca. Los troncos de los árboles comienzan a un nivel alrededor de 8 pies por encima del estrato de arenisca blanca y se extienden hasta unos nueve pies. 

Estos árboles crecieron en una Época anterior, pero no crecen en Inglaterra. La capa superior del suelo, por encima del árbol de estrato portador, es todo lo que se desarrolló en el área de tierra ahora conocida como Inglaterra. 

En todos los casos discutidos es obvio que los árboles crecieron a su tamaño presente sobre la superficie de la tierra, y que repentinamente fueron enterrados en agua, barro, o tierra húmeda, y después de fosilización, fueron devueltos a la superficie de la tierra cuando los estratos que cubren de materiales fueron arrancados por los glaciares o arrastrados durante las grandes diluvios. 

Una vez más, la teoría del vuelco del mundo explica toda la evidencia que hemos revisado aquí. 
 

Las caídas del río Niágara se han trasladado corriente arriba de lo que hoy es Lewiston, en el lago Ontario, y han creado una garganta que ahora es de cerca de siete millas de largo. 

Datos registrados por el Servicio Geológico de Estados Unidos desde 1842 en relación con la velocidad de retirada del documento de la catarata del río Niágara documenta que las cataratas enteras se están arrastrando corriente arriba a una tasa anual promedio de alrededor de 2, 2' pies por año. La sección canadiense de las cataratas se arrastra alrededor de 4, 2' pies por año. 

El precipicio de las cataratas es ahora mucho más largo en sus repisas que la anchura de la garganta, que se ha cortado. El flujo de agua a través de los salientes es ahora mucho más superficial, con la consiguiente disminución de las presiones que existían, por ejemplo, hace 3,000 años, cuando las cataratas se encontraba en la quebrada.

Como resultado, la tasa de la erosión y la socavación de la catarata, y por lo tanto la velocidad de su retiro, es menor ahora que durante la existencia temprana de la garganta. La velocidad progresiva durante la creación de la quebrada fue comparable a la velocidad de retirada de las Cataratas de Canadá, donde el peso, la velocidad y la presión del agua que fluye es más concentrada que el promedio de las cataratas enteras. 

En 1891 los miembros de la Comisión de la Reserva del Estado en las Cataratas del Niágara empleó as Robert S. Woodward para estimar el tiempo necesario para la creación de la garganta del río Niágara. Un hombre de incuestionable integridad y competencia superior, que más tarde sería presidente del Carnegie Institution de Washington, D.C., informó que menos de 8,000 habían sido requeridos para cortar la garganta del río Niágara. 

Asumiendo una velocidad progresiva del 4% pies por año, un cuarto de pie por año más rápido que el movimiento aguas arriba de las cataratas canadienses, para tener en cuenta las aguas adicionales que ahora van por las cataratas estadounidenses American Falls, obtenemos 7,800 años de vida útil aproximada de la garganta del Niágara. Esta cifra, sin embargo, está sujeta a correcciones. 

Cuando en Lewiston las caídas fueron de aproximadamente 280 pies más arriba de lo que están ahora, y esto indica que la edad estimada del río Niágara es de aproximadamente 7,000 años. 

Una disminución de doce pies en la altura perpendicular de las cataratas por cada milla que retrocedió hacia el sur, es señalada en un estudio realizado por el geólogo del estado de Nueva York, James Hall, registrada por Sir Charles Lyell. 

Hall afirma que la caída hacia el sur de los estratos de roca de Lewiston a las cataratas es de unos 25 pies por milla, con el cauce del río inclinado en dirección opuesta, a una velocidad de 15 pies por kilómetro. 

Como resultado de este cambio en la altura de las Cataratas, las tasas de velocidad de erosión y reducción de la retirada aguas arriba de las cataratas han sido variables y no es constante. Ha dependido de la altura de las cataratas y de la naturaleza de las rocas siendo cortadas. 

Suponiendo que el volumen anual promedio  aproximado constante, la fuerza creada por el agua que cae perpendicularmente es determinada por la altura de la caída. La energía cinética creada por la caída aumenta con el cuadrado de la velocidad de caída. 

La velocidad de la caída a su vez, aumenta con la altura, a través de la aceleración de la gravedad, aproximadamente a 32 pies por segundo por cada segundo consecutivo de su caída. Los restos y la erosión de las capas inferiores del precipicio se llevan a cabo a un ritmo más rápido con una caída superior.

Este desgaste y erosión se vuelve mayor que la erosión en las repisas sobre las que caen  las aguas. Secciones de los acantilados dan paso y caen al fondo. Es evidente que la fuga aguas arriba de las cataratas era más rápida cuando las Cataratas eran más altas.

El nacimiento del río Niágara y el registro de la corta duración de su ciclo vital en nuestra Época actual son la prueba de un vuelco reciente del globo y un cataclismo mundial. Durante la Época anterior existía la cuenca de los Grandes Lagos, en una latitud tropical y se drenaba en el océano, pero no se drenaba a través del río Niágara como lo hace ahora. 

El río Niágara como lo conocemos hoy en día no existía entonces. Nació, en su forma actual, con el nacimiento de nuestra Época. 

Conchas marinas y corales incrustados indican formaciones marinas en los diez estratos distintos de las rocas, desde el lago Erie al lago Ontario, a través del cual fluye el río Niágara. Antiguas líneas de playa, crestas y terrazas son encontradas en niveles sucesivos. En diferentes niveles, las rocas también han sido suavizadas, pulidas, y surcadas por el hielo. 

Las hendiduras de las rocas son evidencias que nos cuentan que estuvieron alguna vez en la superficie, y que se encuentran en las regiones polares, donde apoyaban a los glaciares en movimiento cuando la superficie terrestre sufría glaciaciones sucesivas. 

Un registro más cuidadoso de esta formación y uno de los primeros fue hecho por Sir Charles Lyell, y se registra en su libro Viajes por América del Norte en 1841-1842. Estos fenómenos geológicos requieren, para una explicación racional, un vuelco del globo con concomitantes cataclismos mundiales. Otros descubrimientos de Lyell en las Cataratas también parecen requerir cambios en la figura del Eje de la tierra como explicación. 

Él descubrió que los acantilados al noroeste del remolino no consisten de la formación normal de roca regional, sino que están compuestos arena, grava, barro y rocas, a la deriva cementados en un conglomerado de carbonato de cal. Como se trata de una capa superficial ahora, consolidada por la cal, parece indicar que había sido un fondo del océano durante un largo período de tiempo, en una Época anterior. 

Este conglomerado llena un antiguo cauce del río, que ahora se conoce como Valle de St. Davis, que se extiende al noroeste desde el remolino por cerca de tres kilómetros, y su desembocadura es de aproximadamente unas dos millas de ancho. La sección norte actual del río Niágara,  fluyendo un poco al noreste del remolino, es, al parecer un movimiento de corte, establecido en nuestra Época actual. 

El conglomerado llenando el Valle de St. Davis no podía haberse depositado durante el cataclismo que acabó con la Época justo antes del comienzo de nuestra Época, en la última inundación del mundo, debido al tiempo requerido para su cementación.

No podría haberse encementado a menos que se le hubiera permitido permanecer durante un largo periodo de tiempo, atacado por las actuales turbulentas aguas de la remolino. Parece, por tanto, ser una formación como resultado de un cataclismo que puso fin a una de las Épocas anteriores. 

 Las rocas que contienen son evidencia de que fue objeto de una edad de hielo, debajo de una capa de hielo. 

Los geólogos también han informado de importantes descubrimientos de dos recientes lechos de los ríos a niveles más altos que el actual río Niágara. Una terraza del río es de doce pies y la otra 24 pies sobre el nivel actual, lo que sugiere que la Isla de Cabra, entre las cataratas americanas y canadienses, estuvo una vez bajo el agua, con las mismas conchas de agua dulce que se encuentran allí como en las terrazas fluviales superiores. Ambas terrazas superiores se extienden al remolino. 

Ellos parecen confirmar sucesivos cataclismos mundiales. 

El río Missisipi como el río Niágara ofrece un cuento de escala de tiempo geológica mostrándonos cuánto tiempo la superficie de la tierra se ha mantenido esencialmente como está actualmente. 

El retiro de aguas arriba de las cataratas de San Antonio, en el río en Minneapolis, Minnesota, ha provocado la formación de una garganta entre siete y ocho kilómetros de largo y alrededor de un cuarto de milla de ancho. Esta garganta ofrece un punto de corte a partir del amplio valle del antiguo cauce que el río Missisipi utilizó durante las Épocas anteriores de tiempo. 

Gracias a la información sobre la ubicación de estas caídas proporcionadas por los primeros exploradores - primero Hennepin y más tarde Carver sabemos que las cataratas han retrocedido, hasta 1856, a una tasa estimada de unos cinco pies por año, y que por lo tanto, aproximadamente 8,000 años han transcurrido desde el momento en el que comenzaron las cataratas, en Fort Snelling, hasta el tiempo en que llegaron a su actual ubicación geológica, en el extremo norte de la garganta cortada por las cataratas. 

Un factor de corrección del 10% al 15% debe ser aquí también aplicado al interpretar correctamente esta escala de tiempo, por lo que llegamos a unos 7,000 años en el tiempo de vida de la garganta de las cataratas del St. Anthony. En consecuencia, las cataratas de San Antonio y las Cataratas del Niágara, nos dan ambas una escala temporal de unos 7,000 años para la duración de nuestra Época actual de tiempo. 

Las cataratas de San Antonio, cuando estaban ubicadas en Fort Snelling, estaban a 110 pies  encima del grado actual del río en ese punto. Ahora, las caídas son de cerca de 40 pies de altura. A partir de estos hechos, es lógico suponer que hubo una mayor cantidad de subvaloración del precipicio de las cataratas cuando eran más altas y que las aguas se posaron en las rocas de base con mucha mayor fuerza.

Por consiguiente, hubo un arrastramiento correspondientemente más rápido río arriba durante la juventud de las cataratas que durante su vejez. (Los perfiles probables de las caídas en varias ocasiones en el pasado, con el plan y elevaciones, se muestran en la Encuesta Geológica, Folio 201, Minneapolis St. Paul, MiN) 
La evidencia geológica revela que existían canales por el lecho del río Missisipi en antiguas Épocas de tiempo. Un canal ahora enterrado comienza en el río Minnesota a unas cuatro millas al oeste de Fort Snelling, circula y se une al cauce actual del río, donde la ruptura a través del presente corte se produce justo encima de las cataratas de San Antonio. También en este caso la cama o valle del río se ensancha y se erosiona. 

El río Minnesota ocupa un canal de gran tamaño y erosionado, que continúa más allá de su origen, cruzando la divisoria continental, y continúa con el cauce del río Rojo del Norte, que ahora fluye en el dirección opuesta. 

Estas características geológicas muestran que un cambio de elevación de la tierra se produjo en esta zona hace unos 7,000 años. Los antiguos canales fluviales estaban cortados en Épocas anteriores. La estrecha garganta o corte  fue creada durante la Época actual. 

El delta del río Missisipi contiene un registro de la edad del río. El número de pies cúbicos de sedimentos, y el número de millones de toneladas de materiales de tierra siendo acarreados hacia el sur por las aguas del río y depositados en el Golfo de México, han sido determinados con bastante exactitud. 

Basados en estos datos y las dimensiones del delta del río, un cálculo aproximado de la edad del delta se puede hacer, lo que también nos dará la edad del cauce actual del río. Sin embargo, las estimaciones de la edad del río ya realizadas por aquellos cuyas opiniones son más respetadas varían de 4,000 años a 138,393 años (Boletín Geológico º 8, del Departamento de Conservación de Louisiana). 

Esta amplia variación en la opinión de los expertos se debe a la total falta de acuerdo en cuanto a cuál de los muchos substratos del lecho del río deben ser considerados como pertenecientes al delta. 

La cabeza del delta ha sido encontrada, por diferentes individuos y grupos, de estar en varios lugares, incluyendo Keokuk, St. Louis, Cape Girardeau, Comercio, la desembocadura del río Rojo, y Baton Rouge. Cada uno de esos lugares es probablemente una ubicación correcta de una de las antiguas cabezas  del delta, pues ha habido muchas.

La aceptación general de la nueva teoría de un globo recurrentemente volcando dará lugar a la resolución de todas las diferencias de opinión en cuanto a la ubicación de la antigua  cabeza de desembocadura del actual río Missisipi. Cada vez que la tierra da un vuelco, una nueva cabeza del delta se estableció, porque la cuenca existía tan atrás en el tiempo geológico como podemos llegar.  

Durante Época Nº 1 A.P., antes del último vuelco  del globo, el Río Missisipi fluía de oeste a este en un clima tropical. La cuenca del Sudán, ahora en África, estaba entonces en el Polo Norte. En Época Nº 2 A.P. el río fluía hacia el sur, por lo general, en un clima frío. La superficie de tierra de la cuenca de la Bahía de Hudson estaba en el Polo Norte y en el verano, los glaciares alimentaban la parte superior del río. 

Núcleos de perforaciones han sido tomados en abundancia por la Comisión del Río Missisipi para establecer las áreas aproximadas y las profundidades de las capas aluviales sucesivas y determinar los distintos canales del antiguo río en Épocas pasadas. Las variaciones en el carácter de los rellenos y el estudio de las diatomeas, algas, foraminíferos, y otras evidencias fósiles divulgarán los cambios del clima. 

Restos de vegetación tropical y vida acuática debe marcar la siguiente capa delta debajo de los estratos superficiales. Más abajo deben haber evidencias del flujo de los glaciares que se funden en la cabecera del río en el comienzo mismo de la Época Nº 1 A.P.  Debajo de esto, las evidencias deben revelar un río de agua fría cuya cabecera norte fue alimentada por los glaciares de la Cuenca del Polo Norte Bahía de Hudson durante Época Nº 2 A.P. 

Para determinar la edad del cauce actual del río es necesario identificar el área y el volumen del actual delta superior y dividir el peso de su contenido cúbico entre el peso de los depósitos promedio anual de sedimentos. 

En la siguiente tabla resultó un esfuerzo preliminar para unir Épocas y estratos que están ahora generalmente reconocidos.

El Gran Lago Salado es un remanente de la reducción de un mucho más grande lago conocido como lago Bonneville, que en tiempos prehistóricos llenó la cuenca de  toda la tierra presente. 

El nivel de la orilla de Bonneville, cortado por ondas por el antiguo lago, muestra que una vez cubrió un área de cerca de 20,000 kilómetros cuadrados, con una profundidad de 1,050 pies. (Boletín de la Universidad de Utah. Vol. 30, octubre de 1939, N º 4). El área de la laguna existente es cerca de 2,000 kilómetros cuadrados, que es aproximadamente el tamaño de la superficie del estado de Delaware. 

Pruebas de los recurrentes vuelcos del globo se han desarrollado a partir de la propuesta original que los continentes de Norte y Sur América se extendían a lo largo de la línea ecuatorial, en conjunto, durante la Época de tiempo justo antes de la Época en la que estamos viviendo ahora. Esta teoría recibe la confirmación de las antiguas líneas de costa, playas y terrazas cortadas por las olas en las rocas ahora muy por encima de la superficie del Gran Lago Salado. 

Cuando la actual cuenca del lago se encontraba ubicada en una zona ecuatorial, recibió una lluvia tan grande como ahora prevalece a lo largo del río Amazonas. Estas lluvias torrenciales pueden considerarse suficientes para llenar la cuenca del lago hasta el nivel de línea de costa Bonneville, ya que los niveles del lago son mantenidas en equilibrio entre la precipitación en la cuenca y la tasa de evaporación, o donde hay una salida de rebosamiento por su elevación. 

Descripciones del sondeos de suelo confirman la ubicación de la cuenca del lago tropical en Época Nº 1 A.P., así como sus sucesivas posiciones en las latitudes tropicales y no tropicales. Excelentes ilustraciones de las diferentes líneas prehistóricas de la costa y otras características aparecen en el reporte completo en el lago Bonneville por G.K. Gilbert en la Monografía Nº 1 en el Geological Survey estadounidense en 1890. 

Edades de Hielo 

Louis Acnssiz, en torno a 1845, utilizó por primera vez la frase  edad de hielo para dar en cuenta las marcas de origen glaciar en las rocas.

Desde entonces, muchas personas han asumido, erróneamente, que las marcas glaciales indican un cambio en el clima en todo el mundo. El término Edad de Hielo ahora se utiliza para definir un área relativamente pequeña, aproximadamente dentro de un círculo, como la zona que ahora figura dentro del Círculo Polar Antártico.

Ahora estamos viviendo con lo que podría llamarse "La Era de Hielo Antártica". Una menor edad de hielo incluye las zonas de Groenlandia, América del Norte y Asia que se encuentran dentro del Círculo Polar Ártico. 

Las glaciaciones se produjeron en todos los continentes del mundo, según lo indicado por las marcas de pulido en sucesivas capas de rocas. Estas rocas ranuradas siempre irradian desde los puntos centrales que indican la ubicación del Polo Norte o el Polo Sur de la Época de tiempo determinado. Las zonas polares circundantes nunca recibieron suficiente calor del sol para derretir el hielo que se acumula desde la nevada constante.

Durante cada sucesiva Edad de Hielo polar, el resto del mundo disfrutó de climas tropicales o templados, como en la actualidad. Lo sabemos porque los fósiles de animales y plantas indican los climas en los que existía cada sección de los sucesivos estratos de la tierra y nos dicen claramente que el mundo ha girado en varios Ejes de Figura sucesivos. 

Cinco glaciaciones sucesivas han dejado sus cicatrices en áreas terrestres de Canadá y el noreste de Estados Unidos. Marcas glaciales en las rocas, piedras sueltas y escombros, son evidentes en la mayor parte de esta zona. 

Edades de Vida se han producido en estas mismas áreas terrestres entre las edades de hielo. Estas Edades de Vida eran largos intervalos de tiempo durante los cuales estas regiones estaban libres de glaciares, y fueron más cálidas que las actuales. Cada edad de hielo borró la Edad de Vida de un área determinada y, a su vez, le sucedió otra Edad Vida en la misma región. Éstos cambios fueron repentinos y sin gradación. 

El nacimiento repentino de cada edad de hielo era paralizante y destructivo para la vida animal y vegetal. Cada edad de hielo produce una capa de hielo que crece hasta la madurez y por su gran peso deprime y abolla la tierra abajo. 

Las capas de hielo arrancadas y llevadas encima, debajo y dentro de sus cuerpos mueven lentamente enormes secciones de roca y tierra para ser depositado en otro lugar, mientras que, bajo el hielo, la tierra fue socavada, tierra y rocas fueron esparcidas por todas partes, y los valles y lechos de los ríos estaban llenos de escombros.

El final de las capas de hielo no llegó a través de una lenta retirada. Cuando se fueron, desaparecieron tan rápidamente al derretirse las enormes masas de hielo cuando fueron trasladas a un clima tropical. 

Evidencias de la Edad de Vida se encuentran por debajo y por encima de las sucesivas corrientes superpuestas de escombros y glaciares que  han sido trazados cuidadosamente por el Análisis Geológico Estadounidense. Durante cada Edad de Vida, animales y plantas vivieron y se multiplicaron,  bosques florecieron, se desarrollaron pantanos, arroyos y los ríos fluían, llenando los valles, mientras que las montañas y las rocas erosionaban. 

Los restos fósiles de vida animal y vegetal están ausentes de los estratos y  desechos que representan las cinco Edades de Hielo produciéndose entre las Edades de Vida. En ausencia también de estos estratos están las marcas de la erosión de suelo y roca, así como las evidencias habituales del trabajo normal de los ríos y arroyos llenando los valles con sedimentos transportados. Las aguas se habían cambiado de hielo sólido. Escombros glaciales es la única prueba restante. 

Hoy, esas áreas terrestres se encuentran en una parte del mundo que está lamiendo una Edad de Vida, mientras que las áreas terrestres de la Antártida y Groenlandia están pasando a través de una edad de hielo temporal. Canadá y el noreste de Estados Unidos se encuentran ahora en una segunda Edad sucesiva de Vida, ya que una vez fueron cubiertos por una capa de hielo, o formaban una helada tundra adyacente a la misma. 

En el área ahora conocida como Estado de Nueva York, han sido descubiertos varios mastodontes enteros, así como partes de más de doscientos mastodontes y de unos quince mamuts. Al igual que los mamuts encontrados en Siberia y Alaska, todos los mastodontes estaban perfectamente preservados después de su muerte por congelación y el almacenamiento instantáneo en frío durante la primera Edad de Hielo. 

También como en el caso de los mamuts, han sido encontrados con los estómagos llenos, indicando la muerte repentina  un animal sano. 

Éstos mastodontes vivían en un clima cálido, en Época Nº 3 A.P., pereciendo al final de este período, y fueron enterrados en una inundación o por los escombros del huracán que congeló todo. Durante la Época Nº 2 A.P. fueron enterrados en cámaras frigoríficas, siendo en ese entonces el área del Estado de Nueva York una tundra congelada, y el área de la Bahía de Hudson estando en el Polo Norte. 

Posteriormente, el Polo Norte estaba en el área de la Cuenca del Sudán (durante la tras Época, Nº 1 A.P.), y el área del estado de Nueva York con sus mastodontes enterrados se trasladó a zonas tropicales. Tanto el suelo como los animales muertos se descongelaron inmediatamente, pero la tierra que preservó estos ejemplares particulares debe haber sido tan húmeda que retrasó la oxidación. 

Ahora están en un clima templado, en una segunda Edad de Vida para esta área de la tierra, y son frecuentemente encontrados en un estado colapsado y de desintegración. 

Hay mucha evidencia geológica que muestra que la última glaciación del continente de América del Norte fue causada por una gran capa de hielo centrada en Canadá que se extendía hacia el sur hasta la actual ciudad de Nueva York. Morenas eskers, camas de arcilla, y otras pruebas residuales del glaciar existen en muchos lugares, incluyendo el norte de Nueva Jersey y el sur de Nueva York. 

Una mella poco profunda en la tierra, con un promedio de 420 pies bajo el nivel del mar, ahora conocida como la bahía de Hudson, marca el centro aproximado de la capa de hielo, mientras las alturas de tierra conocidas como el Escudo Laurenciano, y que prácticamente rodea la bahía de Hudson, marca los bordes finales o los labios del principal tazón de hielo. 

La cuenca de agua de la Bahía de Hudson corresponde al tipo de cicatriz o mella en la superficie de la tierra, que una capa de hielo podría hacer, y que dejaría atrás como prueba de su existencia. Cuentas de las  capas en lechos de arcilla en New London, Wisconsin, y Hackensack, N.J., indican que la Edad de Hielo de la Bahía duró unos 7,000 años! 

La distancia de la Figura del Polo Norte de la Época, en la bahía de Hudson hasta Long Island es de aproximadamente 1,800 millas. Analíticamente, esto se compara con la distancia desde el presente polo sur de la figura del océano, siendo cerca de 1,800 millas para la mayor parte del perímetro del continente antártico. En el Mar de Ross la distancia es de aproximadamente 600 millas. 

Los flujos de hielo glacial, durante la Edad de Hielo de la Bahía de Hudson, estaban distribuidos de la misma manera que las presentes compensaciones de flujo de hielo glacial en la Antártida. 

El hielo fluyó hasta que se alcanzó el océano, que fluyendo más rápido en dirección del estrecho de Hudson y el estrecho de Davis que hacia Long Island, Nueva York, porque el océano estaba más cerca en esa dirección, y el grado era fue correspondientemente más pronunciado; acumuló mayores volúmenes de hielo donde el flujo fue más retrasado. 

En la región sur, las ranuras de las rocas muestran que el hielo fluía hacia el sur, pero en las regiones del norte, las marcas muestran que el hielo fluía hacia el norte. Estrías glaciares causadas por los movimientos de esta última capa de hielo de América del Norte, junto con rocas desplazadas, se encuentras como evidencia hasta el sur de Pensilvania, Ohio y el valle del Missisipi, y tan al norte como el Territorio del Noroeste de Canadá. 

El hecho sobresaliente es que el hielo  irradiaba desde un centro en el área ahora conocida como la Cuenca de la Bahía de Hudson. No se extendió hacia el sur de la actual área del Polo Norte. El hielo fluía lejos de un punto central, lo que demuestra claramente que la cuenca de la Bahía de Hudson se encontraba entonces en el Eje de Giro del polo norte del, y que el hielo fluía en todas direcciones desde el polo. 

En la Antártida hoy los mismos tipos de estrías están siendo creadas en las rocas y cantos rodados, que son continuamente acarreados hacia el mar (desde el Polo Sur) en el hielo glacial que fluye hacia el norte. 

Hace más de cien años, Louis Agassiz descubrió marcas de glaciares en el valle del Amazonas, a lo largo del Ecuador. A ambos lados de la línea del Ecuador dentro de 18 y 20 grados se han encontrado marcas de origen glaciar en las rocas del Pérmico. 

En otras regiones del mundo, las muestras de los árboles con anillos anuales han sido encontrados en las formaciones rocosas de la misma edad, indicando que las condiciones de la zona templada prevalecieron en las regiones donde los árboles crecían, al mismo tiempo que los glaciares de la región polar recorrieron y estriaron las rocas que en ese momento estaban situadas cerca de los polos, pero ahoran está cerca de la línea ecuatorial. 

Las Edades de Hielo están registradas en las rocas en las latitudes y longitudes aleatorias para todos los períodos de la historia geológica. Por ejemplo, en todos los continentes, horizontes glaciales son encontrados en rocas clasificadas en los libros de texto geológicos como Pre Cámbrico y Pérmico. 

Tres de los lugares Pre Cámbricos se encuentran en África, tres en Asia y dos en Australia. Cinco de los horizontes glaciales del Pérmico se encuentran en América del Sur. Cinco de las últimas edades de hielo se registran en las rocas de Canadá y Estados Unidos. 

En todos los casos en que los registros pueden ser estudiados, se ha encontrado que las estrías muestran las radiaciones de las estriadas masas de hielo recorriendo desde los puntos centrales. Esto da evidencia adecuada en apoyo de la teoría de que las áreas glaciares estaban en los polos de la tierra en la Época de tiempo durante el cual se desarrolló cada capa de hielo.

Se alejaron de los polos cuando llegaron a la madurez y causaron que el mundo diera un vuelco. 
 

Afloramientos geológicos 

La edad de diferentes estratos de tierra se determina mediante el estudio de los fósiles que se encuentran en ellos, y en general los estratos más bajos corresponden a las Épocas anteriores de la historia de la Tierra, pero no siempre.

Afloramientos de rocas muy antiguas aparecen en muchos lugares de la superficie de la tierra en lugar de ser enterrados profundamente en sus entrañas. El "Old Red", por ejemplo, una arenisca muy dura y resistente, que se clasifica como perteneciente al Período Cámbrico Inferior, se encuentra como afloramientos superficiales en el estado de Nueva York, en Virginia Occidental y el Canadá. Normalmente debe estar enterrado a una profundidad a tres millas o más, de acuerdo con las tablas de la geología. 

Estos hechos indican que la lenta construcción de la tierra, Época por Época, capa por capa, a través de las edades del tiempo, no ha sido un proceso ininterrumpido. 

Un poderoso cataclismo ha quitado todos los estratos de roca superpuestas y los materiales de tierra por encima de la dura piedra arenisca roja en las zonas donde la piedra aparece ahora como un saliente, pero esa misma fuerza cataclísmica no estaba en libertad en esas otras áreas donde los materiales supra-yacentes están todavía intactos. 

 La especulación y el desgarro de distancia de los estratos de tierra a una profundidad muy grande en algunas zonas han sido causados ​​por tales materiales que entran en contacto, a altas velocidades, con las masas de las aguas oceánicas producidas en serie en una inundación remolino durante los vuelco  del globo. 

Esta fuerza operativa de la Naturaleza es la razón lógica del por qué se están encontrando las piedras areniscas "Old Red" como afloramientos en la superficie de la tierra, la Isostasia representa que la tierra nuevamente será redondeada a raíz de las nuevas disposiciones de las masas de la tierra de la tierra y el mar. 

De acuerdo con las autoridades antiguas, la energía de transporte de agua es igual a la 6^ª potencia de su velocidad. Se da como 3.2 en el cuarto poder (3,24) por P.G. Worcester en su reciente libro de texto en geomorfología. Afirma que cuando el  la presa de St. Francis en California falló en 1928, los bloques de hormigón con un peso de 10,000 toneladas fueron llevadas a más de la mitad de una milla hacia el valle. 

Durante los cataclismos transitorios causados ​​por las masas de tierra volcando contra las aguas del océano, las presiones creadas a velocidades máximas de vuelco  son más allá de la imaginación del hombre. La vegetación es aplastada a golpes y los animales son borrados de la faz de la tierra. 

Los antiguos materiales de la  tierra que una vez cubrieron la piedra arenisca "Old Red", en capas sucesivas, y que fueron arrancados, soltados y arrastrados por uno de los grandes diluvios, están ahora superpuestos en algún lugar en más recientes estratos de la tierra, y pueden estar, ya sea amontonados en camellones o bloques o ampliamente difundidos en los estratos conglomeráticos. 

En "Ensayo sobre la Teoría de la Tierra" de Cuvier se establece que,

"El señor Kerwin ha dado razones de peso para su creencia de que el mundo ha sido, en algún período remoto, más violentamente atacado por una poderosa inundación desde el sudeste.

 

Rasgando y llevándose los materiales más flexibles del hemisferio sur, ha traído un gran cuerpo de ellos al norte, e imprimió en los cabos de Buena Esperanza, de Hornos, y la tierra de Van Diemen (Tasmania), y otros promontorios, las marcas de su abrumadora fuerza".

Hay evidencia geológica que las montañas han sido cortadas y arrastradas durante los cataclismos de los diluvios.

Existen miles de reveladoras rocas inclinadas en formaciones normales que parecen haber sido limpiamente cortadas. Una llanura bastante plana es ahora todo lo que queda de lo que una vez fue una montaña situada en Joggins, Nueva Escocia, en la Bahía de Fundy, donde los bosques fósiles también están en exhibición.

Martin Gardner refiriéndose a Chief Mountain en la región de Alberta Montana de las montañas Rocallosas, donde se encuentran los estratos más antiguos descansando en otros más jóvenes, afirma que,

"En su forma, de la línea de la falla se puede ver claramente, con caras alisadas de piedra que atestiguan el movimiento de fallas".  Él menciona Hart Mountain en Wyoming como otro lugar al  revés, y él dice: "La falla es fácilmente detectable en unas veinticinco millas."

(Hechos y falacias en nombre de la ciencia, página 130. - Facts and Fallacies in the Name of Science, Page 130. )

Table Mountain, en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, se eleva 3,500 pies sobre el nivel del mar. 

Consiste en capas horizontales de rocas sedimentarias que siguen intactas. Todas las capas circundantes de roca fueron arrancadas y arrastradas por el impacto de las aguas del océano cuando el extremo sur del continente africano encabezó el vuelco  hacia el sur de ese continente durante el último gran diluvio. 

El perfil socavado de Table Mountain y otros estratos de tierra de la punta sur de África ilustran los efectos de algunas de las fuerzas de la naturaleza que estaban activas cuando ese continente se volcó hacia el sur en, por debajo y a través del inerte océano.

Los océanos alrededor de África llegaron a ser extremadamente turbulentos debido al repentino cambio en las profundidades del océano con el cambio de latitud, y por el movimiento de la gran masa de tierra que se volcó en ellos. Era el reverso de una inundación ordinaria o del desbordamiento de un río caudaloso. En esta inundación, la tierra se movió contra las aguas, y las aguas se montaron a lo largo de parte de la tierra. 

El Corán confirma la fuerza mecánica de las aguas de inundación: "La superficie de la tierra hervía (espumeaba, se agitaba) ... el arca se movió..... en medio de olas como montañas". 

Fue en este temporal de aguas turbulentas, cerca de la costa oriental de África, que los buques de Noé y Deucalión montaron este último diluvio, la tierra debajo de ellos se salió hacia el sur, hasta que la barcaza de Noé golpeó o se tropezó con la cumbre del monte Ararat, y el pecho salvador de vida de Deucalión encalló en el monte Parnassus. 

Hay restos de altiplanicies en un gran número de lugares en todo el mundo, aquí las capas de rocas sedimentarias, que previamente habían estado por debajo de la superficie de la tierra están en la superficie en forma de extremos arrancados o lados de las montañas, colillas y montículos, dejando al descubierto un gran número de estratificaciones horizontales creadas sucesivamente, todo un corte limpio, despojado de arriba a abajo.

Ejemplos típicos pueden ser vistos en el Monumento  Cañón, Arizona, en el Parque Nacional de Yellowstone, en Dakota del Sur y en el oeste de Nebraska, cerca de Banff, en las Montañas Rocosas canadienses, cerca de New Haven, Connecticut, y en el Delaware Water Gap. La mayoría de estas montañas y colinas cortadas representan lo que quedó cuando las aguas de un gran diluvio arrancaron todo el país con excepción de secciones arrancados aún en pie intactas como montañas.

La exposición de las capas internas de estas montañas devastadas es indicativo de la fuerza del impacto de la tierra y el agua durante los cataclismos producidos por las Vuelcos del globo. 

Otra razón para la aparición de formaciones de rocas más antiguas en la parte superior de otras más jóvenes es el transporte de los glaciares. La palabra compuesta "Edad de Hielo", creada hace sólo unos 100 años, y la teoría de la edad de hielo, sugerida en ese momento, permitió a los desconcertados geólogos dar cuenta de la aparición de materiales rocosos "extranjeros" en muchos lugares y de muchas de las discordancias en sucesivos estratos de tierra. 

A pocos kilómetros al sur del lago Erie, cerca de Jamestown, Nueva York, hay un enorme bloque errático de piedra blanquecina encaramado en la cima de una pequeña cadena de montañas de piedra marrón. Marca el punto que había alcanzado cuando el glaciar que viajaba se volvió hacia el agua. Encalló como el Arca de Noé 

Las formaciones rocosas conteniendo cobre de Arlington y Kings land, N.J., no son nativas, sino que son los bloques erráticos, transportados por el hielo de alguna región aún no identificada, y se dejó caer cuando el hielo se derritió. Hay muchos bloques erráticos similares en muchas partes de este y otros países. 

Long Island, Nueva York, fue creado por acción glaciar, siendo un residuos terminal en sus sección norte y una planicie aluvial en el sur, formada por pesadas cargas de sedimentos, arena y grava transportados por las corrientes que salen de debajo del último glaciar norteamericano. 

En el puerto de Boston, las islas están compuestas de escombros glaciales, y sus largos ejes son paralelos a la dirección del flujo del hielo. Se les llama drumlins (drumlin = derivado de la palabra gaélica druim, colina redondeada, montículo, y fueron dejados por los glaciares.)

Cuando el gran tamaño y la capacidad de carga de los últimos glaciares polares norteamericanas consecutivos sean analizadas y apreciadas completamente, muchas otras anormalidades de la tierra, rocas y pequeñas montañas serán adjudicadas de haber sido glaciares transportados a sus ubicaciones actuales.
 

Las rocas más antiguas y la Edad de la Tierra 

las rocas más antiguas de la que podemos tener algún conocimiento definido son las que están dentro de nuestro alcance físico.

Conocemos bien las rocas de varios estratos de tierra que se han obtenido a partir de pozos de minas, túneles, y perforación de pozos. También conocemos rocas  que han estado enterradas antes, tal vez a tres millas debajo de la superficie, pero ahora están expuestas como afloramientos. Pero lo que sabemos de otras rocas debe seguir siendo hipotético, estando en la naturaleza de la geología filosófica. 

Sin embargo, poseemos mucha información valiosa. Como tentativa, ya que nuestros cálculos y teorías deben ser apoyados por evidencia sustancial que sirve como base para la teorización inicial y como guía para futuras investigaciones.

Un registro legible de los vuelcos frecuentes de nuestro globo, con especímenes de vida animal y vegetal de cada Época, es contenido en el gran libro de piedra cuyas páginas son los estratos sucesivos de miles de materiales de la tierra, los cuales han sido penetrados y han sido ejemplificados e identificados en base a núcleos de perforación. 

Los hombres han explorado debajo de la superficie de la tierra a una profundidad de aproximadamente de cinco millas perforando en busca de petróleo, y a menores profundidades en busca de agua y otros minerales. La evidencia traída en los núcleos de perforación  demuestran que la tierra está construida en capas. 

No hay razón por qué los estratos de la tierra por debajo de aquellos penetrados por la perforación más profunda de pozos deberían haber sido creados de una manera diferente que los estratos de más arriba. 

Desde la profundidad de los estratos encontrados en la perforación más profunda hasta la fecha, su espesor medio, y el número total de capas, se puede estimar la edad de las rocas penetradas. En base a los datos indicando la profundidad final de las estratificaciones de la tierra, podemos estimar la edad de la tierra.  

La perforación más profunda en el registro penetró 25,340 pies debajo de la superficie de la tierra. Fue perforada en 1913 por la Phillips Petroleum Company en el campo Pecos en Texas. Los estratos medios de la tierra por donde penetró, como se muestra en los datos de perforación del Rancho Spur del capítulo siguiente, eran de aproximadamente 13 pies de espesor, y cada estrato fue creado en una Época que duró unos 6,000 años. 

Por lo tanto, 25,340 pies dividido entre 13 pies por capa da el número de Épocas atravesadas por la perforación de 1949. Esta cifra multiplicada por 6,000, la duración media de cada una de las Épocas recientes, dando la edad aproximada del estrato de la roca en el fondo del pozo, de 11,694,000 años. 

Las rocas más antiguas de la que tenemos un conocimiento preciso, por tanto, son de alrededor de doce millones de años. Evidencia fáctica de rocas que son más antiguas no está disponible por el momento. 

Un análisis adicional de la edad de las rocas, sobre la base de la nueva teoría de la creación continua y la acumulación constante de materiales de la tierra, se da en la Parte III, "El origen de los Materiales de la Tierra. " 

No hay ninguna razón conocida por la cual los estratos inferiores a los penetrados por la perforación más profunda  deberían haber sido creados de una manera diferente a las capas anteriores. Por lo tanto, mediante la determinación de la profundidad máxima de los estratos de roca en la tierra, se puede estimar la edad de la Tierra más o menos de la misma manera que se determinó la edad aproximada de las rocas más antiguas que conocemos. 

Esto se hace con la ayuda de sondeos de profundidad; creando artificialmente ondas de choque a través de la tierra, similares a las ondas de choque de los terremotos, podemos medir la profundidad de los estratos de roca.

La profundidad estimada de materiales sólidos que existen y transmiten ondas sísmicas entre el núcleo de la tierra y el nivel del suelo son discutidos en Enciclopedia Británica y en la Física de la Tierra, vol. VII, publicado por el Consejo Nacional de Investigación. Sondeos terrestres de profundidad han indicado que hay cerca de 1,850 millas debajo del nivel del suelo desde donde las ondas de choque rebotan de vuelta a la superficie. Esto se supone que es el núcleo de la Tierra. 

Con el fin de determinar con bastante exactitud la edad de la tierra, sin embargo, las cifras utilizadas hasta ahora deben ser ajustadas. 

Hemos dicho que los datos actualmente disponibles indican que los estratos superiores de los materiales de la tierra, cada uno requiere unos 6,000 años para su creación. Esta es la duración estimada de cada Época durante la cual se formaron las capas superiores. Sin embargo, parece lógico suponer que los períodos de tiempo entre los vuelco  del globo eran más cortos cuando el globo era más pequeño.

Por lo tanto, 4,500 años entre los vuelcos  del globo son supuestos, para este cálculo provisional de la edad de la tierra, y la tasa de acumulación de materiales de la tierra se ha fijado en 9% pies por Época en lugar de 13 pies. 

Según estas cifras estimadas, entonces, la número de pies de la superficie de la tierra a su núcleo (1,850 x 5,280) dividido por el número de pies por estrato (9%) indica que el impulso de las ondas viaja a través de un millón de estratos para alcanzar el núcleo. Tomando 4,500 años como la duración de cada Época, nos encontramos con que la edad de la tierra es aproximadamente 4'2 "mil millones de años. 

Como se sugiere en todo, estas cifras de la edad de la tierra y la edad de las rocas más antiguas conocidas son provisionales. Se basan únicamente en la Perforación Ranch Spur, pero ésta fue supervisada con más precisión que los muchas perforadoras comerciales. Muchas perforaciones similarmente supervisadas en numerosas áreas del mundo  deben hacerse y compararse para permitir a uno hacer estimaciones más perfectas. 

Datos más precisos también son necesarios en relación con la duración de las Épocas sucesivas. 



Épocas de la estratificación geológica 

La palabra "Época", como se usa aquí denota el período de tiempo durante el cual el globo rotaba sobre uno de los ejes de  figura.

La teoría del vuelco del globo es apoyada por la evidencia a efectos de que la mayoría de áreas de tierra de la tierra han cambiado sus latitudes, y que cambios importantes en la disposición de los de la tierra han ocurrido, marcando el final de cada una de estas Épocas. 

La teoría es una de  cambios catastróficos normales y naturales que se producen al final de cada Época, y de otra normal y natural, pero más lento, siendo los cambios continuamente forjado durante cada Época, ambos tipos de cambios son el resultado natural de fuerzas operativas y creativas de la naturaleza definitivamente identificados. 

La historia de la tierra, como está escrita en las rocas, indica que ambos tipos de cambios han tenido lugar. La evidencia fósil demuestra que los diferentes tipos de animales, reptiles, peces, mariscos y plantas vivieron durante largos períodos de tiempo y luego dejaron de existir. 

Los restos fósiles de formas extintas de vida ahora enterradas en la profundidad de la tierra muestran que una vez vivieron en la superficie de la tierra o en aguas superficiales. Se encuentran en las rocas más antiguas conocidas, y se encuentran en los núcleos sacados a la superficie por las profundas perforaciones de pozos de petróleo. Nos muestran que la creación y el desarrollo de la vida animal y vegetal, así como de los materiales de la tierra, en las cinco millas superiores de los materiales de la tierra han sido gradual y continuos para toda la tierra. 

Las Épocas más recientes pueden ser contadas por medio de un examen de la capas superiores de los materiales de la tierra, así como la edad de un árbol puede determinarse contando el número de anillos de su tronco, y, al igual que el clima reinante durante cada año de crecimiento del árbol se puede aprender de la condición de cada anillo, podemos analizar el estado de cada una de las capas de la tierra. Hay una diferencia, sin embargo; mientras que un árbol tiene un anillo por año, una Época puede ser representada por varias capas en cualquier área local, o algunos de los estratos pueden faltar

Se han encontrado numerosos y diversos casos de incumplimiento variando con la ubicación geográfica de cada zona durante cada Época. Por ejemplo: un estrato local puede ser desarrollado a partir de la vida orgánica, de la vegetación y los animales, junto con la suciedad y el polvo transportado por el viento y el agua, esta tierra puede entonces ser todo o en parte arrastrada por las aguas de uno de los diluvios mundiales, o puede llegar a ser cubierta por arena y detritus por las inundaciones o por la deriva glacial de una edad de hielo. 

En este punto de nuestro examen de la evidencia del vuelco del mundo, podemos juntar los materiales que tenemos para describir las Épocas geológicas recientes. 

La edad de la Época en la que vivimos ahora se estima provisionalmente en 7,000 años. Será un punto de referencia útil, especialmente al comparar la longitud de nuestra Época con la duración de la vida de las Épocas anteriores. Sin embargo,  puede ser ajustado cuando esté disponible una mejor evidencia. 

Un período de 7,000 años se ajusta aproximadamente a la Época histórica, a partir de o alrededor de 5,000 A.C., y también a las escalas de tiempo de los barrancos producidos por los ríos Niágara y Missisipi. 

Los materiales que contienen carbono 14, debidamente identificados como siendo contemporáneos con el último gran cataclismo de la tierra, pueden ser contados para producir estimaciones aproximadas del tiempo transcurrido desde que se produjo ese cataclismo. Datación por carbono 14 de los mamuts, rinocerontes, árboles gigantescos y otros restos vegetales y animales enterrados en la tundra de Siberia y en otras partes en el momento de ese cataclismo, puede revelar las edades de menos de 7,000 años. 

Cuantos más datos obtenemos sobre este tema, más corto parece ser el tiempo transcurrido. 

La idea se me ocurrió, de que los mamuts perfectamente conservados encontrados en la tundra ártica posiblemente había sido arrastrados desde el trópico a una zona frígida, y que, de ser así, tal vez se podría encontrar alguna evidencia de ello. 

Me imaginé tener un globo de 8 pulgadas de la tierra en mis manos, y luego tirarlo en el aire, y hacer que se quede allí y de vueltas. Pensé que América del Norte y del Sur se pasearían a lo largo del Giro del  Ecuador, debido a su peso y la fuerza centrífuga correspondiente, siempre y cuando yo mantuviera girando el globo. 

Parecía sentido común decir que la tierra, naturalmente rotaría con sus masas más pesadas extendidas a lo largo de la línea del Ecuador, debido a que la fuerza centrífuga lanza el mayor peso a la periferia o ecuador de cualquier masa girando libremente suspendida. Y, sin embargo, por el contrario, las poderosas Montañas Rocosas y la Cordillera de los Andes no están ahora extendidas a lo largo del ecuador. 

Mi teoría era que si podía trazar una circunferencia de la tierra que podría haber sido el Ecuador  cuando los mamuts vivían, justo antes del último vuelco del globo, entonces yo podría ser capaz de encontrar alguna evidencia de una zona polar de 90 grados de latitud lejos de ese ecuador, lo que probaría correcta la teoría. 

Tuve la curiosidad de hacer un viaje de un sábado por la tarde en 1913, a la Biblioteca Pública de Erie, Pensilvania, donde vivía entonces. Me llevé un carrete de cinta roja de una pulgada de ancho, y até la cinta alrededor de un globo a tres pies de la tierra, que fue situado en el centro de la sala principal de la biblioteca. 

Recuerdo que me sentía cohibido al principio, pero pronto adiviné que los demás usuarios de la biblioteca debían pensar que yo era uno de los hombres que trabajaban allí, porque ellos hicieron caso de mí, y yo trabajé tranquilamente, lo que era rutina en ese tiempo, ahora en telares retrospectivos como una ocasión memorable. 

Até la primera cinta en un gran círculo meridiano, línea como el ecuador, a lo largo de las grandes cordilleras de las Montañas Rocosas y las montañas de los Andes. Dividía el globo en dos mitades iguales. En el lado opuesto del globo, me interesé en destacar que la cinta recorría el este de Asia y las aguas poco profundas alrededor de la península de Malayo.

Traté de hacerlo representar el meridiano o banda ecuatorial que atraviesa las zonas terrestres más pesadas, y me pareció que las zonas terrestres que tocó compensaban con creces cualquier otro cinturón circunferencial de la superficie de la tierra que podría haber elegido. 

Luego adjunté otras dos cintas que representan grandes círculos de la tierra en lugares al azar, pero teniendo dolores particulares de que estaban exactamente en un ángulo de 90 grados con respecto al primer grupo. 

La idea era que yo podría encontrar algunas evidencias de antiguas zonas polares, donde estas dos cintas verticales se cruzaban entre sí, y las intersecciones marcarían la ubicación de los centros polares, en el momento de partida que mi primera cinta estaba realmente bajo el ecuador solar. 

Una intersección fue encontrada en el lago Chad, África, que pensé que podría darme una pista, y la otra intersección fue ubicada en el Océano Pacífico, y nada me vino a la mente. Recuerdo haber escrito "Lago Chad" en un pedazo de papel, con una voluntad de tratar de averiguar algo al respecto. Yo estaba buscando evidencias de acción de los glaciares, o de un hueco dejado en la tierra por una capa de hielo.

Me quedé asombrado al descubrir justo lo que estaba buscando:. La gran cuenca del Sudán de África 

"En el norte de África hay un vasto espacio de arriba de cuatro millones de millas cuadradas, extendiéndose desde el valle del Nilo hacia el oeste hasta la costa del Atlántico, y desde la meseta de Barbary en el norte hasta los extremos de la cuenca del lago Chad, en el sur, desde donde ni un solo río encuentra su camino hacia el mar.

 

El conjunto de este espacio, sin embargo, parece estar surcado por canales de agua en las direcciones más variadas.

 

"Desde las laderas interiores de la meseta de Berbería numerosos wadys toman una dirección hacia la gran faja de arena del Erg, en el que terminan, una gran serie de canales parecen irradiar desde la parte superior del Sahara, que se encuentra inmediatamente al norte del Trópico de Cáncer y en aproximadamente 5 E. del meridiano de Greenwich; otro grupo irradia desde las montañas de Tibesti, en el Sahara oriental". 

Enciclopedia Británica, 9 ª edición, vol. I, página 255.

Esta formación podría ser el resultado natural de la torrencial escorrentía de deshielo glacial, convertido en agua por un ardiente sol tropical, en el Casquete de Hielo de la Cuenca de Sudán se tambaleó desde el Polo Norte de la vuelta y se fundió cerca del Ecuador, hace unos 7,000 años. 

Los innumerables cursos de agua sin ninguna relación aparente entre sí permanecen como evidencia cuentas. 

El Lago Chad tiene una particularidad excepcional. Es un lago de agua dulce, y sin embargo, no tiene una salida al mar. No hay otro lago como éste en la superficie del globo. 

Es generalmente entendido que el agua del lago se mantiene fresca mediante la entrega de sus sales a los océanos, a través de escorrentías o desbordamientos. Con la excepción del lago Chad, los grandes lagos sin salidas al mar son salados. Estaban llenos de agua de mar cuando fueron creados por primera vez en el comienzo de la Época actual. 

Algunos, como el Mar Caspio,  probablemente se desbordó y perdió su contenido de sal, debido a la excesiva humedad creada por el derretimiento del casquete de hielo de la Cuenca del Sudán y las corrientes de aire que fluyen hacia el este, pero estos lagos más tarde se encogieron, perdieron sus desbordamientos, y desde entonces han acumulado sales minerales. 

Las sales son acarreadas y traídas por los ríos tributarios entrantes y arroyos. Como se ha indicado antes, los niveles de agua de los lagos son determinados por la relación de agua de entrada y su evaporación. Durante aproximadamente 7,000 años de existencia del lago Chad no ha acumulado suficientes sales de sus afluentes para volverlo salado. Sigue siendo un lago de agua dulce y sin una salida al mar. 

Durante la temporada de lluvias, el lago Chad se desborda de su cuenca normal. La declaración de la  Enciclopedia Británica añade que fertiliza los valles, incluyendo el gran valle o cuenca hacia el noreste, hasta donde se desborda. Esto indica que el desbordamiento no depura el lago de sales en alguna medida, porque si lo hiciera, el suelo en las zonas desbordadas se volvería salado y no fertilizado. 

El ecuador de la última Época de tiempo antes de la nuestra, era una línea a lo largo de las Montañas Rocosas y las Montañas de los Andes. Si la tierra volcó 80 grados de latitud, en lugar de 90 grados, entonces el lago Chad no sería el centro polar de la anterior capa de hielo del Polo Norte. El Lago Chad se encuentra varios cientos de kilómetros al sudeste del centro de la cuenca del Sudán. 

La cuenca del Sudán está en el centro del lóbulo norte de ese continente. La masa de hielo acumulado, que creó la gran depresión de esa cuenca, no tenía salida al mar y por lo tanto no tenía la oportunidad de fluir de la tierra hacia el mar a través de la fuerza de la gravedad, de la manera que el hielo de los glaciares fluye ahora el más pequeño continente de la Antártida. 

Este hecho, junto con la probabilidad de que una capa de hielo más pequeña creciera en el Polo Sur de la Época, parece dar cuenta de Época Nº 1 A.P. de haber tenido una vida más corta que las Épocas inmediatamente anteriores y siguientes. 

Otros estudios de los canales cortados por los cursos de agua de la cuenca del Sudán y de las estrías glaciales cortadas en las rocas canadienses se puede esperar que demuestre que ni el lago Chad ni la Bahía de Hudson eran los centros exactos de las capas de hielo del Polo Norte de las dos Épocas.

Sin embargo, el lago Chad y la Bahía nos dan dos puntos de referencia; se han movido aproximadamente la misma distancia desde el Giro del Polo cada vez que la tierra ha volcado y son por lo tanto referencias útiles a los puntos polares aproximados de sus Épocas. 

El casquete de hielo de la Bahía de Hudson ha dejado marcada un hueco de mayor intensidad y más grande en la tierra de lo que lo ha hecho el subsecuente casquete de hielo en la Cuenca de Sudán. El casquete de Hielo de la Bahía de Hudson tomó un 60% de más tiempo en crecer, y por lo tanto hizo una cuenca más grande y más profunda que el casquete de hielo de la Cuenca de Sudán. El proceso de isostasia, tendiendo a elevar zonas hundidas, se suma a la dificultad en la lectura correcta de los registros. 

Cuando el Casquete de Hielo de la Cuenca de Sudán se alejó del Giro del Polo Norte, no fue todo el camino hasta el ecuador, debido a la cuando llegó a su posición actual, el nuevo bulto de la tierra se había establecido. El Casquete de Hielo de la Cuenca de Sudán y el nuevo bombeo de la tierra pronto estaban viajando juntos a lo largo, a la velocidad de rotación de la Tierra o cerca de 1,000 kilómetros por hora.

La velocidad de vuelco de la Capa de Hielo había desaparecido prácticamente, y su atracción excéntrica de la fuerza centrífuga ahora había cambiado de un tirón hacia los lados por una fuerza estabilizadora hacia arriba y hacia afuera. El equilibrio isostático una vez más se había establecido, sujeto a reajuste a través de terremotos, hasta que la capa de hielo se había derretido completamente. 

Así, la Época Nº 1 A.P. terminó en el momento de la última inundación del mundo y el comienzo de la Época actual. Durante la Época Nº 1 A.P., el área  de la Cuenca de Sudán en África ocupaba la zona del Polo Norte de Giro. Los continentes de América del Norte y del Sur se ponen a la par en un lado del mundo, a lo largo de la línea del Ecuador, y en el este de Siberia y China estaban en el lado opuesto.

El tiempo estimado sugerido se basa en los últimos avances de la localización de tiempo geológico por la medición de la cantidad de carbono 14 que queda en especímenes de muestras de madera. La madera de un bosque antiguo, descubierta en un estrato más bajo de la tierra en Two Rivers, Wisconsin geológicamente vinculado con el final de la última Capa de Hielo de América del Norte, a menudo referida como la Edad de Hielo Wisconsin analizó su contenido de carbono 14. 

Se encontró que su edad era de aproximadamente 11,400 años. La literatura sobre este antiguo bosque de Wisconsin contiene muchos informes sobre su edad, variando desde 11,000 a 12,000 años. He optado por utilizar el reporte de la primera autoridad en este campo, Willard F. Libby, que llega a una figura de 11,400 años. 

Si restamos 7,000 años, la edad estimada de nuestra Época actual, de 11,400 años, nos queda con 4,400 años como la duración de la Época Nº 1 A.P. La cifra está sujeta a correcciones cuando se disponga de mejores datos. 

Durante la Época Nº 2 A.P., la abolladura geológica de la cuenca de la Bahía de Hudson contenía el Polo Norte y su capa de hielo, mientras que América del Sur , África, Borneo y la India estaban a lo largo del ecuador. Durante esa Época, camas de arcilla fueron establecidas por el cieno, presumiblemente acarreado por arroyos glaciales fluyendo en verano por debajo de los bordes de la capa de hielo de la Bahía de Hudson.

Cada capa de arcilla llamada una varva se corresponde con el crecimiento de las camas de arcilla de un solo año, por lo que la duración aproximada de la Época puede ser fijada en 7,000 años. 

La identificación de esta antigua área del Polo Norte está basada en el hecho de que su distancia desde el lago Chad, en la cuenca del Sudán en África es aproximadamente la misma que la distancia actual del lago Chad desde el Polo Norte, que, a su vez, es la distancia a través de la cual la zona el Lago Chad se trasladó durante el último vuelco del mundo. Todos los movimientos de vuelco  cubren cerca de 80 grados de latitud. 

La depresión ahora ocupada por el mar Caspio parece haber sido la ubicación del Polo Norte durante la Época Nº 3 A.P., ya que su cuenca, así como la del Mar Negro fue formada por un la depresión causada por una capa de hielo. 

El mar Caspio se encuentra en una amplia zona de tierra situada bajo la llamada Depresión del Caspio y es el centro focal de drenaje que recoge la gravedad hacia abajo el flujo de agua de varios ríos grandes, incluyendo los ríos Volga y Ural. Esta zona del Caspio hundida tiene similitudes geológicas a las zonas deprimidas en las que la Bahía de Hudson en Canadá y el lago Chad en África se encuentran.

Los tres son centros de drenaje para extensos sistemas fluviales en áreas muy grandes, y se han deprimido en formaciones de cuencas por el peso de las capas de hielo de Épocas anteriores.  

Sabemos que cada capa de hielo sucesiva deja una depresión en la tierra, y cada vuelco del globo mueve tanto los Casquetes de Hielo en el Polo Norte y Sur a distancias de unos 80 grados de latitud alrededor de 5,500 millas.

Con esta información como guía, podemos identificar la ubicación de los antiguos Polos de muchas Épocas sucesivas. Encontramos aproximadamente la misma distancia entre el Mar Caspio y la Bahía de Hudson, entre la Bahía de Hudson y el lago Chad, entre el lago Chad y el actual Polo Norte. 

La única pista observable de la duración de la cuenca del Caspio en la Época Nº 3 A.P. es que no permitió un flujo del hielo a los océanos. Parece haber sido encerrado. Por lo tanto, se supone que tuvieron una vida más corta que la Cuenca de la Bahía de Hudson en la Época Nº 2 A.P. Era más como el casquete glaciar la Cuenca de Sudán de la Época Nº 1 A.P. Posiblemente, una duración de 5,000 años es una estimación razonable. 

El reciente historia geológica de la tierra sujeta a ser corregida cuando se disponga de mejores datos puede resumirse de la siguiente manera:

• Época Nº 3 A.P. comenzó hace unos 23,400 años y duró unos 5,000 años. La Depresión del Caspio estaba en el Polo Norte de Giro. Los mastodontes del Estado de Nueva York vivían en un clima tropical.
   

• Época Nº 2 A.P. duró unos 7,000 años. La Bahía de Hudson estaba en el Polo Norte. Los mastodontes del estado de Nueva York se encontraban en almacenamiento  frío, al igual que  los mamuts siberianos de hoy.
   

• Época Nº 1 A.P. duró unos 4,400 años. La cuenca del Sudán en África estaba en el Polo Norte. Los mastodontes del Estado de Nueva York fueron enterrados en los trópicos. Los mamuts siberianos pastaban en un Edén como el clima en o cerca de los trópicos.

Nuestra propia Época ya ha durado cerca de 7,000 años. El Océano Ártico está en el Polo Norte. Los mamuts están enterrados en tundra helada de Siberia y Alaska.

El misterio de cómo se creó y construyó la tierra ahora puede explicarse a través de la pantalla racional y comprensible de las pruebas objetivas. Ahora sabemos hasta cómo las distintas capas de roca, arena, pizarra, etc., con sus muestras indicadoras de antigua vida animal y vegetal vinieron a establecerse en los estratos en los que se encuentran ahora. 

Por ejemplo: Se encontró un trozo de madera fresca viva asemejándose al cedro rojo durante la excavación hecha para las bases del edificio el Chase Manhattan Bank en 18 Pine Street, Nueva York. Fue encontrada tres pies por debajo de la superficie superior de una capa dura, que a su vez estaba de unos sesenta pies debajo de la superficie. El árbol creció probablemente en Época Nº 2 A.P. 

En la excavación realizada para la fundación del edificio de la Compañía de Teléfonos de New York en las calles Barclay y West, Ciudad de Nueva York, los contratistas se encontraron con los troncos tumbados de varios árboles de enebro con corteza y ramas intactas. 

A 45 pies bajo el nivel de marea alta se encontraron con un lecho de composta de dieciocho pulgadas de espesor. El lecho de la composta había crecido donde se encuentra, probablemente, los árboles también. Estos pueden ser clasificados provisionalmente como crecimientos de Época Nº 1 A.P. 

Partes de esqueletos de ballenas han sido encontrados en Long Island, Nueva York. Estos son tentativamente clasificados como pertenecientes a nuestra Época actual, ya que durante este periodo de tiempo se supone que las aguas del océano habían retrocedido y ahora formaban parte de la nieve y el hielo en el casquete antártico, también, la escasez de tierra vegetal en Long Island apoya la idea de que no ha tenido su tamaño actual durante los aproximadamente 7,000 años de nuestra Época. 

Camas de arcilla Abundan en las proximidades de la ciudad de Nueva York, son encontradas con capas de arena, grava, arcilla o tierra vegetal, etc., superpuestos sobre ellos. Hechos como éstos están de acuerdo con la teoría de los Vuelcos del Globo. 

Asumiendo que había tierra a la orilla de la bahía del Casquete de Hielo de la Bahía de Hudson durante Época Nº 2 A.P., se deduce que los sedimentos de arroyos glaciales establecidos en lagos o ríos formaron estas camas de arcilla. Desde entonces, se han producido dos diluvios mundiales y dos Épocas de Tiempo, durante las cual se desarrollaron las capas de materiales superpuestas que ahora están siendo encontradas. 

Las camas de arcilla se establecen normalmente en las capas de sedimentos con diferentes colores y texturas. Estos varvas contienen un registro de cada año, y en algunos casos indican  el clima, las precipitaciones y la vegetación, por el color, el grosor y la textura de cada varva. 

Una escala de tiempo físico para nuestra Época actual se ha desarrollado a partir de un estudio de variadas arcillas, por el científico sueco Gerard De Geer. 

Él fija el comienzo de la Época posterior glacial a hace unos 8,700 años. Él contó el número de varvas en camas de arcilla en valles de los ríos que corren de norte al sur, en el supuesto de una ascensión gradual, como una larga escalera, mientras el hielo se retiraba hacia el norte, y vinculando la varva encima de una cama de arcilla con un varva inferior de una cama superior. 

Lo llamó la escala de tiempo sueco. 

De Geer informó los siguientes números de varvas de arcilla de lugares que presuntamente han estado en los bordes de los Casquetes de Hielo:

Su escala de tiempo muestra un período más largo que las escalas de tiempo del cañón del río. Esto podría atribuirse a las varvas arcilla del mismo año después de haber sido contadas en dos lugares diferentes. 

Debajo de la varva número 8,700, aproximadamente, De Geer encontró una varva gigante. Esta evidencia se ajusta a la teoría del vuelco del globo, debido a que la varva gigante marca un cambio abrupto en la formación de los depósitos de arcilla que ocurrieron hace unos 8,700 años. También hay evidencia que indica que Suecia se encuentra en una latitud diferente y más caliente durante la Época de tiempo anterior. 

La Escala de Tiempo de De Geer muestra que es posible determinar la duración aproximada o la longitud de tiempo de muchas épocas anteriores, contando las varvas en arcilla, pizarra y depósitos de esquisto. 

Muchos conteos de la cantidad de varvas en camas de barro se han realizado y registrado, pero como no se ha hecho ningún intento sistemático para asociar los números con Épocas de tiempo. 

Reaparición de Materia Orgánica en arcillas 

La vegetación que se borró por debajo de los glaciares de una edad de hielo reaparece en los lechos de arcilla que han sido formados por los sedimentos y otras materias transportadas por corrientes de verano  fluyendo por debajo de algunos de los glaciares.

Esta carga de diferentes tipos de materia transportadas por las aguas que fluyen es depositado en el fondo de lagos y ríos, cuando las velocidades y capacidades de carga de las aguas han bajado o se reducen a cero. 

Las arcillas se derivan en parte de la vegetación, muchos de los cuales poseen porcentajes considerables de materia orgánica. Esto aparece en partículas coloidales de menos de 0.002 milímetros de diámetro hasta sub-microscópicas. 

Éstas son las partes de las arcillas que absorben la humedad, y todos llevan una carga eléctrica negativa cuando están en contacto con el agua, mostrando así una cierta relación a la celulosa y al carbono, ambos de los cuales son también materia vegetal y adquieren cargas negativas cuando están en contacto con el agua. 

La materia orgánica en arcillas ha sido generalmente atribuida a animálculos, algas y crecimientos microscópicos, pero los bosques tropicales fueron otra fuente disponible de la materia orgánica que se encuentra en algunos de los lechos de arcilla en desarrollo, en los bordes de los glaciares en antiguas eras de hielo, tal como las cinco que prevalecieron recientemente en el norte de América del Norte y similar a la edad de hielo, ahora embalsamando la Antártida y Groenlandia con glaciares. 

Cada vez que el globo ha volcado, las zonas terrestres tropicales, cubiertas de vegetación y bosques, se han trasladado a las regiones polares. Teóricamente, la vegetación debe de haber sido triturada y convertido en pulpa en partículas coloidales por el peso y el movimiento de las masas de hielo recubriéndolos. Las varvas más bajas corresponden a los años anteriores de las épocas en que fueron establecidas, las capas superiores se corresponden de manera similar a los últimos años de las mismas épocas.

Más materia orgánica o vegetal se encuentra en las varvas inferiores y menos en las varvas superiores. La investigación sobre las estructuras de las arcillas eventualmente puede permitirnos identificar parte de la materia orgánica como proveniente de bosques triturados. 

Las pruebas de la teoría de que la vegetación cubría la tierra, cuando la capa de hielo comenzó primero a formarse debe evolucionar de un mayor estudio de las varvas en los lechos de arcilla en Hackensack, N.J., Wrenshall, Minnesota, y en otros lugares. 

Es natural suponer que dicha vegetación, cuando es triturada y molida en partículas coloidales, flotaría en las aguas debajo de los glaciares, y que por lo tanto son llevadas y depositadas como elementos básicos de los lechos de arcilla. 

Al ser desechada la limitada cantidad de vegetación, tiene que haber estado cada vez menos disponible, por lo que los varvas superiores y posteriores de los lechos de arcilla deben mostrarse con menos sedimentos orgánicos y más sedimentos minerales, los varvas inferiores o anteriores, por el contrario , deben mostrar más materia celulosa o materia orgánica en proporción a los materiales inorgánicos. 

Mucho del carbono generalmente pensado como siendo de origen orgánico se encuentra en las rocas más antiguas, clasificadas como Pre Cámbricas, pero aquí se encuentran generalmente en un estado amorfo, y esto puede ser postulado por haber sido causado por las presiones y desgastes a los que se someten los materiales orgánicos. Por ejemplo, las rocas del Escudo Laurentino de Canadá son clasificados como Precámbricos, debido a la falta de "guías fósiles", y no por otra razón importante.

Revelan la colada de la capa de hielo de la Edad de Hielo que siguió a la Edad de la Vida, que se había desarrollado los materiales orgánicos del suelo a una pulpa, por las masas de hielo. El carbono aparece en algunas de las pizarras negras de la región superior de lago. Esa área estaba tan lejos de la costa que los glaciares aparentemente no tuvieron la oportunidad de purgarse del carbono vaciándolo en los océanos, como lo hicieron en el este, norte y sur.

Los materiales orgánicos del Escudo Laurentino están  tan aplastados y reducidos en la labranza que pocas formas orgánicas pueden ser identificadas en esas rocas. 

Es probable que el mismo tipo de reducción a pasta de la labranza esté en proceso ahora en la parte inferior del casquete antártico, descrito más adelante en la sección sobre las regiones polares, y es cuestionable si se encuentran algunos fósiles guías en las rocas que forman el piso de la cubeta del hielo del casquete polar de la Antártida. 

Según la teoría actualmente aceptada, el suelo de piedra de esa capa de hielo por lo tanto, debe automáticamente ser clasificado como Precámbrico, debido a la falta de guías de fósiles en sus superficies. 

Georges Cuvier de Francia y William Smith de Inglaterra anunciaron sus descubrimientos independientes, al final del siglo XVIII y principios del XIX, en el sentido de que cada estrato de la tierra contiene fósiles peculiares por sí mismos, y que las sucesivas capas de la tierra pueden ser clasificados en consecuencia y cierto grado de fecha en cuanto  a la edad. 

Cuvier encontró huesos de mamuts y de muchas otras especies  de vida prehistórica extinta, y también de muchas especies existentes en las distintas capas subterráneas de la tierra en los alrededores de París. 

Reveló que una serie típica de la tierra creada sucesivamente en estratos muestra:

• capa de tierra con conchas de agua dulce, indicando que un lago existió alguna una vez allí;

• capa de tierra con conchas marinas, lo que indica que la zona está mal una vez que ha sido parte del lecho marino;

• capa de tierra con conchas de agua dulce, capa de tierra o  marga;

• capa de tierra con conchas marinas; capa de tierra de arcilla sin conchas;

• capa de tierra de tiza, formada a partir de esqueletos de globigerina, que una vez vivieron en el océano.

Cuvier vio con sus propios ojos y reportó de los efectos de los cataclismos en las formaciones de las capas de la tierra. 

Él encontró que los cambios introducidos han sido repentinos, sin gradación. Buscó una posible causa y se refirió a los sucesivos cambios catastróficos como las revoluciones de la tierra. Él conjeturó que el Polo Norte una vez que había estado en la zona de las islas Sandwich (Hawai). 

Desde los días de se han hecho descubrimientos geofísicos de gran importancia.

Éstos incluyen: 

Gran parte del misterio relacionado previamente con las capas de tierra, y el problema de qué tipos sucesivos de fósiles aparecen en el mismo, son completamente explicadas cuando éstos nuevos descubrimientos son añadidos a aquellos por Cuvier. 

Una comunicación del Jefe de la Paleontología y Estratigrafía del Servicio Geológico de Estados Unidos, establece:

"Las colecciones paleontológicas del Servicio Geológico de Estados Unidos comprueban que en algunas localidades en los Estados Unidos y sus territorios, los estratos de roca conteniendo horizontes alternos de fósiles marinos y no- marinos se producen."

Una vez más, la utilidad de la identificación de las diferentes especies de fósiles de la tierra en cada estrato es enfatizada en los marcadores horizonte, (término geológico: Depósitos de cierto período, identificados por los fósiles presentes) y se dan listas de fósiles para cada formación, por W.M. Winton y W.S. Adkins en la Universidad de Texas Boletín, No. 1931, 1 de Junio, 1939.

Afirman:

"Algunos fósiles aparecen en zonas recurrentes, es decir, áreas entre las cuales los fósiles en cuestión nunca han sido encontrados."

Atlántida - tierra legendaria de Platón - recibe una validación teórica por el descubrimiento de los tipos de agua dulce de diatomeas en el fondo del Océano Atlántico.

Los geólogos del Riksmuseum, Estocolmo, Suecia, han examinado muestras extraídas del fondo del mar de la zona tropical de la Cordillera en medio del Atlántico, aprox. de 12,000 pies bajo el nivel del mar, y han identificado las algas de origen exclusivamente de agua dulce, lo que es prueba de que esta área con su lago de agua fresca en el que vivieron las diatomeas estuvo alguna vez sobre el nivel del mar. 

El cambio de altitud se postula que ocurrió hace unos 7,000 años, cuando el gran casquete de Hielo de la Cuenca del Sudán, que creció en la Figura de Eje del Polo Norte en la última época anterior, alcanzó su madurez y fue trasladada a las zonas tropicales. La tierra del lago de agua fresca, con sus diatomeas, en ese tiempo se había rodado  a su posición actual subacuática tropical en el globo.

La primera posición de este lago de tierra está determinada por su distancia de la gran cuenca del Sudán de África, que, como hemos visto, es una depresión reveladora en la tierra creada por el peso de la capa de hielo del Polo Norte de esa época. 

En teoría, esta área de la tierra del lago estaba anteriormente posicionada en el mundo, en relación con el previo Polo Norte de Figura anterior, en torno a donde se encuentra ahora el estado de Oregon en relación con el actual Polo Norte de Figura. Fue transpuesto de aproximadamente 44 N. Latitud y Longitud 120 W. a donde ahora se encuentra, a unos 14 N. Latitud y Longitud 30 W.

Fue movido a la protuberancia de la tierra a una latitud donde el nivel del mar es cerca de cuatro millas más alto de lo que estaba en su latitud anterior (de cuatro millas más lejos del centro de la tierra), por lo que, como es natural, ahora está bajo el agua. 

Los núcleos de los fondos oceánicos, tomados recientemente en los océanos Ártico y Pacífico Sudeste, han sido fechados por análisis químicos de radio (cuadro): 

 

(Saks, Abajo y Lapina en nuestros conceptos actuales de la geología del Ártico central, traducido del ruso, en la publicación de T 196 R, la Junta de Investigación de Defensa, Canadá, y Jack L. Hough en Journal of Geology, mayo de 1953, Nº. 3.) 

Los científicos rusos dan un listado de horizontes alternos, tanto fríos como cálidos. Los números 2 4 6 se enumeran como fríos. Los números 3 y 5 se muestran como calientes. Esto es seguido por la suposición de que, cuando el clima era más cálido, los foraminíferos estaban presentes y en clima frío los foraminíferos estuvieron ausentes en las secciones del núcleo. 

Obviamente, esto es una suposición errónea, porque los foraminíferos son reportados presentes en horizonte No. 1 y sabemos que el clima era frío. 

Comentando sobre el horizonte más bajo alcanzado (Nº 6), ellos afirman,

"Parece que... una parte considerable de la plataforma del Ártico era tierra seca". 

La ausencia de foraminíferos en ciertas secciones de los núcleos indica que las áreas no estaban, en ese momento, bajo el agua. 

Los foraminíferos se encuentran tanto en aguas cálidas como en aguas frías. Un clima seco, con escasas lluvias está indicado en las secciones de núcleo sin foraminíferos, porque el área del Ártico está rodeada por continentes. 

Muchos trabajos científicos han contenido reportes de los diferentes tipos de foraminíferos creciendo en aguas oceánicas, tanto frías como cálidas. Su presencia en las capas sucesivas, encontradas en las secciones transversales de extracción de muestras del fondo del mar, ayuda a identificar las sucesivas secuencias frías y cálidas de la antigua vida en un lugar determinado. 

Los horizontes alternos de los estratos de la tierra con fósiles marinos no-marinos son propios de las regiones árticas, pero son observados en muchas regiones. 

Perforaciones, pozos de minas y  acantilados devastados en muchos lugares al azar han mostrado estratos marinos y no- marinos en capas alternas, y también alternando los fósiles de clima frío y cálido, indicando recurrentes reubicaciones de latitud y longitud para todas las áreas de la superficie terrestre. 

Por ejemplo, la proporción de oxígeno 18 a oxígeno 16 en carbonato de calcio (CaC0³), la concha Globigerinidae, es una especie de termómetro geológico, una función de la temperatura del agua en el momento del crecimiento de las conchas de mar. 
 

Una comunicación del capitán Charles W. Thomas, (ahora contralmirante retirado de la Guardia Costera de Estados Unidos), un connotado navegador de hielo, tanto de las regiones árticas como antárticas, afirma que extracción de muestras en el fondo del océano frente a la costa de la Antártida y examinados por él lo llevan a concluir que el  casquete polar del Polo Sur no es de gran antigüedad, sino que se trata de un fenómeno reciente, su antigüedad no siendo más que unos pocos miles de años. 

Los núcleos mostraron que el fondo del océano está formado en capas. La capa superior contiene radiolarias de agua fría y deposición de sedimentos transportados por el hielo. Debajo de esa capa está una capa en la cual las diatomeas de agua fría están faltantes, pero se presentan de nuevo en una capa inferior. 

Las ocurrencias repetitivas, en capas alternas, de aproximadamente las mismas materias fósiles en los estratos de la tierra descubiertos por perforaciones realizadas en distintos lugares de la superficie de la tierra confirma la teoría de los sucesivos vuelcos del globo. Al comparar los fósiles foraminíferos de agua dulce y agua salada, las diatomeas y las algas nos dan pistas sobre las condiciones en que se formó cada horizonte de estratos. 

Los fósiles encontrados en las sucesivas capas de tierra atestiguan el hecho de que las capas de tierra bajo cualquier superficie particular del tiempo presente han estado localizadas durante épocas anteriores en muchos lugares diferentes con respecto al eje de rotación de la tierra, los fósiles muestran que estos estratos de tierra han sido tanto fondos marinos como áreas de montaña en épocas sucesivas, y que también confirman el hecho de que la vida existía en los climas tropicales, templados y fríos como lo demuestran los sucesivos estratos. 

Los fósiles dan testimonio de la rotación de la tierra sobre sucesivos ejes de figura al azar, porque las variaciones exhibidas por los fósiles en las capas sucesivas indican cambios en el clima, así como cambios de tierras altas a lugares marinos, y viceversa, y la combinación de un cambio en el clima y / o un cambio hacia una ubicación marina puede explicarse sólo por un cambio en la ubicación del eje de figura de la tierra. 

La siguiente tabla es el registro del perforador de perforación profunda en el Rancho Spur, cerca de Rotan, en el condado de Fisher, Texas. Está tomado de un artículo de J.A. Uddin en el número 365 del Boletín Científico Serie 28, 1914 de la Universidad de Texas. 

La perforación fue supervisada cuidadosamente con el fin de obtener una imagen típica de las condiciones de la tierra que subyacen a un punto seleccionado al azar.