El Robot Sapiens


La degradación del conocimiento espiritual hasta la ideología materialista parece seguir un recorrido gradual penetrando uno en el otro. Podemos poner este proceso en una tabla que comienza en el tope diciendo, cómo una perspectiva espiritual precisa puede definir las realidades espiritual y física, y proceder bajando hasta decir, cómo podría definirse una perspectiva estrictamente materialista:

 

 

REALIDAD ESPIRITUAL

 

Todo el mundo es un ser espiritual. La existencia

espiritual es básicamente independiente de todos los
procesos materiales. Los procesos espirituales son
superiores y causan efectos sobre el universo
material. No hay límites conocidos para la habilidad
potencial de cualquier ser espiritual.

Todo el mundo es un ser espiritual, pero existen
diferentes clases de seres espirituales los cuales no
pueden ser cambiados.

Todo el mundo es un ser espiritual, pero hay seres
espirituales superiores a quienes los demás seres
espirituales son subalternos.

Todo el mundo tiene un lado espiritual, pero sólo
hay un ser puramente espiritual, normalmente un
Dios “único”.

La realidad espiritual existe, pero es dependiente de
y surge del universo material. Si hay un Ser
Supremo, este es probablemente un ser material o
una ley científica.

La realidad espiritual no existe en absoluto. Todas
las cosas pueden ser explicadas como productos de
procesos materiales.

La vida no existe. Todo movimiento es el producto
de procesos físicos inanimados, los cuales producen
la ilusión de “vida” y “pensamiento”.

 

REALIDAD FÍSICA


Las realidades materiales son totalmente el producto
de procesos espirituales, y esas realidades pueden ser
creadas básicamente o cambiadas o desaparecidas
mediante procesos espirituales. Es posible el total
conocimiento de los procesos materiales y
espirituales.

Los seres espirituales están sujetos a algunas leyes
“inevitables” o “incambiables”, que gobiernan el
funcionamiento del universo físico.

Los procesos materiales son ante todo el resultado de
las actividades de los seres espirituales “superiores”,
para quienes los demás seres son subalternos.

El universo material fue creado por un Dios
“único”. Allí existen muchas leyes “inevitables” del
universo que la gente nunca podrá esperar
comprender.

Sólo cuentan dos procesos materiales para cualquier
fenómeno espiritual. Las habilidades espirituales,
tales como: percepciones extrasensoriales (PES), la
“clarividencia”, etc., si ellas existen, sólo son el
resultado de principios aún no descubiertos del
universo material.

No existe otra realidad distinta al universo físico.
Las habilidades espirituales, tales como: las
percepciones extrasensoriales (PES), la
clarividencia, etc., no existen.

 

La cultura occidental moderna parece estar ubicada en alguna parte alrededor de la mitad inferior de la presente tabla. Encabezando la tendencia hacia el fondo está una práctica conocida como la “psiquiatría científica”.

 

Hay mucha gente buena trabajando en psiquiatría, aunque el campo de la profesión como un todo se ha vuelto increíblemente politizado debido a que muchos gobiernos lo emplean en una variedad de escenarios, y este uso, ha promovido una visión estrictamente materialista de la práctica. Lamentablemente la psiquiatría moderna ha destruido el último vestigio de la realidad espiritual, reconocido hasta por Marx. Para comprender este cambio de rumbo, vamos a dar un breve vistazo a la historia de la psiquiatría científica.


Los esfuerzos por curar a la gente de aflicción mental son tan viejos como la historia misma. Hasta los antiguos griegos y romanos se remontan muchos de los orígenes de la psiquiatría moderna. Hace más de dos mil años el médico griego Hipócrates (aproximadamente 400 AC), clasificó en varios tipos a la enfermedad mental y rechazó la noción popular que afirmaba que la enfermedad mental era causada por la ira de los dioses o por la posesión demoníaca. En la antigua Roma, el médico Galeno, (siglo II DC), fue uno de los primeros en teorizar sobre una conexión entre el cerebro y la función mental. Después de Galeno, volvió a retroceder la psicología occidental y por muchos siglos se mantuvo de nuevo creyendo en demonios y hechizos.


Es posible que el más importante avance de la psiquiatría sucedió en Austria. Entre los años 1880 y 1882, el médico vienés José Breuer descubrió que se podía curar a una joven que sufría de histeria severa haciendo que recordara y reviviera bajo hipnosis un incidente traumático de su pasado. Los síntomas desaparecieron para siempre.


El Dr. Breuer había descubierto que realmente una persona se podía curar de la enfermedad mental simplemente mediante la acción de recordar y confrontar incidentes del pasado que habían permanecido escondidos a la memoria conciente y que sin la ayuda de un terapista no salían a la luz. De alguna forma, el sufrimiento de la mente aberrada era aliviado mediante este proceso.

 

El Dr. Breuer había tropezado con algo extraordinariamente significativo, aunque hasta ahora, su descubrimiento, utilizado en alguna extensión por el psicoanálisis desarrollado por Sigmund Freud, nunca ha sido totalmente explorado en psiquiatría. El mismo psicoanálisis de Freud falló en no haber desarrollado el siguiente paso, como era el de la elaboración de métodos precisos para ayudar a la gente a señalar los incidentes aberrativos del pasado y descargar el sufrimiento mental, físico y emocional contenidos en esos incidentes. Freud se desvió hacia sus descuidados métodos de “asociaciones libres” con los cuales se hacían muy imprecisos los procesos de recordar. También sobreestimó los incidentes sexuales.


El avance vital del Dr. Breuer fue poderosamente golpeado por los acontecimientos que estaban sucediendo en la vecina Alemania durante esos días. Estaba emergiendo la “Psiquiatría Científica”.


Uno de los centros más antiguos de “psiquiatría científica” funcionó en Leipzig, Alemania. Allí, un hombre llamado Wilhelm Wundt, (1832-1920), estableció el primer laboratorio psicológico del mundo en el año 1879. Hasta esta fecha, era común que las universidades colocaran el estudio de la psicología en sus departamentos de filosofía debido a la persistente idea y creencia que en la psicología existe un lado espiritual del hombre. Sin embargo, el punto de vista de Wundt era que la psicología pertenecía a un laboratorio biológico. Para Wundt, los seres humanos son sólo organismos biológicos en los cuales no existe el agregado de las realidades espirituales. Por lo tanto consideró su planteamiento más científico que filosófico.


La teoría de Wundt acerca de la mente era que el pensamiento humano es causado por estímulos que ha recibido el cuerpo y registrado en el pasado. Cuando sucede esta identificación, el cuerpo o el cerebro, mecánicamente crea un acto “voluntario” con el que responde al nuevo estímulo. No hay tal cosa como pensamiento auto-creado o voluntad libre. Para Wunt y sus seguidores, el hombre sólo era un organismo tipo robot-sofisticado.


Las ideas de Wundt estaban basadas en experimentos realizados en su laboratorio y en otras partes. Algunos de esos experimentos revelaban que uno podía producir las manifestaciones fisiológicas de diferentes emociones, aplicando estímulos eléctricos en diferentes partes del cerebro. Erróneamente, los experimentadores concluyeron que el cerebro en consecuencia, es la fuente de la personalidad, ya que desencadena las emociones físicas de la emoción y el pensamiento. La falsedad de este razonamiento es evidente. La persona que realiza el experimento está aplicando estimulación externa. En otras palabras, los centros del cerebro no se auto-disparan excepto en un sentido muy limitado.

 

Los experimentos prueban que esto toca algo más, algo externo, para disparar o desencadenar aquellos centros cerebrales. ¿Qué, entonces, disparará aquellos centros cuando el experimentador no está aplicando sus electrodos? Allí debe haber otra fuente externa —un elemento extraño y faltante. Este elemento faltante parece ser la entidad espiritual, la cual produce su propia energía de salida. Aunque Wundt y otros estaban usando experimentos para “probar” una base puramente biológica para el pensamiento humano, de hecho, los resultados estaban sutilmente apuntando en la dirección opuesta.


Errado o no, el modelo de comportamiento de estímulo-respuesta desarrollado en Leipzig, rápidamente se convirtió en una “nueva ola” dentro de la psiquiatría y recibió considerable apoyo del gobierno alemán. Wundt mismo, desde entonces se convirtió en la figura más influyente de la psiquiatría científica en los siguientes cuarenta años. El laboratorio de Leipzig atrajo muchos estudiantes de casi todo el mundo, algunos de los cuales llegaron a ser posteriormente famosos personajes de la psiquiatría. Un ejemplo fue un estudiante procedente de Rusia llamado Ivan Petrovich Pavlov (1949-1936), quien ganó fama por sus experimentos con campanas y perros salivantes.

 

El escritor Duane P. Schultz, en su libro: “Una historia de la Psicología Moderna”, resume esto muy bien:

“Por intermedio de esos estudiantes, el laboratorio de Leipzig ejerció una inmensa influencia sobre el desarrollo de la psicología. Sirvió como modelo para muchos nuevos laboratorios que se estaban fundando en la última mitad del siglo XIX. Muchos estudiantes que acudían en masa a Leipzig, unidos como estaban en puntos de vista y propósitos comunes, constituyeron una escuela del pensamiento en psicología.”

Mediante la redefinición de la naturaleza de la conducta y el comportamiento, la psicología también redefinió la naturaleza de la anormalidad mental y su curación. Los métodos para evitar y pasar por alto el intelecto y la libre voluntad humana —modificación de la conducta— fueron desarrollados y explorados. Ya que los seres humanos eran vistos como organismos estrictamente biológico-eléctro-químicos, se decía que toda la enfermedad mental era el resultado de procesos fisiológicos de alguna manera del mismo tipo. Los experimentadores teorizaron que la enfermedad mental podía ser curada estrictamente por medios fisiológicos tales como: drogas, tratamiento de choque o electrochoque, y cirugía del cerebro. Se creía que tales tratamientos podían remediar el des-balance químico o eléctrico y así curar la enfermedad mental misma.


Producto de esas teorías surgió una industria de la droga multimillonaria en dólares, la cual cada año distribuye una enorme cantidad de drogas para la alteración del carácter humano. Estas drogas están diseñadas para mejorar cada enfermedad mental, desde “no puedo dormir en la noche” hasta la psicosis violenta. Además, muchos psiquiatras usan máquinas especiales para enviar choques eléctricos a través del cerebro de una persona. Otros recurren a la cirugía del cerebro.

 

Ahora bien, aquellos que hemos tenido casi medio siglo para observar esas curas en acción, podemos preguntar:

“¿Han beneficiado a la humanidad? ¿Es el mundo un más sano hoy que lo era hace cincuenta años? Para responder esas preguntas, podríamos analizar uno de los tratamientos más frecuentes prescrito por los psiquiatras: las drogas psicotrópicas, esas que afectan la mente”.

La industria de las drogas psicotrópicas es colosal. Abarca una porción del total del negocio de las drogas de prescripción que para el año 1978 ya alcanzaba 16.700 millones de dólares en ventas al mayor dentro de las ventas globales y solamente de fabricantes norteamericanos. Esta cifra no incluye las ventas de fabricantes suizos y otros europeos.


Un excelente libro publicado en los Estados Unidos, denominado “El Tranquilizante de América” (“The Tranquilizing of America”) revela que la droga más frecuente prescrita, Valium, de los Laboratorios Roche, fue recetada más de 57 millones de veces en 1977, incluyendo las repeticiones. De acuerdo a un anuncio publicado en 1981 por Roche, casi 8 millones de personas, es decir, alrededor de un cinco por ciento (5%) de la población adulta norteamericana, usó Valium ese año.

 

Sume a esta enorme cifra, decenas de millones de recetas para otros medicamentos psicotrópicos y descubriremos que una enorme cantidad de drogas alterantes de la mente y modificadoras de la conducta están consumiéndose cada año en los Estados Unidos. En 1977 por ejemplo, el número total de prescripciones para las veinte mayores drogas psicotrópicas de los Estados Unidos, sobrepasó los 150 millones. Esto significa la colosal suma de 8.350 millones de píldoras. Esos medicamentos están siendo recetados en cantidades similares hoy en día.


Este uso epidémico de drogas no es accidental. Las poderosas medicinas psicotrópicas son promovidas enérgicamente para la comunidad de médicos mediante anuncios publicitarios en lujosas revistas diseñadas en la Avenida Madison de New York tal como la “American Journal of Psychiatry”, y directamente a los médicos en diversos y numerosos talleres y seminarios patrocinados por las compañías productoras de drogas.


Hay una crítica realmente justificada en contra de la psiquiatría orientada hacia la droga, debido al creciente número de pacientes deteriorados y empeorados como resultado de su tratamiento psiquiátrico. Por ejemplo, es sorprendente el gran número de personas que cometen actos de violencia aparentemente absurdos y sin sentido, tales como asesinatos múltiples por disparos a la loca y otros actos espeluznantes que aparecen frecuentemente en los titulares de noticias, y que esas personas están siendo o han sido tratadas con drogas psicotrópicas.

 

Un ejemplo notable es el de John Hinckley Jr., quien estaba bajo la influencia de Valium cuando intentó asesinar al Presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan en 1981. Tales coincidencias generalmente se explican indicando que esas personas estaban ya mentalmente trastornadas antes del episodio violento, y lo peor, que las drogas fueron incapaces de ayudarlos. En otras palabras, la crítica afirma que esos individuos antes del tratamiento no eran violentos en general, y que se transformaron en violentos sólo después del tratamiento. ¿Realmente los tratamientos psiquiátricos empeoraron su estado mental hasta el punto de hacerlos totalmente psicóticos?


Uno de los grandes triunfos de la U.S. Food and Drug Administration, —USFDA— es el requisito que todos los fabricantes de drogas están obligados a cumplir: poner en una lista todos los efectos secundarios o “reacciones adversas” conocidas que sus drogas han causado. Esta revelación obligatoria pone en alerta a los médicos de los posibles peligros y los guía en conocer o saber cuándo quitar una droga a un paciente. Desgraciadamente, cuando una reacción adversa se hace visible al doctor, ya el daño puede haber sido hecho. La mayoría de las reacciones adversas desaparecen cuando se descontinúa la medicina, pero algunos efectos secundarios pueden hacerse permanentes y causar complicaciones duraderas. Esto es especialmente preocupante cuando descubrimos que muchas de las reacciones adversas son psicológicas.


Una persona común que abre una copia de la revista Journal of Psichiatry y ve por primera vez el anuncio de un medicamento, puede reaccionar con un choque, no sólo por la ingeniosa presentación del producto para la venta, sino por lo que dice la letra pequeña. Cada medicamento psicotrópico publicitado viene acompañado de una larga lista de reacciones potenciales físicas y psicológicas adversas. La mayoría de los efectos secundarios de la lista están redactados en términos médicos incomprensibles para el lego. Sin embargo, muchos de ellos son bastante entendibles. He aquí un muestrario de reacciones adversas potenciales enlistadas a medicamentos psicotrópicos populares, publicitados y recetados en la década de los ochenta.

La droga SURMONTIL (Laboratorios IVES) a la cual se le hace promoción como droga para ayudar a una persona a superar los síntomas de la depresión, enlista entre sus posibles efectos secundarios:

estados de confusión (especialmente en ancianos) con alucinaciones, desorientación, delirio, ansiedad, inquietud, agitación, insomnio y pesadillas, hipomanía (excitación anormal); exacerbación (intensificación) de la psicosis.

HALDOL (Mc.Neil Pharmaceutical) es presentada como una forma de manejar un paciente con agitación aguda. Esta puede causar:

insomnio, ansiedad, inquietud, euforia, agitación, depresión, somnolencia, letargo, cefalea, confusión, vértigo, ataque de apoplejía y exacerbación de signos psicóticos incluyendo alucinaciones y estados de comportamiento semi-catatónicos.

THORAZINE, presentado como medicamento para manejar adultos y niños psicóticos, pertenece a una clase de droga conocida por causar lo siguiente:
síntomas psicóticos, estados semi-catatónicos, edema cerebral (exceso de fluidos en el cerebro), ataques convulsivos, anormalidad del líquido proteínico cerebro-espinal…

 

Nota: muerte repentina en pacientes tomando fenotiazinas (la clasificación de drogas a la cual pertenece Thorazine) aparentemente debido a paro cardíaco o asfixia ocasionada por una falla del reflejo de la tos. Esto ha sido reportado pero no se ha establecido ninguna relación causal.


La última frase de la lista anterior es un trozo notable de un doble discurso. Establece que el dar a alguien esta clase de droga ha coincidido con su muerte repentina, pero el productor de la droga niega que haya alguna evidencia de que haya sido la droga la responsable de las muertes. ¡No hay duda que sólo fue una extraordinaria coincidencia la de que algunas personas hayan sufrido paros cardíacos o fallas en el reflejo de la tos en el tiempo en que tomaron la droga! ¡Efectivamente, el destino debe trabajar en forma misteriosa!


STELAZINE, otra droga de Smith Kline, presenta una lista con muchas de las mismas reacciones adversas del Thorazine, y añade:

“hipertensión (algunas veces fatal), paro cardíaco”, a su larga lista de reacciones medicamentosas adversas.

La droga se presenta como un “clásico anti-psicótico” NORPRAMIN (Merrel Dow Pharmaceutical Inc.), pone una lista con las mismas reacciones adversas indicadas anteriormente para la droga Surmontil, pero añade “obstrucción del corazón, ruptura del miocardio y apoplejía”.

 

La misma droga relativamente “suave”, VALIUM, tan ampliamente recetada hoy día, advierte:

“reacciones contradictorias tales como estados hiper-excitados agudos; ansiedad, alucinaciones, incremento de espasmos musculares (calambres), insomnio, enojo, perturbaciones del sueño y estimulación, han sido reportados. Si eso ocurriera, suspenda la droga ”.

Las drogas presentadas aquí son sólo una muestra. Casi todos los medicamentos anunciados en la publicación “American Journal of Psychiatry”, tienen una larga lista de idénticas o similares reacciones adversas potenciales. Las consecuencias de estas son significativas. Se han conocido casos en que esas drogas han empeorado seriamente el estado mental de una persona o han causado problemas mentales mucho más graves que los que presentaba en un principio el paciente.


Como anotamos, los médicos recetan esas drogas porque las reacciones adversas severas anunciadas sólo ocurren en una minoría de casos y muchos de los efectos secundarios son reversibles al descontinuar la droga. Sin embargo, el camino dejado atrás por muchas reacciones adversas puede ser largo. Una persona sufriendo un ataque psicótico, sea por estrés emocional o por una droga, puede llevar largo tiempo en recuperarse. Mientras tanto, puede hacerse considerable daño a sí mismo o a otros.

 

Cuando consideramos la enorme escala sobre la cual son recetadas esas drogas, aun cuando sea un pequeño porcentaje de pacientes los que sufren una severa reacción psicológica, será un gran número de individuos los que la sienten. Esto explica inmediatamente el acertijo, el acertijo de por qué algunos enfermos mentales parecen “marcharse a un profundo fin” después del tratamiento.

 

Lamentablemente, poca gente culpará a la droga aún en casos donde la droga puede ser la causa; en su lugar culparán al paciente, —él se pasa todo el tiempo balanceándose cerca del borde de la azotea—, o la sociedad, —mira cómo la sociedad ha enloquecido a este pobre individuo—. La gran tragedia es que algunos niños pueden afectarse por esto. Muchas escuelas y centros médicos son rápidos en dar poderosos psicotrópicos para tratar problemas de niños y adolescentes.


Se argumenta que el número de personas que son mejoradas por las drogas excede en mucho a aquellos que son empeorados. La defensa cita estadísticas señalando que las drogas posibilitan a muchos pacientes el abandono de instituciones psiquiátricas y el regreso a la comunidad más rápido. Las drogas psicotrópicas parece que capacitan a algunas personas para mantener sus síntomas psicológicos bajo control hasta el punto que pueden llevar una vida útil en sociedad. La cuestión es: ¿a cuál costo se obtienen esos aparentes beneficios?


Como muchos psiquiatras saben, las drogas psicotrópicas raramente curan la enfermedad mental. Ellas, simplemente suprimen los síntomas. A este respecto, los psicotrópicos son como las medicinas “frías”, las cuales hacen que la persona se sienta mejor y aparentemente saludables, pero que raramente curan la enfermedad subyacente misma. Cuando una persona se le quita el medicamento, generalmente reaparecen los síntomas.

 

El paciente no funciona mejor que como lo hacía antes y aún puede empeorar por sufrir los efectos secundarios de las drogas. En consecuencia, muchos psiquiatras no hablan de “curación” sino de “mantenimiento”. La psiquiatría se jacta de una rata de “curación” baja, pero de una alta rata de “mantenimiento”. Tanto tiempo como las fábricas vomiten píldoras, las drogas de “mantenimiento” pueden continuar.


¿Es esto bueno para el paciente? ¿A la larga, realmente la sociedad está siendo ayudada?


El peligro con la psiquiatría orientada hacia el mantenimiento es que la enfermedad mental es, en cierto sentido, contagiosa. Este hecho se hace más evidente en el fenómeno de la psicología de masas así como en otras circunstancias. Si la gente no está realmente siendo curada de la enfermedad mental sino que se le está enmascarando sus síntomas, y entre tanto la aberración mental se expande por otras causas, de esto sigue que la enfermedad mental probablemente aumentará en cualquier sociedad confiada a las drogas como terapia. Si los psicotrópicos están también arrastrando a miles de personas cada año dentro de un laberinto psicológico más profundo debido al peligroso efecto secundario, podemos ver que los riesgos de la psiquiatría orientada hacia las drogas empujan a la sociedad hacia la ruina, ya que los psicotrópicos constituyen la principal forma de terapia en la mayoría de las instituciones psiquiátricas de hoy.


El peligro de las drogas psicotrópicas duras es aumentado por otro factor. La comunidad psiquiátrica enfrenta un gran problema con la anormal y alta rata de suicidios de sus médicos practicantes. Los psiquíatras en los Estados Unidos mantienen una rata de suicidios seis veces más alta que la población en general. El más alto porcentaje de aquellas muertes auto-inducidas sucede en médicos que trabajan en hospitales mentales. Esta alta rata de suicidios es vista muchas veces como un riesgo ocupacional causado por la frustración y por el continuo contacto psiquiátrico con la enfermedad mental.

 

Cualquiera que pueda ser la causa, esta estadística de suicidios es una razón para tomar en cuenta en relación al bienestar del enfermo mental. Los suicidios generalmente son precedidos por un período de declinación de la salud mental. Es muy raro encontrar a una persona bien ajustada y genuinamente estable cometiendo suicidio. Una de las mayores tareas de un psiquiatra es el diagnóstico preciso y el tratamiento apropiado, ya que una de las manifestaciones más común de la enfermedad mental es la visualización de los propios problemas en otra gente.

 

Por lo tanto, un psiquiatra en estado de pre-suicidio se expone a ser la fuente de crueles diagnósticos equivocados porque le puede diagnosticar a un paciente lo mismo que realmente está sufriendo él. Debido a que un diagnóstico errado y un mal tratamiento pueden arruinar la vida de una persona, especialmente en el ambiente de un hospital donde se usan poderosos psicotrópicos, terapia de choque y psico-cirugía, es vital que los tratantes psiquiátricos y técnicos estén genuinamente sanos, social y bien ajustados. Desgraciadamente, una gran minoría de ellos no lo está.

El uso epidémico de drogas psicotrópicas, crea además otro significativo problema. El abuso de las drogas está considerado una de las mayores enfermedades sociales de hoy. Las agencias encargadas de la aplicación de la ley gastan una enorme cantidad de dinero y tiempo para combatir la droga. La batalla contra el abuso de las drogas está basada en la filosofía que la gente no debe tomar drogas ilegales por que altera su estado mental y su comportamiento. La psiquiatría moderna derrota esta campaña.


La psiquiatría orientada hacia la droga nos dice:

  • ¿Te sientes deprimido? Toma una droga.

  • ¿Te sientes demasiado eufórico? Toma una droga.

  • ¿Te sientes incapaz de hacer frente a los problemas? Toma una droga.

  • ¿Te sientes demasiado capaz frente a los problemas, (Megalomaníaco)? Toma una droga.

  • ¿Te sientes confundido e indeciso? Toma una droga.

  • ¿Te sientes demasiado ilusionado? Toma una droga.

  • ¿No puedes dormir? Toma una droga.

  • ¿Duermes demasiado? Toma una droga.

  • ¿Ves cosas que no existen (alucinaciones)? Toma una droga.

  • ¿No ves las cosas que existen? Toma una droga.

La psiquiatría orientada al mantenimiento promueve una verdadera actitud sobre la cual el tráfico ilegal de drogas florece:

  • ¿Quieres sentirte mejor mentalmente y emocionalmente? Toma una droga.

La gran ironía es que algunos jueces “muy conservadores y apegados a la ley y el orden”, y algunos legisladores que piden penas severas para los consumidores de drogas ilegales, están entre los que actúan con celeridad para poner toda una maquinaria legal que sirva para someter involuntariamente a gente a instituciones mentales donde son usadas rutinaria y abiertamente drogas tan poderosas como algunas del mercado ilegal.


El propósito de esta discusión no es impugnar el campo general de la terapia mental.


Como se mencionó antes, hay muchos buenos psiquiatras en ejercicio y práctica en la actualidad. También es notoria la existencia de muchos terapistas y consejeros especializados en terapia orientada hacia la comunicación oral y sin drogas, quienes logran excelentes resultados y hacen mucho por ayudar a sus pacientes. Para entender los problemas específicos de la psiquiatría científica, es quizá sabio recordar que los psiquiatras, —pero no la mayoría de los psicólogos—, son personas con grado médico. Los doctores están entrenados en escuelas de medicina para curar problemas físicos utilizando medios físicos, por ejemplo: bombardear una infección con antibióticos o fijar una pierna fracturada con una escayola.

 

Donde muchos doctores se extravían es en creer que un problema mental es lo mismo que una pierna fracturada o una infección viral; y entonces proceden a bombardear la “enfermedad mental” con drogas o le aplican un choque con electricidad. Tal enfoque yerra el objetivo porque una “mente fracturada” puede abordarse bajo una serie de reglas totalmente diferentes. Esto es bien reconocido así por el hecho que la mayoría de las naciones permite a gente que ejerzan como terapistas y consejeros sin que posean un grado médico.


Las filosofías de estricto tinte materialista, que han dado nacimiento a una floreciente profesión de psiquiatría: ¿han traído una mayor cordura a pacientes, practicantes y al mundo en general? Desgraciadamente, la respuesta parece ser: no.


La psiquiatría empezó en el camino correcto cuando descubrió que la mente podía ser curada de la enfermedad inorgánica mediante la confrontación del pasado escondido en traumas, pero falló al no desarrollar este descubrimiento más allá de las crudas y desordenadas técnicas usadas hoy en la psicoterapia.


La psicoterapia se descarriló cuando empezó a enmascarar el problema mental con químicos y cuando desarrolló métodos extraños para pasar por alto la voluntad libre del individuo en favor de la manipulación del estímulo-respuesta en la modificación de la conducta y comportamiento humano.


Tal vez ya es tiempo de remover aquella perspectiva de estricto materialismo, erradicar las drogas y comenzar por restablecer un sentido de respeto por la libre voluntad y el intelecto de los seres humanos. Entonces podremos verdaderamente ser capaces de comenzar de nuevo el camino hacia la genuina recuperación mental, social y espiritual de la raza humana.

 

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El Regreso de San Germain

Los acontecimientos de los primeros años del siglo XX, convencieron a mucha gente que el Día del Juicio había llegado. Muchos cristianos y místicos anticiparon una inminente Segunda Venida de Cristo. En verdad, para la profecía, llegó.


Anunciando la Segunda Venida de Jesús estaba el resucitado Conde de San Germain, - el misterioso agente de la Hermandad del siglo XVIII, cuya actividad seguimos en el capítulo 26. Después de la relatada muerte de San Germain en 1784, él hizo entender que era físicamente inmortal. Al comienzo de la década de 1930, un hombre llamado Guy Warren Ballard declaró que San Germain había hablado con él en una montaña de California. Esta conversación dio nacimiento a una nueva e interesante rama de la Hermandad, que no sólo patrocinaba el regreso de San Germain sino también la reaparición de “Jesucristo”.

Guy Warren Ballard era un ingeniero de minas. En 1930 hizo un viaje de negocios a Monte Shasta en el norte de California. Ballard estaba interesado en el misticismo antes de viajar y quería usar sus horas libres en Monte Shasta para desenmarañar los rumores acerca de la existencia de una rama secreta de la Hermandad llamada, la “Hermandad del Monte Shasta”. Se decía que la Hermandad Shasta tenía una sede secreta subterránea en el interior de la famosa montaña de California.


La leyenda que había cautivado el interés de Ballard comenzó a circular antes del cambio de siglo. Rumores persistentes hablaban de moradores secretos viviendo dentro de la montaña de Shasta que practicaban una profunda tradición mística. Se afirmaba que los moradores secretos eran descendientes de los pobladores del antiguo continente desaparecido de Lemuria en el Océano Pacífico.


Cualquiera que sea la verdad detrás de tales leyendas, es incuestionable que Monte Shasta ha sido por mucho tiempo un foco de actividad mística. Asociado con esta actividad mística ha estado un significativo fenómeno OVNI. Por ejemplo, en Mayo de 1931 salió en la revista Rosicrucian Digest —(publicada en año después del viaje de Ballard a Shasta y una década y media antes de que en los medios estuvieran popularizados los OVNI) —leemos la siguiente descripción de un “bote” volante en un artículo acerca de la mística Shasta:

“Muchos dan testimonio de haber visto una extraña embarcación o bote que navegaba en el Océano Pacífico, entonces se elevó en la costa y navegó por el aire para descender otra vez en la vecindad de Shasta. Este mismo barco fue visto varias veces por oficiales empleados de la estación de cables localizada cerca de Vancouver, y el bote ha sido visto tan al norte como las islas Aleutianas…”.

De acuerdo al mismo artículo, el barco “no tiene velas ni chimenea”161. Considerando este ambiente, la experiencia de Ballard en Monte Shasta toma más significación.


El señor Ballard escribió que cuando estaba subiendo por un lado de la montaña hizo un alto en un manantial. Al inclinarse para llenar un envase con agua, sintió cómo una corriente eléctrica pasaba a través de su cuerpo desde la cabeza hasta los pies. Vio a todos lados y detrás suyo estaba un hombre barbudo el cual aparentaba tener entre 20 y 30 años. De seguida, el extraño se presentó como el Conde de San Germain. (*)

 

(*) La apariencia física de San Germain sobre el Monte Shasta era considerablemente diferente a la del San Germain de el siglo 18. En la primera San Germain tenia 40 años, cabello negro y limpiamente afeitado. El San German de Monte Shasta es descrito como un hombre con un juvenil de cabello castaño luciendo barba.


Como un resultado de este encuentro, Ballard comienza una campaña a tiempo completo para diseminar las enseñanzas del nuevo San Germain. Ballard fundó la “Fundación I AM” (YO SOY), una organización con iniciación secreta y enseñanza paso-por-paso. Ballard afirma que se le presentó a los miembros de los más altos niveles la Hermandad, bajo quienes fue fundada I AM.


Los relatos de Ballard hablan de sus experiencias con San Germain en forma tan extraordinaria, que mucha gente los toma como fantásticos y se burlan de ellos. Es sorprendente, que cuando ponemos a un lado las interpretaciones que el mismo Ballard y sus críticos dan a sus experiencias, encontramos que su historia presenta una imagen no sólo consistente con el resto de la historia que hemos estado viendo, sino que añade afirmaciones notablemente nuevas, con abundantes consecuencias sobrecogedoras para nuestro propio tiempo.


Los primeros encuentros entre Ballard y “San Germain” se llevaron a cabo en Agosto y Octubre de 1930. Durante los primeros encuentros, San Germain dio a tomar a Ballard un líquido, el cual causaba una fuerte reacción física y hacía que Ballard estuviera “fuera del cuerpo”. (Este mismo fenómeno fuera-del-cuerpo es declarado con frecuencia por gente que toma drogas). Después de beber este líquido en varias ocasiones, Ballard dijo que podía “salirse del cuerpo” sin la bebida. Este testimonio es consistente con otras evidencias que indican que una vez que una persona aprende a “salir del cuerpo”, puede ser fácil hacerlo otra vez.


Ballard alega que mientras estaba en alguno de sus estados “fuera del cuerpo”, San Germain, quien también estaba fuera del cuerpo, lo llevó a muchos lugares importantes. Uno de los lugares fue una montaña en Teton Range, Wyoming; una montaña que Ballard llama “Teton Royal”. De acuerdo a Ballard, había una entrada a un túnel sellado cerca de la cima de la montaña que conducía a un ascensor.

El ascensor llevaba a sus ocupantes a un local dos mil pies hacia abajo dentro de un complejo subterráneo de enormes salas, espacios de almacenamiento y minas.


En uno de los grandes salones subterráneos, Ballard declara haber visto el símbolo del “ojo que lo ve todo” en una pared. Había también una gran máquina, la cual describe Ballard como:

“un disco de oro (*) --de no menos de 20 pies de diámetro. Rellenándolo de tal forma que las puntas tocaban la circunferencia—había una resplandeciente estrella de siete puntas-compuesta totalmente de diamantes amarillos—una masa sólida de dorada luz brillante.”

 

(*) Ballard en sus escritos separa las oraciones con guiones (-). Se incluyen los guiones como aparecen en el texto original.

Alrededor del disco principal habían siete discos pequeños, los cuales Ballard dio un significado simbólico. Sin embargo, Ballard rápidamente reveló que su gran máquina no era un mero símbolo:

“Como supe más tarde, en ciertas ocasiones y para propósitos especiales—los ’Grandes Seres Cósmicos’ vierten a través de esos discos—sus poderosas corrientes de fuerzas”.

Grandes Seres Cósmicos” fue el término usado por Ballard para designar los líderes en los más altos escalones de la Hermandad. En sus escritos, Ballard declara que algunos de los “Grandes Seres Cósmicos” de la Hermandad son de origen extraterrestre.


Ballard estaba diciendo que las corrientes de fuerza emitidas por la máquina estaban dirigidas hacia la “humanidad de la Tierra”. ¿El propósito?

“Esta radiación afecta—los siete centros ganglionares (centros nerviosos fuera del cerebro y la médula espinal) dentro de cada cuerpo humano en nuestro planeta – así como a toda la vida vegetal y animal”.

Esta es una asombrosa declaración, porque esto significa que una poderosa electrónica estaba siendo usada por los “Grandes Seres Cósmicos” de la Hermandad para afectar el sistema nervioso de los humanos en gran escala. De acuerdo a una revista de la Fundación I AM, el propósito de la radiación era la alteración del comportamiento de la persona, diseñada para “consumo y purificación del vórtice de fuerza producido por la actividad discordante y viciosa de la humanidad”.


La idea de modificar el comportamiento mediante radiación electrónica, por lo menos no es tan absurda. En años pasados recientes, la URSS ha estado desarrollando y usando máquinas electrónicas “tranquilizantes” para afectar el comportamiento de grandes poblaciones. Tales equipos también han sido propuestos en los Estados Unidos para usarlos en salones de clases. Discutiremos esos instrumentos en un capítulo posterior.


Aunque el propósito alegado para la máquina de radiación de Royal Teton era el de reducir la actividad discordante de la humanidad. Tal radiación realmente podría tener efectos adversos a largo término debido a que las emanaciones son efectivamente irritantes para el sistema nervioso central, aunque causen una sedación superficial, (efecto sedante). Es irónico quizás, que en menos de una década después de los escritos de Ballard, estalló en el mundo uno de los conflictos más sangrientos de su historia: la Segunda Guerra Mundial.

 

¿Es que la máquina de los Grandes Seres Cósmicos no funcionó? ¿O sí?


En su primer libro, Ballard declara haber visitado cuatro locales subterráneos secretos totalmente: dos de ellos mientras estaba “fuera del cuerpo” y dos por medios humanos corrientes. Asombrosamente, cada local correspondía a una región en la cual existía en los comienzos de la historia, una civilización mayor devota de los dioses” Custodios.

 

El sitio de Teton coincide con las antiguas civilizaciones de Norteamérica. Un local subterráneo similar en Suramérica coincide con la civilización Inca de ese continente. Un viaje por barco y luego en automóvil terminó en una escala de un reputado sitio subterráneo en la península Arábica que se corresponde con las antiguas civilizaciones egipcia y mesopotámica. La cuarta localidad en las montañas sobre la ciudad sobre la ciudad de Darjeeling en la India, corresponde a las antiguas civilizaciones del subcontinente Indio.


Las localidades subterráneas eran declaradamente muy extensas y servían a numerosas funciones. Además de las instalaciones de los equipos electrónicos, se dice que las galerías estaban llenas con enormes cantidades de metales preciosos y joyas. Esto es interesante debido a que sabemos que la mayoría de las antiguas civilizaciones que veneraban a los “dioses” Custodios, regularmente hacían sustanciales ofrendas en oro, plata, joyas y otros minerales preciosos a sus adorados “dioses”.

 

Ballard alegaba que los tesoros vistos por él venían de alguna de aquellas civilizaciones:

“En esos almacenes, el oro de los continentes perdidos está depositado—de Mu y la Atlántida—antiguas civilizaciones del Gobi y del desierto del Sahara (*) –- Egipto—Caldea—Babilonia—Grecia—Roma—otros dos más”.

(* ) Las antiguas civilizaciones del Gobi y del desierto de Sahara eran civilizaciones mayores que se cree que existieron alguna vez en el desierto del Sahara en el Norte de África y el desierto del Gobi en el Centro Este de Asia. Al igual que Mu y la Atlántida, Gobi y Sahara se dice que existieron antes de Sumeria y por lo tanto están relegadas al estado de ficción por la mayoría de los historiadores. Según la leyenda, las civilizaciones Gobi y Sahara fueron destruidas en una guerra cataclísmica y se dice que eran tecnológicamente muy avanzadas, y los desiertos en los cuales habían estado asentadas se cree que fueron alguna vez, cubiertos con vegetación.

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Los geólogos modernos han descubierto trazas de explosiones atómicas en esas regiones, pero estos indicios se explican comúnmente causados por la combustión espontánea de elementos radiactivos naturales hace mucho tiempo. Otros creen que las trazas son el resultado probable de armas atómicas usadas miles de años atrás en la destrucción de las antiguas civilizaciones, donde también se destruyó la vegetación circundante, causando que sus áreas se convirtieran en los desiertos que hoy conocemos.


Los historiadores generalmente asumen que las antiguas ofrendas iban a la clase sacerdotal. Sin embargo, si tomamos en serio la existencia de los “dioses” Custodios, es muy probable que los “dioses” realmente cargaron con la materia prima.


El testimonio de Ballard indicaría que una gran parte de las piedras preciosas y metales eran almacenados por los “dioses” en subterráneos inaccesibles localizados en toda la Tierra, quizás para ayudar a financiar las actividades Custodias y mantener funcionando la Hermandad corrupta.


Los metales y piedras preciosas son enormemente caros debido a su escasez artificial. Cuando Cecil Rhodes desarrolló su casi monopolio con las minas de diamantes en Sur África, logró mantener altos los precios, creando un rígido canal de comercialización mediante el cual vendía sus diamantes. Todavía hoy, así funciona el comercio del diamante. De acuerdo a Ballard, los “Maestros Ascendidos” de la Hermandad intentan mantener escasos los metales y piedras preciosas.

 

Dice Ballard:

“Si todo este oro pudiera ser liberado hacia la actividad exterior del mundo –podría obligar a un reajuste repentino– en cada fase de la experiencia humana. En el presente—no forma parte—del buen juicio”.

Se dice que San Germain estableció que la enorme cantidad de oro y tesoros sería liberado en el mundo externo “cuando la humanidad haya sobrepasado su desenfrenado egoísmo”.


La consecuencia es que esos minerales y gemas existen en cantidades suficientes en la Tierra como para causar una dramática caída en su valor si fueran liberados dentro del dominio público. Una consecuencia más es que ellos lo han acumulado y hecho escaso para proteger la riqueza de la Hermandad. Si verdaderamente existen los tesoros, entonces la Hermandad es un poder económico bastante grande oculto en la Tierra. De acuerdo a Ballard esta economía escondida puede existir y ha sido usada para influir en las actividades humanas.

 

Durante su gira por la localidad de Teton, San Germain le dijo a Ballard:

“Nadie—en este mundo—nunca acumuló una gran cantidad de riqueza—sin la ayuda y radiación de algunos—Maestros Ascendidos. Hay ocasiones—en las cuales individuos pueden ser usados como un foco de gran riqueza—para un propósito específico—y en tales casos—gran poder adicional es irradiado a ellos—para que por su intermedio—ellos puedan recibir ayuda personal. Tal experiencia es—una prueba—y oportunidad—para su crecimiento”.

Es completamente cierto que la riqueza ha estado concentrada en una pequeña minoría. También es verdad que muchos de los miembros de esa minoría se han afiliado a la red mística de la Hermandad, a través de la historia. El problema con este estado de cosas no sería, el estricto control de la riqueza; sería que este control con mucha frecuencia tiene que ser usado para engendrar la guerra y la degradación espiritual.


Durante sus viajes a las presuntas localidades subterráneas, a Ballard se le señaló algunos aparatos tipo radio. Unos de tales aparatos podía ciertamente sintonizar las conversaciones que se llevaban a cabo en varias partes del mundo, —incluyendo aquellas que se efectuaban en las oficinas del Banco de Inglaterra. Como recordaremos, el Banco de Inglaterra fue una de las primeras instituciones fundamentadas en el sistema de papel moneda inflacionario. Este sistema fue en gran parte creación de los místicos y revolucionarios afiliados con la red de la Hermandad.

 

El Banco de Inglaterra ha seguido siendo centro principal de este sistema hasta el día de hoy. La pretendida capacidad de la “estación de escucha” de los “Maestros Ascendidos” de Ballard es por lo tanto, notable, porque podría indicar un monitoreo directo de un banco central principal del sistema internacional de papel moneda, por la más alta jerarquía de la Hermandad. Esto llega a ser todavía más interesante en el siguiente capítulo cuando consideremos la ayuda que el Director del Banco de Inglaterra, Montague Norman, dio a Adolfo Hitler y al movimiento nazi alemán durante mucho del tiempo en que el entrometido electrónico estaba en funcionamiento, según se dijo.


Al principio de este libro, anotamos la destrucción en gran escala de los irremplazables registros históricos y religiosos en los Hemisferios Oriental y Occidental por fanáticos cristianos. De todas formas, los historiadores han sido capaces de reconstruir mucho de la historia; pero ¿Es completa esta historia?

 

De acuerdo al señor Ballard, no la es. La humanidad perdió registros adicionales cuando líderes de la Hermandad deliberadamente sacaron y escondieron escrituras. El señor Ballard declara que vio algunos de esos trabajos históricos antiguos dentro del complejo subterráneo de la montaña que está al Norte de Parjeeling en la India.

 

El añade que los registros no serían liberados a la raza humana hasta que los Maestros Ascendidos así lo ordenaran:

“Esos registros no serán sacados y puestos en uso del mundo exterior en el presente tiempo, debido a la falta de crecimiento espiritual y de comprensión de la gente. La raza tiene inquietud y sentido crítico por lo que es una actividad muy destructiva …..los Maestros Ascendidos de la Gran Hermandad Blanca siempre han previsto tales impulsos destructivos y han apartado todos los registros importantes de cada civilización y los han guardado, dejando los menos importantes para que fueran destruidos por los impulsos viciosos de los vándalos.”

Si eso es verdad, lo señalado arriba es una asombrosa admisión. La “falta de crecimiento espiritual” de la humanidad ha sido causada por muchas de las organizaciones a las cuales pertenecen esos presuntos “Maestros Ascendidos”.

 

Fue la Hermandad la que convirtió el conocimiento espiritual en,

  • símbolos incomprensibles

  • misterios inalcanzables

  • ritos supersticiosos,

  • apocalitcismo salvaje

  • y todas las demás enfermedades derivadas de todo esto...

En tales circunstancias, no es sorprendente que los seres humanos experimentasen “inquietud y sentimiento crítico”.

 

La solución de ocultar la sabiduría, en verdad que no podría corregir aquellas deficiencias humanas. Una solución así sólo puede profundizar el problema. La confesión de que importantes registros deben estar escondidos para prevenir su destrucción, es espuria. En los días de Ballard, la impresión de libros era ya un arte bien establecido. Cualquier registro importante puede ser fácilmente duplicado y producido en masa con los originales seguramente archivados en otra parte. Si realmente tales registros escondidos existiesen, debemos concluir que el único propósito es mantener a la humanidad ignorante del pasado.


El movimiento I Am creado por Ballard predicaba una filosofía del Día del Juicio y un fuerte anti-comunismo. A pesar de los ataques de la prensa y del gobierno de los EUA, el movimiento I Am atrajo una gran cantidad de partidarios en los finales de los 30’s y principio de los 40’s. I Am enseñaba que el comunismo era el real mal en el mundo y que pronto sería destruido por los Maestros Ascendidos. Extrañamente ninguna mención fue hecha del Nazismo, el cual crecía rápidamente en Alemania en esos tiempos.


Los Maestros Ascendidos y sus seguidores eran claramente criaturas políticas. Según Ballard, los miembros de la Hermandad estaban profundamente involucrados en organizaciones policiales y de espionaje en la década de los 30’s. Los miembros de la Hermandad supuestamente servían en el Servicio Secreto Americano y Ballard declaró que había encontrado agentes del Servicio Secreto Francés (Organización Nacional de Inteligencia Francesa) que eran miembros de la Hermandad y quienes se llamaban entre sí, “Hermanos de la Luz”.


Como si la reaparición de San Germain no fuera suficiente, el movimiento I Am presentó otro portavoz más distinguido: “Jesucristo”. Jesús fue un protagonista huésped de New York el 24 de Octubre de 1937; y de Oakland, California, el 15 de Febrero de 1939. Si este “Jesús” fue realmente una persona que proclamaba ser Cristo o simplemente el señor o la señora Ballard actuando como médium para canalizar la “voz del Espíritu” de Jesús, yo no soy capaz de descubrirlo.

 

Lo que esto pudo haber sido: ¿puedo presentar respetuosamente esto como una auténtica “Segunda Venida” de Jesús tal y como las religiones siempre lo habían ofrecido? Esta “Segunda Venida” de Jesús en los 1930’s fue patrocinada por la misma red de la Hermandad que había auspiciado y traicionado a Jesús siglos antes y que continuaba manteniendo vivas las enseñanzas apocalípticas prediciendo desde entonces el regreso de Jesús. Naturalmente que esta novedosa “Segunda Venida” no resultó en los mil años de paz y salvación espiritual. Concretamente, ayudó a colocar el piso para la II Guerra Mundial.


El movimiento I Am murió muy rápidamente después de haber alcanzado la cumbre en los años 1940’s. Actualmente es bastante pequeño (*).

 

(*) El movimiento I Am inspiró a varios grupos disidentes. Uno de tales grupos es el “Summit Lighthouse”, el cual realmente es el más grande de los grupos I Am, aunque no es reconocido por, ni afiliado formalmente con la organización original I Am discutida en este capítulo. Con su sede central en Malibu, California, el Summit Lighthouse es realmente dirigido por su co-fundadora Elizabeth Claire Prophet, quien junto con su antiguo marido, Mark Prophet presuntamente han sido miembros de otro grupo disidente de I Am llamado el “Puente a la Libertad”, antes de fundar el Lighthouse. Como el I Am de Ballard, el Summit Lighthouse cree que San Germain es un Maestro Ascendido. El Summit Lighthouse es bastante conocido porque el señor Prophet enseña que muchos de los OVNIS son hostiles al bienestar humano.

Nunca ganó el seguimiento y la influencia que alcanzaron muchas otras ramas de la Hermandad. Para mucha gente, la Fundación I Am es algo así como una curiosidad, gobernada por personas retiradas principalmente. En verdad, I Am no es importante para nosotros por lo que es hoy sino por lo que fue en los 30’s y 40’s.

  • ¿Fue la Fundación I Am de Ballard la evidente mezcolanza de un curandero espiritual ofreciendo un elixir hecho en casa para la gente que está buscando un rayo de esperanza en un mundo sombrío?

  • ¿Ballard realmente encontró a alguien esa tarde de 1930 sobre Mount Shasta?

  • ¿Fue I Am simplemente un pedazo de una juerga mística deslumbrante programada para hacer dinero por la familia Ballard, como lo han sostenido los críticos; o el señor Ballard, con sus relatadas experiencias, ofrece un extraño vislumbre dentro de las actividades de la Hermandad en el siglo XX?

Es una lástima que el señor Ballard no esté aquí para hacer sus confesiones.

 

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